Capítulo 16

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Esa tarde se respiraba bastante tensión en el ambiente. Desde por la mañana el equipo de seguridad de Alicia había estado preparándose para acompañarla al desfile de modas del que era la estrella invitada. Sara y los demás habían ultimado hasta el más pequeño detalle para que no hubiese ningún contratiempo durante la celebración del evento.

La joven heredera estaba en su habitación con su amiga Marla, que había venido con un par de estilistas para dejarla totalmente radiante. Marla también llevaba un vestido espectacular, ya que ella también había sido invitada al evento. En otras circunstancias Alicia estaría disfrutando mucho de estos momentos previos a su aparición pública, pero dados los últimos acontecimientos, se sentía ansiosa y un poco asustada. Marla se acercó a ella poniéndole un precioso collar de diamantes, las dos se miraron al espejo, satisfechas con su apariencia.

- Creo que hoy nadie podrá quitarte los ojos de encima – dijo Marla orgullosa de su amiga.

- Me gusta cómo nos vemos – respondió Alicia sonriendo.

- Yo sé de alguien que no va a poder dejar de mirarte hoy – dijo la morena con complicidad a su amiga.

- Tú crees? – pregunto Alicia con un poco de rubor en sus mejillas.

- No lo creo. Estoy segura – dijo Marla sonriendo – bueno es mejor que bajemos, hice que todo el mundo te esperase abajo, para que así la sorpresa de verte sea mayor.

- Ay Marla! para que tanta teatralidad? – preguntó Alicia Avergonzada.

- Es necesario amiga, no todos los días tu mejor amiga esta tan guapa! – dijo Marla dándole un cariñoso beso en la mejilla a su amiga – anda vamos que se nos hace tarde.

- Sí, tenemos que estar allí a las siete – dijo Alicia tomando su bolso.

Las dos jóvenes se dirigieron a la escalera que bajaba hasta la zona de recibimiento de la mansión, allí, Sara las esperaba acompañada de Steven. Rob y la otra parte del equipo de Alicia estaban en el coche de apoyo, mientras que Clara y el resto de los miembros del equipo de seguridad ya se encontraban en el lugar del evento. Primero apareció Marla que estaba preciosa con ese vestido blanco perlado que se ajustaba perfectamente a su estilizada silueta. Steven se la quedó viendo embobado, pero pronto disimuló su mirada, estaba un poco molesto por la desaparición sin dar explicaciones de Marla durante varias semanas. Los dos necesitaban una conversación para aclarar que era lo que estaba pasando entre ellos. Sara se quedó mirando a la morena y a su amigo y al ver la reacción de este, apretó los labios preocupada, después de saber lo que pasaba entre Marla y los dos hermanos, ella simplemente esperaba que las cosas se resolviesen de la manera menos dolorosa posible.

Pero, todos esos pensamientos y preocupaciones desaparecieron de su mente cuando Alicia apareció como una diosa, mientras bajaba por la escalera. El increíble vestido rojo que llevaba realzaba toda su belleza, era algo etéreo, como si al tocarla pudiese desaparecer y, aunque Sara hubiese querido ocultar su reacción, en ese momento todos sus sentidos estaban puestos en la mujer que bajaba por las escaleras. Sus miradas por fin se encontraron y Alicia se sintió intimidada pero a la vez alagada al notar la intensidad con la que su guardaespaldas la miraba. Sara se acercó al final de la escalera y tomó su mano para ayudarla a terminar de bajar.

- Alicia estas... no sé cómo describirte – dijo Sara sin encontrar las palabras adecuadas.

- Gracias Sara – dijo Alicia un poco avergonzada, pero feliz de ver el efecto que había causado en su guardaespaldas.

- Es hora de irnos – dijo Sara sin soltar su mano – equipo, prepárense para salir – informo por el comunicador de su cuello.

Todos se dirigieron a la salida donde Milton los esperaba con el coche encendido. Las dos jóvenes entraron a este, seguidas por Sara y Steven y todos tomaron rumbo al lugar. En el coche la tensión entre Steven y Marla se sentía, en otras circunstancias estarían hablando o bromeando, pero el joven se sentía ofendido por la falta de comunicación de la morena, el trayecto hasta el evento fue en silencio, solo cortado por el sonido de las notificaciones de los teléfonos de Marla y Alicia, quienes estaban recibiendo miles de mensajes de apoyo a través de las redes sociales de la heredera.

Sombras del pasadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora