ADVERTENCIA: ES NECESARIO LEER LA PRIMERA PARTE PARA ENTENDER ESTA
En la superficie la gente mira el cristal roto, pero no ve más allá de él y se pregunta cómo es que se rompió.
*Sinopsis en el interior*
Inicio: [01/08/2023]
Fin: [22/03/2024]
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
5 años después
Decidí escribir todo lo que sucediera para no olvidarlo, para que cuando nos reencontremos, no sientas que te has perdido estos años de nuestras vidas. Sin embargo, dado que es demasiado tiempo, trataré de ser breve:
Desde que salimos de la universidad, Ellie se hizo cargo de la empresa de su padre junto a él, fue tanto el impacto que tuvo que incluso salieron en la tele.
Damon abrió una pastelería en una de las zonas más prestigiosas de la ciudad, así que apenas lo veía.
Jaden se convirtió en el mariscal de campo de los Estados Unidos, por lo que era sumamente rico. En serio, deberías ver su casa. No soy muy fan del deporte, pero verlo en primera fila era impresionante, y por suerte para mí, me daba entradas gratis.
Mientras tanto, yo conseguí afiliarme con un compañero de la clase que abrió un galería de arte, y me permitía exponer mis obras. Mis pinturas solían reflejar mi percepción de la vida, enfocadas en las personas que me rodeaban. Quizás algún día puedas verlas.
Cerré la libreta y tomé el saco del respaldo de la silla, saliendo directo a la casa de Jaden. Al entrar al jardín el lugar era un caos. Había personas por todas partes organizando los preparativos. Al centro se encontraba un gran arco floral, abarcando todo el altar, y varias filas de sillas al frente. La mesa de bocadillos tenía más comida de la que podría comer, mientras personas con uniformes blancos llegaban con más postres en sus manos.
—Más vale que no toques nada antes de la ceremonia —escuché a mis espaldas.
Me giré sobre mis talones, mientras Damon caminaba hacia mí, esbozando una sonrisa y extendía los brazos para darme un abrazo rápido.
—No te creas tanto solo porque eres un poco famoso. Sigo prefiriendo los pasteles de Gwen —le dije, devolviéndole el abrazo.
—¿Desde cuándo no te veo? ¿Ya creciste? —me tocó el pelo y sacudí la cabeza para apartarlo.
—A esta edad ya no crezco. Y para tu información, te envié una invitación a mi última exhibición y no asististe.
—Eso no es verdad —respondió—. Porque Elai tomó un vídeo, y me lo mandó —me mostró la pantalla de su teléfono.
—Oye, son privadas — respondí, notando a una chica pelirroja con un vestido rojo que nos observaba disimuladamente desde atrás de él.
—Oye, nos vemos después, ¿sí? Tengo que seguir con los preparativos.
—Un momento —atrapé su brazo antes de que diera otro paso—. ¿Trajiste a alguien?
Él miró atrás por encima de su hombro.
—Sí, por favor no lo arruines.
Levanté una ceja de forma insinuante.
—¿Yo? Pero si soy la persona más tranquila del mundo. Además, si te acepta, debe aceptarte con familia.