Capítulo 12.

108 5 0
                                    

Los días pasan rápido aquí, otra semana más y a la vez una semana menos para volver a Miami, estoy tan cómoda aquí que no quiero volver pero tengo que hacer las prácticas y sólo será un mes así que podré volver después. Termino mis tareas, camino hacia el recinto donde Sam doma a los caballos, rastrilla la arena para dejarlo completamente liso. Me apoyo en la madera y lo observo fijamente con una sonrisa.

- Mi chica favorita. -Me saluda con un beso.- ¿Qué haces aquí?

- He terminado mis tareas. -Digo con una amplia sonrisa.

- Muy bien. -Sonríe.- A mí aún me queda limpiar el gallinero.

- No. -Contesto mirándolo.- También lo he hecho yo.

- Me quitas el trabajo.. -Dice haciéndose el sorprendido.

- Estaba libre así que, lo he hecho. -Le saco la lengua.

- Gracias. -Sonríe y termina de rastrillar.

Sale del recinto de un salto, me abraza acariciando mi cabello.

- ¿Qué hacemos hoy? -Pregunto curiosa.

- ¿Vamos al bar? Tú y yo, solos. -Propone y asiento. Besa mi frente y caminamos hacia su casa.

Después de almorzar terminamos unas tareas de última hora y nos preparamos para ir al bar. Me puse el vestido amarillo de tirantes con las botas, él iba con vaqueros negros, camisa blanca de manga corta, sus botas y su sombrero, nunca le puede faltar su sombrero. De camino al bar cantamos juntos las canciones de la radio, ya me las estaba aprendiendo. Entramos al lugar, la música se escuchaba desde la calle, nos sentamos en una mesa para dos pidiendo la carta, cenaremos aquí. Pedimos un par de cervezas y una hamburguesa para cada uno.

- Nunca había sido tan feliz. -Dice agarrando mi mano.

- Yo tampoco. -Me acerco a él gracias al sofá en el que estábamos sentados y apoyo mi cabeza en su hombro.- Me he enamorado de ti muy rápido.

- ¿Estás enamorada de mí? -Pregunta con una sonrisa.

- Sí. -Sonrío colorada.

- No te avergüences, yo también lo estoy de ti. -Dice besando mis labios.

- Eres maravilloso. -Lo abrazo más fuerte.

Traen nuestra cena, estaba delicioso. Me limpio con una servilleta cuando acabo con mi hamburguesa y río al ver a Sam.

- ¿Qué pasa? -Pregunta confuso.

- Ven, tienes mayonesa en la cara. -Digo limpiándolo.

- Gracias. -Sonríe y termina de cenar.- Eres lo mejor que me ha pasado nunca.

- Y tú lo mejor que me ha pasado a mí. -Beso sus labios.- ¿Bailamos?

- Por supuesto, quiero ver lo patosa que eres. -Ríe recordando la primera vez que me vio bailar.

- Idiota. -Río.

Fuimos a la pista y bailamos las canciones que sonaban, yo intentaba hacerlo bien pero algunos pasos no me salían bien, Sam se reía de mí pero también me ayudaba a conseguirlo. Sonó una canción lenta 'Growing Old With You' del grupo Restless Road, bailamos pegados con mi cabeza en su pecho mientras me rodeaba con sus brazos. Me separé de él cuando la canción acabó y mis ojos no podían creer lo que veían, otra vez no. Ashley me lo avisó pero no creí que pudiera hacerlo de nuevo.

- Hailey, ¿qué ocurre? -Pregunta notando que mi expresión de felicidad ha cambiado a asombrada.

- Sam.. está aquí. -Susurro mirándolo.

Amor de vaqueros.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora