Min Yoongi a los 17 años había sufrido una lesión en la médula espinal que había arruinado su sueño de ser un jugador de básquetbol profesional dejándolo en una maldita silla de ruedas, como él solía llamarla.
Ese accidente automovilístico no sólo h...
Yoongi había llegado a la empresa esa mañana y mandaría a la mierda a todo aquel que le dijera algo.
Había sido llamado por Minseok a su oficina pero al final la secretaria solamente le entrego su nueva iD y con ello podría andar libremente por el edificio.
Se dirigió a su estudio y entro. El lugar seguía como lo había dejado hace ocho meses atrás,
Se acercó y comenzó a limpiar un poco además de guardar algunas cosas que ya no usaba y que ya no le iban a servir ahora que podía caminar.
Tiro muchas cosas, tenía mucha basura, trabajos a la mitad que no tenía ganas de terminar y acomodó sus cosas de diferentes maneras. Ya no necesitaba nada que estuviera bajo.
Estaba terminando de acomodar sus equipos cuando escucho dos toques en la puerta y después de mirar todo se dirigió a abrir.
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Estaba nervioso, las manos le sudaban y sentía que su corazón se iba a salir de su lugar.
Miraba la puerta frente a él luego de haber tocado dos veces, se iba a rendir e irse pero cuando la puerta se abrió y dejo ver al hombre pálido de cabello peliplata y alto, sus pulmones se quedaron sin aire.
Lo miró de arriba a abajo y su mirada se quedó en las piernas del pálido.
Sintió sus ojos picar y al mirar los ojos frente a él había un bonito brillo en estos.
Yoongi aclaro su garganta y aparto su mirada del rubio. —¿Necesitas algo? — Yoongi estaba nervioso y sintió tanta preocupación de ver el rostro demacrado de Jimin, aquellas ojeras y su delgadez. ¿Dónde quedaron aquellas bonitas mejillas rechonchas que le gustaban mucho?.
— T-tú... — Jimin titubeó cuando vio al pálido darse la vuelta y caminar dentro.
— Estoy un poco ocupado ahora. — dijo levantando algunas cajas.
— Puedes caminar. — la sonrisa en el rostro de Jimin fue tan bonita para el corazón de Yoongi. — Puedes caminar, Yoongi. — su voz tembló y cuando sus ojos se encontraron con los azules, vio estos llenos de lágrimas. — Lo hiciste.
— Lo hice, si. — asíntio. — fue muy doloroso, pero pude hacerlo. — hizo una media sonrisa y le dio la espalda. Dios! Su corazón iba a salirse de su lugar.
— Y tú cabello...
—¿ Te gusta? Es gris. — dijo acomodando su computadora.
— Te ves precioso, muy muy precioso Yoongi. Y eres algo. — se rió.
— Si bueno, crecí algunos centímetros. — alzó sus hombros y sintió la cercanía de Jimin y le miró. — Soy Agust D. — estrecho su mano y Jimin lo miró para luego tomarla, habían extrañado tanto su tacto el uno al otro.
— Park Jimin, soy tu fan. — le sonrió y Yoongi sonrió de regreso. — Yoongi y-yo..
— No, no lo digas. — acaricio la mejilla del rubio quien se recargo en el tacto con los ojos cerrados. — Lo siento Jimin, lamento no haberte escuchado.
— Lamento haber mentido, lamento todo lo que nos cause. Lamento haberte dañado y no estar contigo cuando te lo prometí. — Los ojos brillosos de Jimin llenos de lágrimas rompieron el corazón del rubio y se acercó para abrazarlo, Jimin era ligeramente unos centímetros más algo que él.
— Shhh, no fue solo tú culpa. — se alejo y tomo el rostro del rubio. — Ambos nos herimos, pero aquí estamos y la vida nos quiere dar una segunda oportunidad. — sonrió. — podemos ir a pasos chiquitos si tú quieres. Lamento no haber ido a tus conciertos.
— Contigo puedo ir a paso de tortuga y voy a ser feliz. — escondió su rostro en el pálido cuello. — Te extrañe mucho, Yoongi.
— También te eche mucho de menos.— acaricio su cabeza.
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Obvio van a ser felices juntos, pero pues es cliché así que viene drama tal vez xd
Pero les traigo más drama en otro fanfic por supuesto Jimsu
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