Colorful - JIMSU

Capitulo 26.

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Jimin había llegado a su departamento luego de dejar a Yoongi en el suyo, se dio una larga ducha caliente y se alistó para pasar por Yoongi a las ocho en punto.

Tal cual como lo había dicho a esa hora se encontraba tocando la puerta para ser recibido por Hyuna.

—Pero que guapo te ves. — sonrió.

— Cariño, Jimin llegó. — Hyuna grito mientras dejaba entrar al rubio y ambos vieron cuando la puerta de la habitación se abrió.

Jimin sintió su corazón latir tan acelerado y la sonrisa en su rostro lo dijo todo.

Yoongi vestía unos jeans negros rasgados en la rodilla y una camisa de vestir blanca suelta que tenía los primeros dos botones abiertos y dejaba descubierta la clavícula.

— Te ves precioso bebé. — dijo poniéndose de cuclillas al pálido y tomando su mano para dejar un beso, luego se incorporó y se puso a la altura de Yoongi para besar sus labios. — Divino. — susurro sobre estos para volver a dejar un beso.

Yoongi algo sonrojado sonrió y miro a su nada quien les miraba.

— No te olvides de cenar nana. — la mujer sonrió y se acercó para besar su frente y luego la mejilla de Jimin.

— Diviertanse y vayan con cuidado. — sonrió mientras los veía salir y ambos asintieron. Una vez la puerta fue cerrada ambos entraron al ascensor luego salieron del edificio para dirigirse al auto.

—¿A dónde vamos?. — pregunto el pálido una vez que ambos estuvieran en el auto. Jimin tomó su mano y dejo un beso sobre está.

— Es una sorpresa. — sonrió y dejo la mano de Yoongi para poner el auto en marcha.

Iban en silencio con James Blunt sonando de fondo y tardaron unos minutos hasta llegar a un restaurante.

— Jimin. — Yoongi miro el lugar y luego a Jimin. — Alguien puede verte. — dijo preocupado.

—¿Eso te preocupa?

— Y-yo..— mordió su labio inferior. — Tú sabes que ...

— Lo sé. — hizo una mueca. — Espera. — saco su celular y se mensajeo con alguien para luego de unos minutos ver a alguien saliendo del restaurante y Jimin abrió la puerta de Yoongi quien le  miró confundido.

— Está todo listo Jimin. — el chico castaño sonrió y miro a Yoongi. — Hola, soy Seokjin. — hizo una leve reverencia y sonrió.

— Jin te va a ayudar. — miró a Yoongi quien le miraba. — entraré por la parte de atrás, deja que te ayude ¿Si?. — miró a Yoongi quien hizo una mueca pero se dejó hacer y una vez sentado en su silla vio como el auto se marchaba.

— Vamos. — dijo Jin ayudándolo a llevarle. — Jimin me ha hablado mucho de ti, lleva semanas preparando esto, solo me queda decirte que se esmero mucho. — dijo abrieron una puerta hacia una habitación privada luego de haber pasado por todas las mesas que ocupaban el lugar.

Los ojos de Yoongi se iluminaron apenas la puerta fue cerrada, había un camino de pétalos de rosas rojas y velas que adornaban el camino hasta la mesa la cuál estaba adornada de pétalos también.

Sonrió mirando todo, era la primera vez que alguien hacia eso por él y la sonrisa en su rostro no lo podía disimular, todo era tan bonito que sintió sus ojos picar.

Escucho la puerta ser abierta y miró al rubio que le miró.

— Es todo muy bonito Jiminie. — Yoongi le sonrió estirando su mano para que Jimin lo tomará y así lo hizo, se acercó y tomo la mano del pálido dejando mucho besitos sobre está.

— Solo lo mejor para ti. — sonrió.

— Tú eres lo mejor que tengo. — tomo el rostro de Jimin y lo atrajo hacia el suyo para darle un beso, Un beso del tipo que abre el cielo, que le roba el aliento y se lo devuelve.  Un beso que demuestra que todos los otros besos que ha tenido en su vida han sido incorrectos, un beso con amor, tal dulce.