Capítulo 23

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La cena como siempre fue igual de animada, luego entre mamá y yo decoramos el árbol y pusimos los adornos, mañana abriríamos los regalos entre todos.

-Bien niños, todos a la cama. Que tengan dulces sueños mis tesoros.

Mamá nos dio a cada uno su beso de buenas noches, yo me dirigía mi habitación y me acosté a dormir. Esa noche tuve un sueño húmedo con Sirius, era la primera vez que me ocurría esto y no sabía qué hacer, decidí darme un baño de agua fría y para mi suerte surtió efecto. Al salir del baño en mi escritorio estaba Atenea con la respuesta de Lily y Sev, tomé ambas cartas y le di a la lechuza blanca unas cuantas chuches. Escogí primero leer la carta de Lily.

Querida Bella:

Es bueno saber de ti, me alegraste mucho cuando dijiste que tus amigas hadas están de visita, pedí permiso a mis padres para venir y ellos accedieron, aunque lamentablemente no me acompañarán porque Tuney se negó a ir. Espero que Sev haya respondido positivamente a tu carta porque me gustaría mucho verlo. La casa la tenemos conectada a la red flu así que llegaré por la chimenea.

Muchos besos Lily

PD: Feliz navidad.

Qué bueno que Petunia no vendrá, es una pesadilla y mucho más su novio Vernon, no sabría decir cuál de los dos es más mezquino.

Tomé la carta de Sev y abrí el sobre, de verdad esperaba que viniera, pero siendo sincera me sorprendería bastante si así lo hiciera, mi hermano y Sirius han sido una maldita pesadilla para él.

Querida Bella:

Feliz navidad para ti, respecto a tu carta me lo he pensado bastante si ir o no, me gustaría pasar las fiestas contigo pero te recuerdo que no debo hablar mucho con Lily y además Potter y Black estarán allá. Le he dado muchas vueltas en la cabeza y he terminado acceder con la condición de que no despegarme de mi madre-realmente fue ella quien me convenció de ir-no te lo tomes a mal pero no quisiera que tu hermano y ahora novio no me echaran a perder al fiesta. En cuanto a tus primas sabes que no me gusta conocer personas nuevas y mucho menos si son como el inepto de tu hermano, pero les daré un voto de confianza solo por ti. Por cierto antes de que se me olvide mamá me dijo que usaríamos la aparición no la red flu.

Severus Snape

PD: Mi madre está muy golpeada por culpa de Tobías, espero que Potter no se burle de ella porque ahí sí que va a conocerme.

¡Mi hermano no es tan cruel Severus, dudo que se burle del estado de la señora Snape!

Snow se me acercó y se rozó por mis piernas, luego se acostó bocarriba y abrió sus patitas dejándome saber que deseaba que yo le acariciara esa zona. Así lo hice, terminé sentándome en el suelo con la pantera prácticamente encima de mi. Miré la hora en mi reloj de pared y este apuntaba las 4:00 am, era demasiado temprano para estar despierta pero no tenía nada de sueño. Quité a mi bebé de mis piernas y bajé a la sala de estar donde estaba el árbol navideño con cientos de regalos.

Perdón por hacer trampa mamá pero tengo mucha curiosidad.

Varias cajas de regalo tenían mi nombre, tomé una verde que era espectacularmente elegante. La abrí y desenvolví el regalo. Resultó ser una cadena de plata con un dije de sirena con zafiros por ojos y diamantes en la aleta y la parte de arriba de la cola, en brasier tenía zafiros y diamantes. Era hermoso el remitente era Sev, él y su mamá había comprado el regalo porque sabía de mi fascinación con las sirenas. me coloqué la cadena en el cuello y cuando pensé que eso era todo descubrí que dentro de la caja había dos cajitas más afelpadas una era azul claro y la otra era plateada; la plateada era un poco más grande que la azul, la abrí y descubrí el juego de la cadena, eran un par de aretes con la misma sirena. Casi grito de la emoción pero me contuve porque despertaría a todos. Acerqué la cajita azul claro y me percaté que lo que contenía en su interior era un anillo de plata con la misma sirena de la cadena y los aretes. Esa vez Sev se había lucido, era realmente muy hermoso todo, no pude contenerme y me puse el anillo con los aretes. Luego subí con la caja de regalo vacía a mi habitación y me acosté a dormir nuevamente.

Reencarné en una sirenaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora