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-JingYi.

El beta se posiciono frente a la figura mayor que lo llamaba e hizo una reverencia con respeto y cariño.

-Padre.

Las duras expresiones del omega se ablandaron por ver a su cachorro llamarlo "padre", pero no dejaron de ser autoritarias. Cheng asintió en respuesta y emprendió un camino entre la multitud de adultos y jóvenes que fluían en dirección opuesta, esperando que el menor lo siguiera.

Era como ir en contra de un río. 

La mañana que salió de su pequeña reclusión luego de dos días, no esperaba encontrarse tan pronto con Cheng. 

JingYi como pudo intentó acercarse hasta su padre, siendo numerosas veces empujado en contra, golpeando su espalda y hombros en el proceso. Al final de la muchedumbre, el beta impulso con fuerza su cuerpo para finalmente salir y chocar contra la firme figura del omega mayor, quien volteo a verlo y sus ojos reflejaban calma

La fina tela del traje ceremonial de Yunmeng para el siguiente heredero y un alto moño adornado de dos trenzas brillantes permitían que la cinta con el grabado de los lotos ondeara libremente con el viento, como un secreto que salió al mundo exterior, su alrededor parecía celebrar el regreso de un ser divino.

Ambos siguieron su camino, uno al lado del otro. JingYi vio que su entorno muy pronto cambio por el pequeño riachuelo rodeado de un bosque de bambú y azaleas. Como un camino recorrido centenares de veces, un lugar oculto, el omega mayor mostró una banca de piedra cubierta de musgo pero intacta con el pasar de los años. Ambos tomaron asiento en un silencio intrínseco. 

Jiang Cheng habló primero.

-Veo que las flores están preparándose para el verano.

Jiang Yi observo las plantas y luego respondió. 

-Los brotes empiezan dependiendo del sol. En primavera y verano de arriba abajo, en invierno y otoño de abajo arriba. Las condiciones deben ser idóneas para su renacimiento. 

El omega de ojos plateados reflexiono sus palabras antes de continuar. 

-Las flores de agua no son muy distintas, pero son escépticas. El loto nace en un lugar fangoso y lúgubre, pero crece puro y limpio. Sin una dirección, sin un lugar estable, con tallos gruesos y sus hojas anchas, él es su propio soporte entre el agua.

-Creo que mi padre es la viva representación de esa filosofía.- Yi sonrió por lo bajo dejando al aire una expresión cómoda. Recuerda algo parecido e inevitablemente piensa en Zhen, sin entender por qué.

-El bambú también.- Yi observó a su padre tan elegante y gentil, sin su conocido traje oscuro de camisa blanca. Por el contrario, Cheng observaba expectante de lo que su hijo diría.- El bambú parece débil pero es flexible sin romperse y fuerte ante el viento, su apariencia es sencilla pero puede adaptarse a cualquier clima, transgrede el invierno y el otoño, fortalece sus raíces en verano y primavera.

La comisura de los labios mayores se levantaron levemente, en una sonrisa oculta. 

-Entonces el loto y el bambú son complementarios.

-Quizás.

Yi se perdía entre el movimiento de las hojas y el bambú, como una melodía del viento. No necesitaron más palabras, él sabia muy bien qué significaba la visita de su padre.

Hace muy poco su padre le hizo una promesa, permitirle decidir sobre su propia vida qué es lo que deseaba hacer y proteger sus deseos, a quien amar, a que profesión dedicarse, cómo vivir. 

El beta de YunmengDonde viven las historias. Descúbrelo ahora