A una semana de volver a Hogwarts, para cursar su penúltimo año, Harry se despertó temprano, vio a Ron dormir como un oso en invernacion y se apresuró a tomar sus gafas y bajar hacia el comedor. Bajo las escaleras volteando de soslayo hasta la habitación de Ginny, no pudiendo contener un suspiro. Al llegar hasta la sala de estar, pudo corroborar que en efecto, no había nadie, aunque no tardaban en bajar Molly y el señor Weasley.
Arthur había sido ascendido a un mejor puesto en el ministerio y aunque la economía de aquella maravillosa familia mejoraba, aquel nuevo puesto era demandante, así que el señor Weasley llegaba muy tarde de trabajar y claro, tenía muy preocupada a Molly cualquier retraso, pues las desapariciones y masacres seguían y, parecía que a cada día que pasaba, aumentaban.
Molly había colgado un reloj, con el nombre de todos los miembros de su familia, excepto Percy.
El reloj indicaba el estatus de cada uno. Aquel artefacto se componía de tres fases: A salvo, en peligro de muerte y muerto.
El chico podía ver con impotencia el estado de la señora Weasley cada que llegaba la cena y alguno de sus hijos no se reportaba, ansiosa la bruja se fijaba en las manecillas que por suerte, todas esas noches se mantenían en la primera fase.Harry esa mañana salio al jardín y pudo ver con sorpresa, a una figura familiar, de complexión delgada, rubia, ridículamente hermosa y francesa. Fleur Delacour, bebía su café tan tranquila contemplando el amanecer. El chico se tallo los ojos, creía que estaba en un sueño extraño, aunque no tenía la más mínima idea, de porque el sueño tenía que ser con Fleur, no pensaba en ella desde su último día en Hogwarts, cuando la rubia y su hermanita se despidieron de él personalmente como agradecimiento por todo lo que había hecho en el torneo de los tres magos, salvandolas a las dos, para después abordar el carruaje tirado por Abraxans de Beuxbatons.
Fleur, al sentir quizá la incomodidad propia de ser observada fijamente, aunque no podía decir que aquella situación le fuese ajena, volteo, dibujandose en su rostro una gran sonrisa
— Haggy — Expresó la Francesa acercándose al chico y abrazándolo
— Fleur, como, tú... ¿Qué estás haciendo aquí? — pregunto el pelinegro nervioso
— Oh Haggy, bueno, hesulta que...
La bruja se tomó las muñecas encantada, claramente no por Harry, el motivo de aquel encanto, había salido vacilante también de la madriguera, con una gabardina y un maletín— Bill quegido — Comentó la francesa con un brillo especial en los ojos
— Hola cariño... ¡Oh Harry! ¿Qué haces despierto tan temprano? — Pregunto Bill no esperando encontrarse con el pelinegro
— Yo, eh, no pude dormir más — Dijo rápidamente Harry un tanto avergonzado
— Ya veo — Soltó Bill, para después abrazar por la cintura a la francesa y probar aquellos labios delgados y encantadores.
——————————————————
— Mamá la odia y la verdad es odiosa...
Comentó Ginny, mirando al trio de oro, ese día un poco más tarde
— Yo creo que es hermosa — Soltó Ron soñador, ganándose una mirada de odio de Hermione, reacción que a Ginny le pareció graciosisima
— ¿Qué? Harry también lo piensa, ¿Verdad viejo? — Dijo Ron pasandole ahora la "quaffle" a Harry, poniéndolo en un predicamento, pues por lo que sea, a Ginny no le hizo tanta gracia aquello, provocando la risa ahora de Hermione
— ¿Ya no es tan gracioso Ginny? — Expresó la castaña divertida.Ron se extraño, pero no pudo cuestionar nada, pues la señora Weasley había interrumpido su rato agradable
— Ron, Hermione, ¿Podrían ayudarme a poner la mesa? comeremos con ALGUIEN más — Soltó Molly de mal humor y haciendo un gestito prepotente
— Ginny hija, ¿podrías ir a ver si el Jarvey ya asusto a todos esos gnomos de Jardín? Harry puede acompañarte...Ginny acepto de inmediato aquella tarea, no le hacía ilusión lidiar con aquel tejón mal hablado, pero haría lo que fuese por pasar tiempo a solas con el pelinegro. Harry por supuesto estaba igual, por pasar tiempo con Ginny atraparia hasta Demiguises en la oscuridad. La pelirroja lo tomó de la mano, haciéndolo sonrojar y lo jalo corriendo hacia el patio trasero.
Molly se quedó pensativa con la escena y Hermione no pudo contener un "oooouh" tierno, que llamó la atención del pelirrojo
— ¿Qué? — Soltó Ron confundido
— Nada Ronald, nada — respondió Hermione sonriente y divertida.
ESTÁS LEYENDO
Harry Potter y el misterio del príncipe Mestizo 2.0
FanfictionBueno, hola a todos. Continuo con lo siguiente, quizá la película que, después de leer el libro más me decepcionó en todo sentido, pues omitieron muchas pero muchas cosas muy importantes. De nuevo como en la anterior historia, seguiré el hilo argume...