Al descubierto

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Durante la siguiente semana, Harry trato de idear en su cabeza un plan para sonsacarle aquel recuerdo a Slughorn, pero lamentablente no se le ocurrió nada, así que como último recurso abrió aquel ejemplar de 'elaboración de pociones avanzadas' por si al príncipe mestizo se le hubiese ocurrido con años de antelación que su libro hubiese caído en las manos de un chico que necesitará desesperadamente una solución para persuadir a un viejo profesor que se las sabía todas. Lamentablente para el, no encontró nada. Aunque lo que si halló, fue un hechizo, escrito en tinta roja y con pequeños garabatos alrededor de el.

<< Sectumsempra. Para enemigos. >>
Ya lo había leído antes, en una ocasión en la sala común, después de las pruebas de Quiddicht, algunos meses atrás. Tomo su varita y cuando estaba apunto de probar el hechizo...
—¡Harry tienes que terminar la redacción! — Exclamo Hermione con impaciencia.

Snape les había dejado una redacción terriblemente complicada, aunque a esas alturas, a Harry le importaba muy poco si Snape estaba de acuerdo con el sobre como defenderse ante los dementores.
Ron, trabajaba a cuestas, con su pluma autocorrectora de a ratos dándole problemas.
—¡A esta maldita cosa se le está acabando el encantamiento! — Maldijo el pelirrojo entre dientes

— »¿Velijerante va con "uve" cierto?

—Va con 'Be' y 'Ge' — Respondió Hermione de refilon sin quitarle el ojo a Harry que seguía ensimismado en sus pensamientos —Lo estas enfocando de mala manera Harry. Dumbledore confia en que tu eres el único que puede arrebatarle el recuerdo a Slughorn, por tanto, lo que sea que tengas que hacer para conseguirlo nacerá de ti, no encontraras la respuesta en ese estúpido libro.

—Hermione, sino fuera por ese "estúpido libro" Ron no estaría aquí —  Expresó el chico con hastío.
—¡Termine! — Anuncio Ron antes que Hermione contestara con alguna perorata.
—Hermione, podrias...
Desde que Ron había cortado con Lavender, la brillante chica se comportaba más servicial qué de costumbre, así que asintió. Tomo el pergamino y arqueo las cejas.
—Bueno, partiendo de la base de que no te llamas Ronil Nkeazle...

Harry ahogo una risotada y se tapo la boca con las manos.
—¡Rayos!
—¿Quién te dio la pluma?
—Me la mandaron Fred y Geo... Hijos de... ¡Ahora tendré que volverlo a escribir todo! ¡Los matare! — Manifestó el pelirrojo entre molesto y desilusionado.
—No te preocupas, se puede
corregir — Dijo Hermione y paso su varita por encima de los graciosos errores ortográficos que tenia la redacción.
—Té adoro Hermione — Murmuró el muchacho y se desperezo en el sofá mientras se frotaba las manos.

Hermione, visiblemente ruborizada se apuro en corregir todos los errores de la redacción a la luz de la chimenea.
—Ya de por si estoy muy nervioso con el examen de aparición, que suerte tienes Harry, no tienes que hacerlo ahora y ya lograste aparecerte del otro lado del aro...

El examen de aparición para los mayores de 17 años, sería la primera semana de abril en Hogsmade. Y tanto Ron como Hermione ya podian hacerlo, Harry tendría que esperar algunos meses más para llevarlo a cabo, aunque como Ron mencionó ya había podido aparecercerse en una ocasión del otro lado del aro de entrenamiento. Lo mismo podía decir Hermione que para sorpresa de nadie, había sido la primera en lograr tal hito dos veces.

Harry que se había distraído por un momento debido a preocupaciones ajenas, más temprano que tarde termino volviendo al príncipe, releyendo una y otra vez sus arrugadas y viejas páginas en busca de la respuesta a sus problemas.
—Harry — Insistió Hermione —Té aseguro que lo que sea que tengas que hacer, no tiene nada que ver con pociones.
—¡¿Tú que sabes? ¿Y que tal si estoy más conectado con este libro de lo que crees?! — Elevó la voz el pelinegro poniéndose a la defensiva, como un felino.

Harry Potter y el misterio del príncipe Mestizo 2.0Donde viven las historias. Descúbrelo ahora