𝚇𝚇𝙸𝙸𝙸. 𝚃𝚎𝚖𝚙𝚛𝚊𝚗𝚘 𝚎𝚗 𝚕𝚊 𝚖𝚊ñ𝚊𝚗𝚊

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𝟔:𝟐𝟒𝐚𝐦

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𝟔:𝟐𝟒𝐚𝐦.
𝐒á𝐛𝐚𝐝𝐨, 𝐬𝐨𝐥𝐞𝐚𝐝𝐨.
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     Había pasado una semana y media desde que Kath fue dada de alta. Estuvo con Damian una semana completa, y volvió a su apartamento y a su trabajo desde casa justo después. Se había recuperado bastante bien, un poco más y volvía a su peso, las grandes bolsas bajo sus ojos ya se habían ido, al igual que sus ojeras.

     Como todo sábado por la mañana, dormía plácidamente. Sin embargo, al llegar a las 6:30am...

💕Damian 💕
📞 Llamada entrante...

     Ella despertó de golpe, revisando su celular sin poder enfocar las letras en la pantalla y haciendo una mueca mientras sus sábanas no hacían más que volverse más cómodas. El teléfono dejó de sonar; casi de inmediato, comenzó a dormirse una vez más...

💕Damian 💕
📞 Llamada entrante...

—¡Rayos, las prácticas! tomó rápidamente su teléfono, y respondió de inmediato al ver que se trataba de Damian.

     El contrario recién se levantaba, lo que era muy notorio en su tono muy profundo de voz. Lo mismo pasaba con Kath, ambos, al unísono, dijeron:

—¡Buenos días! ¿Cómo estás? ¡Wow, tu voz! ¿Qué tiene mi voz? ¡OYEEE!

     Las carcajadas a ambos lados de la línea no se hicieron esperar. Damian se aclaró la garganta, y tomó la palabra de primera cuenta.

     El próximo sábado, Damian y su academia participarían en una competencia/recital a nivel regional; todos estaban emocionados y comprometidos, pero a Damian le estaban faltando 3 personas para cumplir con la cantidad reglamentaria de miembros en su coro y otra más en la orquesta. Ethan se ofreció en cuanto Damian se lo comentó; él no sabe cantar, pero con mímica, podría ser de gran utilidad. El segundo voluntario sería Jaden, solo que nadie lo sabía. Además de Damian, Jaden cantaba bien, pero no era de su atención. Kath cooperaría de la misma manera que Ethan, solo con mímicas, pero...

     Ella sí sabe cantar, solo que no le gusta tocar el tema, pues le resulta complicado.

     La morena se preparó y... maldita sea.

—¿Será que esto le parece lindo? Nonono... Damian usa colores más neutros... Ay, ¡maldición! —ligeramente frustrada, eligió su atuendo del día y esperó en la entrada de su edificio para tomar un taxi.

     Resultó no ser necesario, pues Kael decidió pasar a recogerla en su auto, en compañía de Allison. Ellos dos también colaborarían, uniéndose a la orquesta para completar el número de miembros: Allison con violín, y Kael con los timbales. Los tres pasaron antes por algo para desayunar. Se notaba a Kath un poco nerviosa...

Tu Última Ex.Cusa [Libro 1: Ignition] ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora