𝚇𝚇𝚇𝙸𝚇. 𝚃𝚞 ú𝚕𝚝𝚒𝚖𝚊 𝙴𝚡.𝙲𝚞𝚜𝚊

87 15 140
                                    

𝙰𝚍𝚟𝚎𝚛𝚝𝚎𝚗𝚌𝚒𝚊: 𝙴𝚕 𝚜𝚒𝚐𝚞𝚒𝚎𝚗𝚝𝚎 𝚌𝚊𝚙í𝚝𝚞𝚕𝚘 𝚍𝚎𝚜𝚌𝚛𝚒𝚋𝚎 𝚎𝚜𝚌𝚎𝚗𝚊𝚜 𝚍𝚎 𝚜𝚞𝚒𝚌𝚒𝚍𝚒𝚘 𝚢 𝚌𝚘𝚗𝚝𝚎𝚗𝚒𝚍𝚘 𝚗𝚘 𝚊𝚙𝚝𝚘 𝚙𝚊𝚛𝚊 𝚖𝚎𝚗𝚘𝚛𝚎𝚜 𝚍𝚎 𝚎𝚍𝚊𝚍

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

𝙰𝚍𝚟𝚎𝚛𝚝𝚎𝚗𝚌𝚒𝚊: 𝙴𝚕 𝚜𝚒𝚐𝚞𝚒𝚎𝚗𝚝𝚎 𝚌𝚊𝚙í𝚝𝚞𝚕𝚘 𝚍𝚎𝚜𝚌𝚛𝚒𝚋𝚎 𝚎𝚜𝚌𝚎𝚗𝚊𝚜 𝚍𝚎 𝚜𝚞𝚒𝚌𝚒𝚍𝚒𝚘 𝚢 𝚌𝚘𝚗𝚝𝚎𝚗𝚒𝚍𝚘 𝚗𝚘 𝚊𝚙𝚝𝚘 𝚙𝚊𝚛𝚊 𝚖𝚎𝚗𝚘𝚛𝚎𝚜 𝚍𝚎 𝚎𝚍𝚊𝚍. 𝚂𝚎 𝚛𝚎𝚌𝚘𝚖𝚒𝚎𝚗𝚍𝚊 𝚍𝚒𝚜𝚌𝚛𝚎𝚌𝚒ó𝚗.

𝟏𝟏:𝟎𝟎𝐚𝐦.
𝐋𝐮𝐧𝐞𝐬, 𝐥𝐥𝐮𝐯𝐢𝐚𝐬 𝐝𝐢𝐬𝐩𝐞𝐫𝐬𝐚𝐬.
───────════◆════───────

—Veo que ustedes son un par de estúpidos, pero, al menos, son bastante puntuales. 

     William Olson saludó al dúo mientras entraban en su despacho. Kath y Jaden se quedaron de pie frente al escritorio del mayor, ambos con muy mala cara, Jaden aún con fiebre, Kath con una migraña infernal.

—¿Y bien? Ya estamos aquí.

     Kath se notaba inquieta, lo suficiente como para soltar ese comentario. William les invitó a sentarse, ninguno de los dos lo hizo. El viejo negó con la cabeza y aclaró su garganta. Comenzaba a creer que quizás esto ni siquiera era necesario.

—Claro, aquí están —William los miró con desdén, parados ahí, con esa altanería característica de los dos.

—¿Dónde está Damian? —la morena no soportaba más la angustia, pero cualquiera pensaría que estaba en total control de sí misma...

—Ve tú mismo, Jaden, lo metí a tu cuarto; di la orden de que lo dejen salir cuando yo mande por él. Vayan al comedor, necesito un momento con esta zorra.

—¿Hablamos de zorras? —ella miró al mayor con sarcasmo, él entendió todo.

—Admito que tienes agallas para hablarme así después de conocer la verdad... —William colocó una laptop sobre la mesa, y la giró para que ella pueda verla. Por el momento, estaba bloqueada.

—Lo escucho —tenía miedo, pero no por ella, sino por Damian... Y por Jaden.

—Como sabes, el dinero lo compra casi todo —buscaba en sus cajones mientras hablaba, sacando algunos sobres llenos de fotografías—. Autos, casas, lujos, información... Tú, ¿cuánto dinero quieres por salir de nuestras vidas, por cerrar la boca y desaparecer de este lugar?

—No vas a comprarme, idiota.

—Anda, perra. Dame un precio —le lanzó a Kath una chequera, y una elegante pluma con el apellido Olson grabado en oro —. Hagamos esto rápido y dime qué quieres.

—A su primogénito —respondió tajante, refiriéndose a Damian. Tomó la chequera, arrancó un par de chaques, los arrugó y los lanzó contra la pared; trataba de atinarle a un candelabro.

Tu Última Ex.Cusa [Libro 1: Ignition] ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora