La Descendiente Y los Cuatro Principes Del Infierno

Capitulo 31 Ciudad De Plata

William

El viaje tiene una duración de tres horas exactamente, y esas serán las únicas horas que tendré de paz ya que al llegar todo se volverá una completa molestia. O un completo caos para ser más específico. La Ciudad de Plata no solo es conocida por ser en centro del mundo de La Utopolis, sino que también es muy conocida por ser el centro de todas las noticias y chismes que existen, otra cosa que los celestiales compartimos con los humanos es que nos encanta el chisme, o bueno a muchos de ellos. Yo no me incluyo en ese paquete ya que la mayoría del tiempo soy el chisme del que tanto hablan.
Seguramente al llegar todos los periodistas nos abordaran con miles de preguntas sobre el porqué estábamos aquí o sobre la magia extraña que tiene Grace (si ellos se esteran todo) el incidente de que murió y luego revivió se corrió por toda La Utopolis encabezando las revistas y periódicos del dia, y de seguro todos querrán saber quién es la susodicha y de donde viene para tener su adoraba primicia.

¿Cómo logran enterarse de todo? No tengo ni la más mínima idea, también me gustaría saberlo¿Serán que tienen espias alrededor de toda La Utopolis como mi padre? No me sorprendería a si así fuera.

-¿Estás listo para volver a casa Will? De seguro tu padre ha de estar esperándote y tus hermanos igual -me dice Erick mientras acomoda sus maletas en la parte de arriba de los asientos-Bueno... Si yo tuviera un padre como el tuyo la verdad no me emocionaría tanto -hace una mueca de desagrado, es comprensible.

Después de tanto tiempo conociendo a Erick digamos que es el único que en verdad entiende la situación con mi padre. Y por lo tanto es el único con quién puedo hablar de este tipo de cosas.

Mi padre es...una persona bastante difícil de tratar, demasiado difícil. Casi imposible.

-Mis hermanos deben de estar emocionados, pero mi padre no tanto seguramente seguirá insistiendo con el tema de la propuesta de matrimonio -mi padre insiste que acepte la propuesta de la familia de Amelia, pero me niego absolutamente no quiero casarme aun y mucho menos lo hare por política-En cuatro días es el cumpleaños de mis hermanas vendrán muchos fotógrafos y periodistas, seguramente harán preguntas sobre eso, es donde aprovechare la ocasión para decir que no aceptare la propuesta -Erick por más que lo intenta no puede ocultar la sorpresa.

Le dije que no dejaría que siguiera controlando mi vida, ahora se lo voy a demostrar. Por primera vez hice algo que quise, y eso fue ir detrás de Grace en el Reino Rojo.

Aunque creo que ella está molesta conmigo por lo que paso con Amarintìa ya que no hemos hablado mucho desde eso. Prácticamente nada.

-¿Estás seguro de hacer eso? Claro que sí es así no dudes que tienes mi apoyo -aclara con rapidez-Lo que digo es que tu padre no está de acuerdo, además él espera que acates todas sus órdenes. Lo único que es extraño es ¿Porque insiste tanto en que te cases? -me.mira con una mueca de confusión.

La pregunta del millón de dólares, como dirían los humanos.

-Ya no soy un niño para que me diga que es lo que puedo o no hacer, a él solo le importa el estatus y no voy a dejar que haga lo mismo con mis hermanas y con mi hermano. Si ellos se casan o no es su decisión, no dejare que mi padre la tome por ellos, solamente quiere que me case por tener a la familia de Amelia cerca -Erick emboza una sonrisa pícara junto con una mirada curiosa de repente pero que decido ignorar, porque ya se lo que está pensando- Además, apenas estoy empezando los tres años en la academia no quiero casarme con diecinueve años ¡Por Dios! ¿En qué época estamos? Los matrimonios arreglados son una absoluta tontería -la idea de casarme a esta edad me parece absurda.

Si me llegó a casar lo haré porque yo así lo decida y me casare con la persona que yo escoja, no la que mi padre imponga a su voluntad solo porque si.