Capítulo 37

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Escribir los capítulos es más tedioso que ustedes votar, 100 gente lee el capítulo y como es posible que solo tenga 20 estrellas de esas 100 vistas.

Comimos y como era de esperarse vomité hasta lo que no debía y tenía demasiado calor el sol era algo fuerte tanto para mí como para Duncan.

Ya eran las siete de la noche y quedamos todos para ir a cenar para que Duncan conociera un poco la ciudad. Mis padres se arreglaron muy guapos y Duncan ni se diga, si antes no quería llamar a la atención hoy no había forma de que no. Tuvimos un pequeño inconveniente con el baño y él, no sabía que lidiar con hombres ricos era tan complicado.

Papá en un acto amable sin ninguna intención visible le elogió el perfume y el reloj y Duncan se los dio, fue una pequeña lucha para que papá aceptara y al final fue mi mamá quien terminó aceptando por él.
Llegamos a un lujoso restaurante al que siempre quise venir aquí en Costa rica, pero como no teníamos las condiciones nunca pasó. Duncan había reservado una mesa para cuatro y le pidió a mi papá que maneje y se le notaba lo tenso por tener que manejar un vehículo como ese. Duncan y yo nos sentamos atrás disfrutando de la vista y mamá y papá iban adelante.

La cena transcurrió tranquila, Duncan disfrutó de la comida y reían y hablan mientras bebían el vino más caro de todo el restaurante. Me llenaba de sorpresa verlo reír tanto mientras papá y él conversaban temas banales.
Al volver a casa me sentía muy mal, no quise decir nada para no arruinar la noche, pero mi cuerpo estaba agotado, el viaje, la parrillada, la cena todo me tenía cansada.

—fue muy divertida la cena— dice él mientras habla con papá y mamá, yo voy a la cocina y tomo un vaso de vidrio para servirme un poco de agua, siento un mareo y dejo caer el vaso y me sostengo de una silla para no caer.
—¡AURORA!— escucho la voz asustada de Duncan y cuando quise darme cuenta ya estaba en sus brazos. Papá y mamá se alarman
—¿te sientes mal? ¿Te llevamos al hospital?— me empiezan a preguntar todos y a abrumarme con más preguntas, incluso me miden la fiebre. Mi madre masajea mis pies con aceite frío y papá recoge los vidrios rotos mientras mi cabeza descansa sobre los brazos de Duncan.
—estoy cansada, quiero ducharme y dormir— mi casa no es como la de él, hay un solo baño que todos usamos y no existe una bañera, creo lo había olvidado otra vez.
—necesitas un baño caliente, te prepararé la bañe...-le tapo la boca rápido y aclaro los ojos, creo que me logra entender y espeta.
—te prepararé la ropa— nos despedimos de mis padres y vamos a mi habitación.
—lo siento— me dice y me abraza fuertemente bajando a mi altura
—siento que he hablado mucho, simplemente quiero darles una buena impresión de mí, pero es tan difícil incluso reírme para verme natural— tomo su rostro en mis manos
—lo has hecho muy bien, más de lo que imaginaba— me besa y me sube a su regazo
—aquí no dun... no quiero que me escuchen— su lengua se desliza por mi cuello
—d-dun-can— me acaricia el trasero y lo aprieta
—solo hagamos el amor— me sube a la cama, y se sienta sobre mí sin ejercer ninguna presión, se quita la camisa, el reloj y el saco dejando su dorso desnudo y luego procede a quitarme el vestido suavemente dejando mis pechos al aire.

Sus manos aprietan mi cintura y su cabeza viaja dándome besos desde mis pechos hasta mi ombligo con el que juga un poco y juega con el borde de mis bragas negras, para luego deslizarlas por mis piernas hasta quitármelas. Me tapo la cara con ambas manos al ver como me mira fijamente la parte íntima y todo el cuerpo.
—que preciosa mi amor— espeta y sube mis piernas sobre sus hombros y con los dedos me acaricia antes de: luego posa su lengua calentita en mi clitoris suavemente de arriba hacia abajo y de abajo hacia arriba y en círculos suaves.

Por momentos breves lo succiona con delicadeza, tapo mi boca para calmar el grito ahogado que se queda en mi garganta y una de mis manos sin auto control empuja su cabeza hacia abajo exigiéndole más hasta lograr hacerme correr en su boca y apretar su cabello con mi puño por la emoción.

¿ME ENAMORÓ EN NUEVE MESES? +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora