Capitulo 69

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—¿sabes usar una arma?— un hombre de un metro y medio le habla en forma burlona, mientras agita con su mano la pistola y duramente la estrella contra la mesa
—¿si sabes cómo son las reglas de este juego chamaco? Te ves muy péndejo como para este trabajo, pero si don Gino te eligio para tenerte al frente, por algo fue. Te conviene no lo decepcionarlo puedo apóstar que no te iria nada bien— le habla muy de cerca y todos ríen, ya que Jonathan se deja ver muy nervioso, pero saber que Gino lo eligio para estar al frente lo hace sentirse superior a los demás y le habla despectivamente
—tú aliento huele a salsa picante como el sucio mexicanito que eres, ¿como lograste entrar a este país? ¿cruzaste el río? ¿cuánto le pagaste a los coyotes? Or you had to give him an extra payment, for example a blowjob or...—
Sintió el golpe en su nariz y la sangre fue rápida en caer por montones, mientras maldecía y se quejaba por el dolor de repente. El otro hombre quien no soporto escucharlo decir esas palabras tan despectivas y era sostenido por los demás para evitar una desgracia, pero él no colaboraba

—por lo menos entiendes el inglés— dice sonriendo pese al dolor y toda la sangre que por su nariz baja, aquello hace que él quiera golpearlo hasta matarlo, pero no se lo permiten, ya que Jonathan solo osa provocarlo más.

—cálmate, es solo un estúpido que tiene los zumos a la cabeza, él no tiene idea de quienes somos o que hacemos, no puedes dejar que te gane un mocoso de mierda— uno de ellos le hablaba de frente y le golpeaba el pecho por la rudeza que tenían y la violencia era su forma de comunicación en todo.

—me vale verga si está al frente o si es el favorito de Gino...— y justamente hablando del rey de roma

—para ser muy rudo dejas que cualquiera te suba los zumos a la cabeza will— Gino entro al lugar con otros hombres más

—déjame ver eso— con su camisa en mano tapando su nariz se acerca Jonathan y deja que Gino lo vea

—uh! Creo que tendrás que operarte eso, la buena suerte es que el doctor de la familia lo haría sin problemas, ahora concéntrate, ¿ves esa botella que está allá? Tienes dos balas en esta pistola— Gino la observa varias veces

—esta es una Glock 43x slimline 9mm pb, una de mis favoritas, a decir verdad, tenemos armas que no sabemos ni el nombre, una variedad algo extensa— Jonathan lo observa molesto porque Gino habla y actúa como si nada y espeta

—¿no le dirá nada por lo que me hizo?— Gino frunce el ceño

—¿Que quieres? ¿Que lo regañe como si fuera su madre? No me jodas Jonathan, y estás grandecito para estás cosas, trata de controlar tu lengua y verás que todo te saldrá bien, de hecho es algo que debes manejar en tu primera cita con los compradores, no debes hablar más de lo que debes porque entonces pueden creer que los estás investigando y que eres algún infiltrado y no querrás saber lo que le sucede a los que ellos atrapan creyendo que son o siendo infiltrados del FBI o de alguna otra mafia, así que cálmate y deja a will en paz, créeme que te conviene ser más su socio que su enemigo—

Jonathan enfadado toma la pistola y no acierta ningún disparo, Gino está sentado fumando observándolo y ya van seis balas al objetivo al cual no logra dispararle y maldice. No lleva ramera, pues la mancho de sangre y will lo observaba de lejos pensando en mil maneras de cómo se vengaría de él.

***

—así que Gino será abuelo, que interesante dato creo que esto llena de regocijo divino a mi alma pensé que el hijo de las mil perras nunca tendría un maldito punto débil— sonríe y coloca la mano en su pecho y ella se acomoda en el asiento. Sus pertenencias le son de vueltas y su celular suena
—¿si mamá?—
—¿donde demonios amaneciste?—
—mamá, no tengo cinco años así que relájate, amanecí en casa de una amiga ¿no te dije que no me esperaras?—
—vuélvete a tu casa ya mismo—
—adiós mamá, también te amo— cuelga dejando a su mamá con la palabra en la boca
—¿en que estábamos?—
—ahora tengo interés de saber que quieres tú y porque recurriste a mí—
—ya era hora de que me hicieras esa pregunta—
—no tomes confianza, no te le he dado—
—me necesitas y te necesito así que ahora somos socios, no tengo que ser tú súbdita—
—eres muy directa y sabes lo que quieres, me gustan las mujeres así, me excitan—
—no es momento de que te excites, quiero a Duncan Di marco en bandeja de plata y que mejor usando a su esposa y su hija para tal cosa—
—¿hija? Jajajaj, una niña en la familia di Marco no quiero imaginarme la deshonra que es eso para los di marco—
—a su hijo le da igual, ni siquiera está involucrado en los negocios de su padre—
—¿cómo estás tan segura que no?—
—tengo años con los di Marco, crecí con ellos sería obvio darme cuenta en un momento, nada se oculta debajo del sol que no sea de descubrirse—
—que poética eres, pero eso no significa que él no sea parte de ellos—
—ellos nunca han estado en buenos términos incluso Duncan se graduó en Harvard—
—eso lo sé, pero puede ser solo una fachada, pero puedo darte lo que quieres si me das la cabeza del llamado "diablo"—
—jajajajajaj, ¿dime que es una broma?— él alza las cejas mirándola con incredulidad

—¿tengo cara de que estoy bromeando?—

—nadie sabe de ese sujeto, ni siquiera lo he visto en la casa de Gino, a de ser muy bueno que lo buscan tanto y lo mantiene oculto, pero a quien quiero en mi poder es a Duncan solo a él—
—es muy bueno, mas bueno de lo que te imaginas y una de mis más grande pesadillas— se queda mirando hacia la nada con pensamientos llegando a su cabeza
—así que estás aquí por despecho—

—no lo llamaría despecho—

—¿a no? ¿Entonces como lo llamarías tú?— ella chasquea la lengua

—Duncan me uso, se supone que nosotros nos íbamos a casar y yo sería la señora di marco, Reyna y heredera, pero prefirió buscar una mosca muerta que no lo saciara como yo—

—¿y entonces que quieres que haga yo? ¿Cuál es mi papel aquí? ¿Quieres asesine a la esposa del hijo de Gino?.

¿ME ENAMORÓ EN NUEVE MESES? +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora