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La lluvia resonaba sobre la sombrilla que sostenía, sus pies pisaban pequeños charcos de agua haciendo que su limpio atuendo se ensuciara un poco en las orillas, atrás de él un silencioso chico caminaba empapandose de la lluvia porque Han Jisung jamas compartiría su sombrilla con un ser tan despiadado como lo era Lee Minho.

Eso ni loco.

Minho por el contrario no dejaba de pensar en su hermano menor, se sentía jodidamente culpable por su cruel destino, aún recordaba la última vez que se vieron, Felix apenas tenía 14 años cuando fue cruelmente atados por los líderes de clan.

Esa fue una de las razones por las que Minho no tuvo otra opción más que entregarse, para salvarle la vida a sus hermanos.

Pero al parecer no había funcionado.

— Aquí es

Minho levantó la mirada ante el chico vestido de blanco que se detuvo observando al frente.
Justo alli había una barricada de talismanes que contenían la energía maligna.

Minho frunció el ceño y se posicionó al lado de Jisung. Sus ojos recorrieron la zona y entendio porque estaban los talismanes allí.

Justo al centro del lugar, su hermano menor estaba atado de pies y manos en una roca, sus ojos estaba cerrados y una bandera de energía espiritual estaba pegada en su cabeza.

Su alma de lleno de ira y agarró al menor del cuello apretadolo, haciendo que este perdiera fuerza y soltará la sombrilla.

— ¡Malditos seres despreciables! ¿Que le hicieron a mi hermano?

Jisung luchaban porque el aire llegará a sus pulmones y en un intento por soltarse desenfundo sus espada logrando golpear a su oponente.
Minho fue empujado ligeramente hacia atrás y Jisung cayó al suelo tosiendo ruidosamente.

Debió escuchar a su hermano cuando le dijo que llevará algunos sirvientes, ahora probablemente moriria a manos de ese cultivador del mal.

— Te lo dije — Hablo luego de recuperarse — Está muerto.

— ¿Porque lo mataron?

— ¿Porque no hacerlo?

Minho apretó la mandíbula y sus manos se movieron a su cinturón.
El agua que aún caía del cielo recorrió su rostro y llevó una flauta a sus labios.

El sonido empezó a ser audible haciendo que Jisung se tensara al ver los talismanes moverse como si una rafaga fuerte de viento estuviese pasando por allí, pronto los papeles amarillos salieron volando y la barricada se rompió.

Jisung empuñó su espada y se preparó para una lucha.

A decir verdad el no había estado en la guerra que había sucedido diez años atrás. El en esa época apenas era un estudiante y como muchos de sus compañeros estuvo oculto para que no pudiese lastimarlo, Pero había escuchado mucho acerca de la gran guerra, de como Lee Minho había revivido a mil soldados muertos para que lucharan junto a él. De esta manera puso masacrar a más de tres mil personas esa noche.

El solo.

Jisung la primera vez que escucho esa historia no la creyó apesar de ser su maestro quien la contó. El no podía creer que alguien tuviera el poder de revivir a una persona y luego usarla para luchar. Eso era imposible.

Pero ahora lo veía con sus propios ojos, Lee minho había hecho que Lee felix abriera los ojos y se arrancará la bandera de energía espiritual como si fuera una hoja de papel sin ningún poder.

UNA BANDERA QUE POSEIA EL PODER DE TRES MAESTROS DEL CULTIVO ESPIRITUAL, SE SUPONE QUE ERA INDESTRUCTIBLE.

— Imposible — Murmuró, aún sin creer lo que sus ojos veían.

Sus ojos se concentraron nuevamente en quien tocaba la flauta y pudo ver una ladina sonrisa mientras soplaba y movía los dedos.

Lee minho iba a matarlo.

Lo supo cuando observo a Felix correr hacia él con las manos hacia adelante y los ojos completamente negros, sin un poco de blanco.

Este sería su fin.

🖤🤍

Blanco & negro [Minsung] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora