❪ 25. indeleble -final ❫

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capítulo veinticinco;
indeleble
—final

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pov's omnisciente

—Cinco costillas rotas, dos fracturas, un coágulo de sangre en el cerebro y aún así sigue viva. —comentó Draken en medio de todo el silencio,— Esa chica es una guerrera.

Habían pasado dos semanas desde el enfrentamiento de Tenjiku contra ToMan, el cual acabó siendo conocido como «El incidente de Kanto». Muchos fueron arrestados, entre esos los cinco oficiales de Tenjiku más los Haitani, que se negaron a abandonar a su difunto líder, demostrando que, al fin de cuentas, la admiración era más podero que sus deseos propios.

Por supuesto, también hubo personas que no sobrevivieron al enfrentamiento, siendo los de mayor peso Kurokawa Izana, Kisaki Tetta y Sano Emma, que a pesar de haber fallecido horas antes, fue bajo el mandato del líder de Tenjiku y se añadía a la lista.

—Fue porque el cuerpo de Kisaki recibió el mayor daño. —le recordó Takemichi, dándole un sorbo a su café.

Estaban dentro de la habitación de su hermana, que recientemente había sido dada de alta de cuidados intensivos y la habían bajado dos plantas más después de salir con éxito de su cirugía.

Y ahí se encontraba ella, acostada con varios cables conectados a su cuerpo que tomaban sus signos vitales y los pulsos. Si la recuperación salía bien, podrían quitarle la mascarilla de oxígeno en un par de días.


Según el doctor, podría ser normal si alguno de sus dedos se movía levemente o su cuerpo tenía espasmo. Sus reflejos seguían intactos y podrían ser el producto de aquello, pero a decir verdad, a Takemichi ya le preocupaba no haber sido testigo de esas anomalías en lo que llevaba visitando a su hermana.

El rubio, preocupado, caminó hasta sentarse al lado de la camilla para tomar la fría mano de su hermana y dejar un beso en ella, acariciando la zona.

Y al mismo tiempo, la puerta de la habitación se abrió y dejó a un ojeroso Sano Manjiro entrar.

—¿Ya vino el doctor? —quiso saber.

Manjiro había sido uno de los que se negaba a abandonar por tanto tiempo a Hye, llegando a durar hasta dos días sin ir a su casa o bañarse, comiendo solo de las máquinas expendedoras y café. Por obligación, y casi amenaza de su mejor amigo, tuvo que volver a su hogar para asearse y comer adecuadamente antes de regresar al hospital.

—Sí. —Takemichi ojeó a Draken antes de volver a ver al líder de su pandilla.

—¿Y entonces? —el rubio no tardó en acercarse y apoyarse en la pared, cerca de Hyeon.

Hanagaki tomó una enorme bocanada de aire antes de soltar todo lo que el doctor les había dicho horas antes, intentando no pasar por alto ningún detalle y ahogando el nudo de su garganta por sentirse tan vulnerable ante los resultados de su hermana.

Mikey escuchó en completo silencio, que aunque no demostraba nada en su exterior, por dentro estaba intranquilo y afligido.

Momentos después, Takemichi se levantó de la silla y Manjiro comenzó a caminar hacia ella para sentarse y tomar su lugar, apoyando su espalda hasta atrás sin dejar de ver el rostro lleno de heridas y los brazos llenos de cicatrices de la muchacha.

³ indeleble ; tokyo revengers  ❪ Saga 𝗧𝗜𝗠𝗘𝗟𝗘𝗦𝗦 ❫Donde viven las historias. Descúbrelo ahora