Érebo

Capítulo 22

Enajenación

Sophia

El sonido de las ambulancias me está volviendo loca, necesito que paren y me digan cómo está Alexander. 

一Y dices que se trata de Hazel King… 一Mi padre habla con uno de los tenientes que custodian el lugar一. Un ajuste de cuentas ha sido lo más posible. 

一El General tiene la situación bajo control y los Capitanes están haciendo batidas por el territorio buscando más Antonegras. 

一Infórmame 一demanda, pero parece que el teniente duda一. Soy el Presidente de la Cámara Noruega y estamos hablando de la seguridad de mi hija, quiero saberlo todo por delante del mismo General. 

一No puedo hacer eso, señor 一balbucea. 

Los médicos entran y salen de la sala sin darme información, ninguno me mira, ninguno nos informa. Llevo desde las once de la noche aquí, el General se fue esta mañana a la central, seguramente para ver a esa mujer. 

Me da rabia. 

Necesito verle y saber de primera mano cómo se encuentra. Perder a Alexander es una herida que no cicatrizará, todo lo que perderé… 

Aparto la vista de la carretera frente al hospital y miro el interior de la planta. 

Los tíos de Alexander están hablando en el sofá más alejado a nosotros, no hablan mucho conmigo, parece que no les caigo bien o es que son así con todo el mundo. Su abuela está tranquila tomándose un café, esa mujer de setenta años parece que tiene un ego desmesurado, no deja de mirarme por encima del hombro. Mi madre habla tranquila con uno de sus guardaespaldas mientras mi padre está al teléfono, habla con enojo, no sé bien si está hablando con el General por no permitir a nadie entrar en la habitación.

Soy su prometida, ¿con qué derecho me puede prohibir el paso?

Han destruido el día más bonito de mi vida, ha muerto gente en el día de mi boda y no he podido darle mi sí quiero a Alexander, ni siquiera pudo decirlo él. 

Mi vestido se llenó de sangre, está inservible después de que haya sido pisoteado por los invitados y arrastrado por el suelo. ¿Y encima tengo que soportar este ninguneo?

Odio a Oliver Barone. Sus intentos por impedir que me case con Alexander nunca surtirán efecto. Incluso he llegado a pensar que él dio la información a la mafia para que lo detengan. ¡Todo es posible! 

Mi padre se acerca a mí cuando cuelga la llamada y se sienta a mi lado dando un repaso a la sala llena de agentes. El General ha creado un círculo de seguridad y nadie puede entrar ni salir sin su permiso.

一¿Quieres que te mire un médico? 一me pregunta preocupado, pero niego一. Ha sido algo duro, Sophia, tiene que verte un médico o un psicólogo…

No necesito un médico ni un psicólogo.

一No, papá.

一Alexander va a estar bien, preocúpate de tí 一bufa一. ¿No era esto lo que querías? Solo falta que Alexander firme, le haré firmar en cuanto despierte.

一¡Quiero que me quiera!

一Lo hará 一me asegura一. El roce hace el cariño.

Más le vale, no pienso seguir aguantando sus infidelidades, tendrá que amarme a mí. 

Quitaré de en medio a cualquiera que pueda arruinar mi felicidad junto a él, empezando por esa mujer de ojos violeta, no pienso permitir que se acerque a él.

一¿Qué harás para quitarme de encima a la capitana?

一¿Qué problema tienes con ella?

一Estuvo con Alexander y…