Capítulo 43

1.1K 101 43
                                    

Descanso

Hazel

El avión de Alexander aterriza en pleno centro del aeródromo del comando francés. Me cuelgo la mochila que dejé en el asiento de al lado y me levanto sujetándome en las muletas. Alexander intenta venir a levantarme de nuevo, pero me aparto. Quiero hacerlo yo sola. 

一Hija, ¿no quieres ayuda para bajar? 

一No, mami, tranquila. 

Me muevo impulsándome con las muletas sin dejar que el pie roce el suelo. No lo he dicho, pero me duele horrible, quiero llegar a casa, tomarme un anelgésico o ir a Murmansk y que Vera me mire bien. Tenía el hierro metido unos diez centímetros, quizás no es mucho, pasó justo por debajo del hueso. 

一Puedo bajar sola, no te preocupes. 

Le doy un beso en la mejilla cuando llego a su lado. Me mira con preocupación, pero no tiene por qué, voy a estar bien. Le doy un asentimiento de cabeza a Oliver para agradecerle haberse preocupado por mí durante todo el vuelo y me encamino hacia las escaleras del avión. 

Alexander viene detrás de mí, tiene su mano puesta en mi baja espalda y estoy segura de que es para agarrarme si pierdo el equilibrio. 

Antes de nada, me pongo las gafas de sol que llevaba en mi mochila para taparme los ojos. 

Me siento cansada: la dosis de sexo, el estrés… 

Caí rendida en la cama en cuanto acabamos, pero me sigo sintiendo cansada. Es normal después de haber inhalado tanto gas metano y haber caído desde una altura considerable. Siento todos mis músculos cansados y adoloridos. Tengo moratones en la espalda y en las piernas, arañazos en los brazos y en la cara. 

Bajo con cuidado las escaleras, las muletas son firmes y no flaquean. Veo a los agentes vestidos de negro, los de mi escuadrón, formándose en la pista de aterrizaje. 

Piso suelo francés por fin y me muevo hacia ellos a paso rápido. 

一¡Laurel y grandeza, mi capitán! 

Sonrío agradecida. Mis tenientes están en primera fila con una sonrisa de oreja a oreja. Me acerco a Nicolás que está totalmente recto en primera fila siendo el alto mando de la tropa de Cris. No quiero éstas formalidades ahora. Detallo su cara, la última vez que lo vi llevaba una brecha en la ceja.

一¿Estás bien? 一le pregunto al llegar a su lado. 

一Gracias a tí, sí 一sonríe. 

Le doy un apretón en el brazo con cuidado. Escucho un gruñido a mi espalda y ruedo los ojos. 

Tengo al animal gruñón y celoso detrás de mí.

一Espero que los que os vayáis de vacaciones hasta finales de julio descanséis bien 一digo en voz alta para todos. 

Sigo mi camino dejándolos atrás. Veo a Connor detrás, también está firme. Le tengo cariño, es un hombre divertido. 

一¡Mayor! 一Le hago un saludo militar. 

No es lo mismo mi escuadrón que un superior. 

一¿Todo bien? 

Detalla mi pierna encogida y asiento. 

一Podría estar peor. 一Le quito importancia. 

Se salta el protocolo y me abraza con fuerza. Sigo mi camino hacia el aparcamiento mientras escucho como Connor bromea a mi espalda y Alexander bufa. 

Son como el agua y el aceite, pero estoy segura de que Alexander le adora. 

一¡Hazel! ¡Qué alegría verte bien! 一Ethan viene corriendo a abrazarme. 

ÉreboDonde viven las historias. Descúbrelo ahora