Hay oscuridad, maldad como dolor en todo el mundo, y se dice que en el infierno es peor... y saben, no es tan malo, ese infierno está vacío, los verdaderos demonios están en otra parte.
Y͎͔̩̠̮̗̎͊̍͗͛͂͌̾̽̅̈͗ y̖̫̣̱̰̩̣̤̣̜̓̽́̿͗͂ȏ̬̳̝̲̣͈̮͙̰͉̝̤̏̓̀̑ ĥ͊̅̆̽...
Corríamos bajando la montaña hacia todo el ejército de Shadow Blood, no había ni daría vuelta atrás, esto es algo que se decide aquí y ahora.
Sombra345: mi señor... ahí vienen, al parecer sí eligen luchar y perder por este lugar en vano -Dijo una de las sombras que veía a lo lejos como se aproximaban tanto Daharim como el resto de demonios.
Shadow Blood: ellos así lo escogieron, y así será... no tengan remordimiento en matarlos, y tráiganme vivo a Daharim, aun no pierdo la oportunidad de tenerlo de nuestro lado... Creep, tú y el resto ya saben que hacer.
Creep: sí mi señor... esto será alma comida.
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Daharim: ¡Por el infierno! ¡Por el hotel Hazbin y el alquiler gratis!
Los demás gritaron igual y atacamos directo a los esqueletos, sombras y demonios a manos de los gusanos y serpientes. Angel con sus metralletas se cargaba a muchos dándoles en la cabeza, el tipo pese a ser todo un travesti tenía estilo usando armas y sabía darle a todos en la cabeza.
Husk estaba utilizando ¿Sus cartas? a quien engaño literalmente era muy bueno lanzándolas y matando a muchos enemigos con estas, rebanando varias cabezas y haciendo explotar la mayoría con estas, N1 me contó en secreto que el fue un Overlord y por eso aquellos poderes como habilidades cuando usaba sus mazos de cartas. Por lo que no me quejé y dejé que siguiera atacando con todo igual que N1 y yo.
Sir Pentius desde su nave prendió vuelo para atacar así con misiles, proyectiles y armas suyas desde lo más alto, tal como se lo pedí, logrando despejar el camino para seguir avanzando.
Sir Pentius: ¡huevos! probemos ya la nueva arma ¡¡Carguen el rayo de la muerte!!
Huevo1: ¡sí mi señor!
Frank: ¡Todos a sus posiciones!
El gran dirigible desde la punta delantera que parecía una nariz puntiafguda, comenzaba a brillar de un color blanco incandescente, en tan solo unos segundos, miró al gran ejército, presionó una palanca cerca suyo y habló serio como determinado.
Sir Pentius: fuego... -Movió la palanca todo recto y disparó el rayo que terminó por dar de lleno contra todos los esqueletos como seres oscuros.
Creando una poderosa explosión que por poco nos manda a volar, causando un rastro de destrucción al frente nuestro, sin rastro alguno de edificio o casa alrededor.
N1: ¡¡Tienes mis mil respetos Sir Pentius!!
Daharim: ¡Así se hace! ¡¡Estuvo de HUEVOS todo eso!! -Dije asombrado al ver que literalmente nos despejó bastante el camino.
Sir Pentius: *desde un megáfono* no es nada, solo ayudo a mis amigos y sorprendo más al gran Castigador -Dijo al final con un gran entusiasmo que me hizo voltear a verlo feliz al igual que al resto.
