Gilmore Girls || Logan Huntzberger

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Logan
–Por tu culpa el chico del café ya no me regalara mis expressos.

–Es su manera de coquetear.

–Todos los Martes pasaba, tomaba el café y saliendo de clase volvia a agradecerle el lindo detalle. Ahora llegare más tarde por tu culpa.

–¿Puedes dejar el drama? Si lo que quieres es café gratis, bien, listo, mañana compro un carrito que este solamente fuera de tu habitación.

Aquí estábamos, mi novia y yo. Aun es raro llamarla así pero me encanta. Vamos de camino a mi habitación, recién fuimos a comer un poco y de paso compré su café.

–Fuiste muy grosero.

–Solo deje en claro que eres mi novia. Es satisfactorio salir contigo, ver los rostros de los chicos que te observan deformarse al ver como te beso y te presento como mi novia.

–Ugh– se quejó. –Soy una idota al tenerte como novio.

–¿Tan rápido te arrepentiste?– pregunté burlón. 

–Te vas a cansar primero tu que yo de ti rubio.

–¿Qué  es lo que querías decirme?– dije tomándola de la cintura. Así siendo más fácil caminar entre tanta gente acumulada por los rincones de Yale.

–Supongo que el día de mañana me mudo, ayer mientras tuvimos nuestra linda cena, mi hermano me mandó mensajes. Al parecer mi departamento ya esta como nuevo y las llaves se las entregaron a Emi.

–¡Maravilloso! Sé que detestas que te lo diga pero es por tu bien.

–Ni se te ocurra mencionarla.

–Es lo mejor, ya no vivirás con ella y esa distancia va a ser muy sana.

–Iré rápido a mi habitación– beso mi mejilla. –Te alcanzo.

Abrí la puerta de mi habitación y grande fue la sorpresa de encontrarme a Rory y mi hermana.

–¿Qué haces aquí?– pregunte de forma brusca y grosera.

–Soy tu hermana, no debes tratarme...

–No me refiero a ti. No debes ni quiero verte aquí sin permiso Gilmore.

–Solo viene a hablar.

–Deje en claro todo ayer y los días pasados.

–No trates así a tu gran amiga.

–¿Amiga?

–Me contó lo cercano que son, sin duda una gran chica. 

La puerta se abrió. –En definitiva me mudo mañana, no pude entrar. París y Doyle parecen tener acción.

–Mimi– la interrumpí ya que no vio a las demás presentes.

–Guardaré el helado aquí, no olvides recordarme llevarlo.

–Princesa, tenemos visitas– ella de inmediato se giró, note como la pena conquistó su rostro.
–Hola– saludo tímida. –Pensé que estabas en clase Rory, que sorpresa verte aquí– me miró de forma rápida, yo solo negué con la cabeza para dejar en claro que no tenía nada que ver conmigo.

–Mikayla ella es Honor, mi hermana.

–Es un placer por fin conocerte.

–¿Y por qué la visita?

–Tenía que verte y como nunca revisas el correo tuve que venir para mostrarte esto– Puso su mano frente a mi, dejando a la vista su nuevo anillo.

–¡Dios mío!– La abrace.