Perdidos y Encontrados. • maxley •

Día de descanso

Los fin de semanas son para la mayoría días de completo descanso, unos descansaban desde el viernes, otros desde el sábado y los más desafortunados recién podían descansar el día domingo. Ese era el caso de Bradley, siempre usaba ese día para varias de sus actividades favoritas, las cuales eran: cocinar, cuidar sus plantas, leer algún libro y/o ir a un lugar lejano dónde no podría encontrar a nadie. Al menos asi era cuando no conocía a max, ahora había alguien con quién podría estar solo y acompañado a la vez, nada se sentía invasivo, nada era incómodo o tenso, hasta las pequeñas peleas y lo competitivo que llegaban a ser cuando estaban juntos era algo divertido, algo que era solo de ellos.

Tomo su celular, dispuesto a mandarle un mensaje a max diciéndole que se juntaran para ir a la playa. Podrían ver el atardecer juntos, meterse a bañar y comer algo. Parecía un buen panorama para el último día de descanso antes de volver a clases y las pesadas tareas.

Bradley estaba entrando al chat que mantenía con max, pero andes de poder mandar algo le llegó un mensaje del contrario. Al principio se emocionó y después de reaccionar se dió cuenta que se vería como un intenso al no tardar ni un milisegundo en ver el mensaje que le habían enviado. El mensaje de max decía "podemos vernos? Puede q t extrañe un poco", Bradley le respondió y le dijo que podían verse e ir juntos a la playa, cosa que obviamente max acepto gustoso.

Max estaba vestido con su ropa habitual, nada formal como el día anterior y Bradley agradecía eso, desde que lo conoció siempre le gustó su forma de vestir, cosa que nunca se permitió decir en voz alta.

—Al fin llegas, no sabes las ganas que tenía de ir a tirarme al mar y nadar un rato. — menciono mientras miraba a bradley frente a él.

—Maxi, literalmente llegué 5 minutos antes de la hora acordada, no es mi culpa que estuvieras tan emocionado por verme y por eso llegaste casi media hora antes

—Emocionado estoy por meterme al agua, no por estar contigo. — rueda los ojos.

—No te metiste por esperarme, así que te emociono más yo. — ataca está vez con la intención de hacerlo enojar, le gustaba verlo así.

—Lo dice el que vio mi mensaje en el momento exacto que lo mandé. — se ríe recordando lo rápido que lo vio y respondió el mensaje que le había mandado durante la mañana.

—Eso fue porque mi celular quedó en tu chat. — no sabía que más decir, no tenía otra excusa y fue su única opción.

—¿Desde ayer? Que oportuno.

— Oportuno sería si te callaras

— Callame. — se acerca al rostro de bradley mientras sonreía.

—No te voy a besar cómo en los típicos momentos cliché de los libros, te voy a tirar un putazo para que te calles.

— Así me gustan, que me maltraten y me insulten. — dice para luego "gruñir" en una clara burla.

—Y yo era el de los gustos raros, tú estás peor que yo. — lo empuja con una de sus manos al sentirlo muy cerca.

—Entonces admites que te gusta que te rueguen.

—No lo admiti. — responde indignado.

—tampoco lo negaste, así que...

—Te estás ganando un estatequieto.

Con eso dicho max puso su mano cerca de la boca y dramatizó como si estuviera cerrando un cierre, eso hace reír a Bradley por lo obediente que podía comportarse a veces o tal vez solo lo estaba molestando nuevamente, pero al menos se había quedado callado.

Caminaron a la plaza, se quitaron sus zapatillas quedando descalzos sobre la arena que quemaba bajo sus pies, pues está al estar expuesta al sol durante lo que llevaba del día estaba algo caliente, ellos no le daban una real importancia a eso, de cierta manera ese ardor los hacía sentir cómodos. Se sentaron un rato sobre la arena, mientras posaban sus miradas en la danza de las olas que subía sobre la arena, pareciendo que quería acercarse a ellos, pero algo se lo impedía y la llevaba de vuelta. Tenían dos opciones: quedarse ahí admirando la hermosa vista que les ofrecía el lugar o meterse en el agua.