Starboy| barcagamer

• Cap 37 •

Allison se despertó temprano, con los primeros rayos de sol filtrándose por la ventana. Observó a Barca durmiendo plácidamente a su lado, su respiración lenta y constante. Con cuidado, se incorporó un poco y apoyó su mentón en el pecho de Barca, mirándolo con ternura. Sus dedos comenzaron a acariciar suavemente el mentón de él, sintiendo la textura de su piel bajo sus yemas.

Barca, aunque dormido, parecía responder a su toque, moviéndose ligeramente pero sin despertar. Allison sonrió ante este pequeño gesto y se inclinó para dejar suaves besos en el pecho de Barca, disfrutando de la tranquilidad de la mañana y del momento íntimo que compartían.

Después de un rato, Barca comenzó a despertar. Abrió los ojos lentamente y vio a Allison mirándolo con una sonrisa dulce.

—Buenos días, amor —murmuró, todavía adormilado.

—Buenos días —respondió ella, dejando un último beso en su pecho antes de volver a apoyarse en su lado— ¿Dormiste bien?

—Perfectamente, gracias a ti —dijo Barca, estirándose un poco y envolviéndola con sus brazos— ¿Y tú?

—Sí, muy bien —dijo Allison, acurrucándose más cerca de él.

Permanecieron en silencio por un momento, disfrutando de la cercanía y la tranquilidad del amanecer.

—¿Te parece si hoy salimos a hacer algo especial? —sugirió Barca, acariciando suavemente la espalda de Allison.

—Claro, ¿qué tienes en mente? —preguntó ella, curiosa.

—Pensaba en un picnic en el parque, llevar a Luna y pasar un día relajado, solo nosotros tres —dijo Barca, sonriendo.

—Me encanta la idea —respondió Allison, sus ojos brillando de emoción— Vamos a preparar todo después del desayuno.

Ambos se levantaron de la cama con una nueva energía, listos para disfrutar de un día juntos. Prepararon un desayuno ligero y comenzaron a planear su picnic, riendo y charlando sobre lo que llevarían y qué juegos harían con Luna.

Después de ducharse y vestirse, Allison y Barca se dirigieron a la cocina para preparar dos canastas llenas de delicias para el picnic. Incluyeron sándwiches, frutas, galletas, y una botella de vino, asegurándose de no olvidar el agua y las golosinas para Luna.

Barca colocó el collar y la correa a Luna, que saltaba emocionada, lista para la aventura. La pareja salió del departamento, cargando las canastas y la perrita moviendo la cola con entusiasmo.

Mientras caminaban hacia el parque, Barca pensaba en la cadenita de oro que quería regalarle a Allison. Había planeado dársela en un momento especial durante el picnic. Una cadenita con una estrellita y otra con un sol, simbolizando su conexión y cómo iluminaban la vida del otro.

Llegaron al parque y encontraron un lugar perfecto bajo la sombra de un gran árbol. Extendieron una manta y comenzaron a disponer las comidas. Luna se acomodó cerca de ellos, disfrutando del aire fresco y los sonidos del parque.

—Este lugar es hermoso —comentó Allison, mirando a su alrededor mientras sacaba los sándwiches de la canasta.

—Lo es, y más cuando estoy contigo —respondió Barca, sonriendo mientras la observaba.

Comieron y conversaron, riendo y disfrutando de la compañía mutua. Después de un rato, Barca decidió que era el momento adecuado. Se levantó y sacó una pequeña caja de su bolsillo.

—Allison, hay algo que quiero darte —dijo, arrodillándose frente a ella.

Allison lo miró con curiosidad y emoción mientras él abría la caja, revelando las delicadas cadenitas de oro con los colgantes de estrella y sol.