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-Potter se comió toda la prensa por ti- señala Remus el televisor.

-Ajá- responde poniéndole helado a la pizza.

-¿Qué haces?

-Me dio antojo.

-¿No estarás embarazado,no?- bromea tomando otra porción de pizza- ese día que saliste a comer con Potter capaz tomaste leche y no agua- lo molesta.

-Claro ¿y como tengo al bebé? ¿lo cago?- señala molesto- además solo comimos una hamburguesa y charlamos de autos.

-Que fifas- se queja- yo pude ver el bulto de Sirius en cada traje que se probaba, y su trasero, dios- se queja golpeándose con la almohada- ¿por qué tiene que ser un imbécil, mujeriego, estúpido?

-Los mujeriegos son los más gays- señala abriendo un chocolate.

-Así es, hermano, ¿no crees que todo esto nos hará daño?

-Más daño nos hacen los Ferrari's.

-Entonces aceptaste que lo amas.

-Me gusta, amor es algo que nunca sentí.

-A mi me amas.

-Pero tu eres mi amigo, es otro amor.

-Eso sí.

-¿Y...? ¿quieres salir con él? 

-¿Tu quieres salir con Sirius?

-Comprendo- suspira.

La entrevista de Potter sigue en la televisión, una hora y media hablando con los medios.

-Él te quiere- señala Remus- él odia las entrevistas.

-Solo quería camara. Él me detesta, Rem. Él dijo que yo era malo- comienza a llorar, dejando su comida de lado y acostándose sobre las piernas de Remus.

Lupin acaricia su cabello mientras supira.

-Es imbecil pobre, pero estoy seguro que él no piensa eso de ti.

-Nadie diría eso por decirlo, debo serlo, ¡y lo peor es que no sé como cambiarlo!

-No cambies para gustarle a alguien, cambia por ti.

Regulus asiente.

-Apaga eso, ya lo vi demasiadas veces lindo, sudando y con esa sonrisa increíble.

Lupin hace caso.

[...]

A media noche los Mercedes se encuentran fuera de la habitación, ambos vomitaron todo a su paso y se sienten mal.

-Estamos esperando al médico- explica el SEO de Ferrari a los chicos que no son suyos, pero el de mercedes no le cae bien a Remus- ¿puedo ayudarlos en algo?

Ambos niegan con la cabeza.

James y Sirius bajan el ascensor, ambos van riendo.

-¿Qué pasó?- pregunta James frunciendo el ceño.

-Nada, Potter. Sigan- exige el CEO de Ferrari.

-¿Por qué estás tú? ¿qué pasó?- pregunta Sirius.

-¿No puedo ayudar a la competencia?

-Literalmente no- responde James.

-Sean humanos, y vayan a dormir.

-¿Qué pasó?- la voz firme de Sirius hace que Remus responda, no puede ignorarlo.

-Comimos de más- responde Remus mirando sus pies.

-Ajá, ¿y?

-Esperamos a que limpien el vómito o nos den otra habitación- explica el SEO de Ferrari.

-Podría dejarles mi habitación- propone James.

-O la mía.

-¿Duermen separados?- pregunta Regulus curioso.

-James ronca- explica Sirius.

-Y Sirius habla dormido, tendrías que hacer un podcast- bromea.

Sirius le sigue la corriente y logran sacarle una sonrisa a los mercedes.

-Bueno si los chicos quieren pueden mudarse a una de sus habitaciones, ustedes pueden tranquilamente dormir juntos.

-Suena mal si lo dices así, John- sonrie Sirius divertido.

Regulus ríe por lo bajo.

-Les dejaré la mía, soy más limpio que Sirius- posiciona una de sus manos en la cintura de Regulus, sonrojandolo de inmediato.

-Mentira.

-Por lo menos no tengo que sacar 200 bolsas de compras.

-A Remus le gusta hacer unboxing- señala a Mercedes mientras entrelaza sus manos, besa los nudillos de Lupin.

-Oigan- llama John antes de que sigan caminando- quiero dormir, no hagan tanto ruido.- sonrie divertido con las cejas arriba.

Sirius le saca el dedo del medio y siguen su camino.

Fórmula 1//JegulusDonde viven las historias. Descúbrelo ahora