Ada

Capítulo XXVI

Nota de autor: Espero que os guste, le he dado muchas vueltas a este capítulo. Y como siempre darle amor y por favor comentar si os va gustando.

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Esperaba miles de cosas menos eso. ¿No sé supone que hasta que la encuentre nadie sabe quién es tu pareja destinada?. Entonces por qué Antonino está tan seguro de saber quién es mi pareja destinada. Tenía demasiadas lagunas. La abuela por protegerme, me había escondido muchas cosas que podrían ayudarme a saber que, quien y como soy o hacia donde debería ir.

— ¿Como lo sabes?

— Pensé que tú primera pregunta sería quién es — Río — Si te hubieras leído el libro sabrías que como Druna no puedes sentir igual que el resto a tu pareja destinada. Solo se conocen vuestros lobos y solo descubres a tu pareja destinada en tu forma lobuna.

— Pero esa es nuestra forma más vulnerable, si somos sometidas ya no hay vuelta atrás, solo alguien que se haya ganado nuestra confianza ciega lo podríamos dejar vernos en nuestra forma de lobo.

— Y por esa razón, al Heraldo se le concede el poder de ver a vuestra pareja destinada. Para saber que la persona es la indicada y así el clan puede seguir creciendo, y no se está intentando usar alguna artimaña con la Druna en cuestión.

— Y por supuesto no me vas a decir quien es ¿verdad?.

— Me gusta cuando lo descubrís vosotras solas.

— Pero, ¿Ya lo he conocido?

— Tienes que averiguarlo tú sola. Son tus tiempos.

— Si no me lo vas a contar todo, ¿Para qué has venido?

— Para hablar,  ¿Que ha pasado con Galep? Tú te escondes y el de desespera con tu ausencia.

— El me habla mal, yo le aplicó lo único que puedo que es desaparecer. Según los papeles yo le pertenezco pero no sé para que ni porque.

— ¿Se lo has preguntado?

— No.  Pero por lo que me ha dicho hoy no tiene por qué contarme nada.

— ¿Y eso es lo único que te ha enfadado?

— Si, ¿Porque? ¿Hay algo más por lo que debiera estar enfadada?

— No, enfadada no, celosa tal vez.

No pensaba seguir escuchando una tontería más. ¿Yo celosa de quién? A mí que haga con su vida lo que le dé la gana, pareja destinada o elegida, lo que a él le complazca, no es mi problema. El puede tomar la decisión de acostarse con la que deseé siempre y cuando no rompa nuestro trato  "no en mi presencia, no en nuestra habitación" . ¿Podría tildarse ese acuerdo de celos?, no, simplemente, no me apetece pasar por ciertas situaciones o aguantar ciertos acontecimientos.

— Gracias por las gominolas, es hora que te vallas.

Me miró raro, se rió mientras negaba con la cabeza, me dice una tontería y la loca soy yo. ¿Pero que le pasa a todo el mundo hoy?.  Me muero de ganas de saber si Ryan ha sellado su lealtad con Braien, debería si es un ser de honor.  Si se lo pregunto inicio otra conversación que nos puede llevar al mismo punto Galep. Force demasiado mi poder para no tener que unirme a el.  Sorprendentemente Antonino no se opuso, me dejó tomar esa decisión. Braien me alentó a ella, y la duda es ¿confiaban en que yo ganara o perdiera? Podría preguntarles, si. ¿Me darían una respuesta verdadera? Si, no, tal vez, ahora mismo creo que nada es certero, y las alianzas están unidas por un fino hilo.