Chantaje ButchxBellota (ppgz)

cap28

Bellota: Ya para, te dije que estoy bien... -intentó tranquilizarla, pero su amiga se negaba a creerle.

Las tres chicas iban caminando hacia la salida del hospital.

Burbuja: Mentirosa, siempre que te hieres niegas el dolor. Me preocupas -dijo Burbuja mientras sostenía a Bellota, aún negándose a dejarla ir.

Bellota: Lo que digas... pero no sé qué tiene que ver una hierba en todo esto.

Burbuja: No dije hierba. El doctor dijo que puedes tener una sordera temporal, debes descansar y cuidarte un poco.

Bellota: No es algo grave, ni siquiera lo notó. No debes preocuparte. Dijo que en unas dos semanas estaré perfecta y si mantengo la herida limpia no habrá cicatrices. No deberían exagerar cuando me he estrellado contra edificios y caído de alturas inmensas. Esto es un simple rasguño para mí.

Bombón: Un rasguño sí, pero tienes una sordera temporal que podría empeorar, así que debes mantener reposo. Al menos por esta semana, relájate de tus actividades de heroína.

Bellota: ¿Tú también? No me digan que ambas creen que las escucharé.

Bombón: ¿Qué les dirás a tus padres? Pensé que querrías ayuda con eso.

Bellota miró en silencio a su amiga y luego suspiró. -Bien, ustedes ganan.

Burbuja: Vuelve a casa y descansa.

Bellota: Sí, suerte en tus clases de ballet, nos vemos. -Luego de hablar, la chica se elevó en el aire y se retiró.

Bombón y Burbuja se miraron un poco preocupadas.

Bombón: ¿Crees que esto le causará problemas?

Burbuja: Espero que no...

~~~

Dónde...¿dónde está la caja? Juro que la dejé aquí... -Bellota buscó de arbusto en arbusto sin hallar lo que había escondido.

"¡Oye!" un ruido cercano hizo que tuviera que esconderse. Un grupo de jóvenes pasó cerca del lugar.

-¡Ufff, cuánta basura! Tch, la gente es increíblemente desconsiderada con la naturaleza, incluso se atreven a tirar medicamentos o Dios sabrá qué son estas cosas.

Bellota observó desde su escondite cómo uno de los jóvenes del grupo sostenía el frasco con pastillas en su mano.

-Te dije que no lo agarres con la mano. Deberías devolverlo a la caja y llevárselo a la policía antes de que nos metamos en problemas -una chica del mismo grupo le aconsejó.

-Estás exagerando. Ya te dije que me encargaré yo mismo de botarlo. Ya vete, yo me encargo -pero el joven era terco.

El grupo habló un rato y luego empezó a dispersarse.

Bellota: Rayos... ¿Ahora qué? -Bellota miró la hora y empezó a preocuparse. Su familia iba a preocuparse si se demoraba mucho.

¿Cómo podía recuperar las cosas sin ser descubierta? Lo pensó por varios momentos hasta que tuvo una idea...

~~~

-¡Estoy en casa! -El joven se quitó los zapatos y luego caminó a la sala. -¿Mamá?... Parece que no ha vuelto del trabajo.

El chico vio que su madre le había guardado comida, así que se sirvió y empezó a comer.

-Qué caja tan rara, fotos, cartas y un frasco con pastillas sin nombre. Suena a todo un misterio -el joven observó la caja por varios minutos mientras terminaba de comer. Luego de eso lavó los platos y se dispuso a revisar la caja. Tomó una de las cartas y estaba por leerla cuando empezó sonó el teléfono de la casa y se paró para atenderlo.