Capítulo 10: Recuerdos Perdidos (?)

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La mañana siguiente comenzó como cualquier otra en la preparatoria. El sol se filtraba tímidamente a través de las nubes, bañando los pasillos y las aulas en una luz suave y pálida. Los estudiantes llegaban lentamente, aún adormilados, arrastrando los pies hacia sus clases, pero algo era diferente. Un murmullo inusualmente animado recorría la escuela, una corriente subterránea de chismes y especulaciones que se movía de boca en boca.

T/N caminaba hacia su clase, su cabeza todavía un poco pesada por la falta de sueño. Había algo en el ambiente que no podía identificar, una sensación de anticipación y curiosidad que lo seguía como una sombra. Al entrar en el aula, todos los ojos se volvieron hacia él, y las conversaciones se apagaron de repente.

Rei ya estaba en su asiento habitual, cerca de la ventana, con la mirada perdida en el horizonte. A pesar de la calma aparente, había una tensión en su postura, como si también sintiera la extraña energía en el aire.

—Buenos días, Rei —dijo T/N, tomando su lugar junto a ella—. ¿Te sientes bien?

Rei levantó la vista, sus ojos azules encontrando los de T/N. Había una mezcla de confusión y preocupación en su expresión.

—Buenos días, T/N —respondió, su voz suave—. Sí, estoy bien... solo que... ¿notas algo raro hoy?

T/N asintió, mirando alrededor del aula. Todos los compañeros de clase parecían estar observándolos con una mezcla de curiosidad y algo que no podía identificar del todo. Antes de que pudiera decir algo más, Asuka, que estaba sentada unas filas delante, se giró con una sonrisa astuta en el rostro.

—Vaya, vaya, miren quiénes llegaron —dijo Asuka, sus ojos brillando con una chispa de malicia—. ¿Cómo se sienten nuestros amantes borrachos esta mañana?

T/N frunció el ceño, completamente desconcertado.

—¿De qué estás hablando, Asuka? —preguntó, mirando a Rei en busca de una respuesta. Pero ella parecía tan confundida como él.

Asuka soltó una risita y se inclinó hacia ellos, como si estuviera compartiendo un secreto.

—¿No recuerdan nada de lo que pasó anoche? —preguntó, sus cejas arqueadas en una expresión de sorpresa teatral.

Rei y T/N se miraron, sus mentes luchando por desenterrar cualquier recuerdo de la noche anterior. Había fragmentos borrosos: la azotea, las risas, el licor... pero más allá de eso, sus mentes estaban en blanco.

—No... no mucho —admitió T/N finalmente—. Solo recuerdo que estábamos en la azotea y... bebimos un poco.

Asuka se rió de nuevo, esta vez con una burla clara.

—"Bebieron un poco", dice. —repitió, sacudiendo la cabeza—. Ustedes dos se besaron anoche, delante de todos. Y fue algo digno de ver.

El silencio cayó sobre ellos como una manta pesada. Rei y T/N se quedaron mirando a Asuka, la incredulidad pintada en sus rostros. La idea de que se habían besado, y además, frente a toda la clase, era casi imposible de procesar.

—¿Qué? —exclamó Rei, su voz apenas un susurro—. ¿Estás segura?

Asuka asintió, disfrutando claramente del desconcierto de sus amigos.

—Totalmente segura. Fue el espectáculo de la noche. —dijo con un tono de satisfacción—. No solo se besaron, sino que parecía que estaban a punto de devorarse el uno al otro.

T/N sintió que su rostro se calentaba al escuchar esas palabras. Miró a Rei, buscando algún indicio de que todo esto era una broma, pero ella estaba tan sorprendida y avergonzada como él.

—No puede ser —murmuró T/N, sacudiendo la cabeza—. No recuerdo nada de eso.

Antes de que pudieran decir algo más, Kaworu se unió a la conversación, su expresión mucho más suave y comprensiva.

—Es cierto, ustedes dos se besaron. Pero... no fue solo el alcohol. —dijo, su voz tranquila—. Parecía que había algo más, algo que han estado guardando durante mucho tiempo.

Las palabras de Kaworu resonaron en el aire, llenando el espacio entre T/N y Rei con una verdad silenciosa. Había algo en sus miradas, en la forma en que se sentían tan cómodos el uno con el otro, que siempre había hablado de una conexión más profunda, algo que ambos habían evitado confrontar abiertamente.

—Entonces... ¿todo el mundo lo vio? —preguntó Rei finalmente, su voz apenas un susurro.

Asuka asintió con una sonrisa.

—Oh, sí. Todos lo vimos. —dijo, su tono más suave ahora—. Y, sinceramente, todos pensábamos que ya era hora.

T/N y Rei intercambiaron miradas, sus rostros llenos de una mezcla de vergüenza y algo más, una chispa de algo nuevo y emocionante que no podían negar. Aunque la revelación de su beso había sido un shock, había una parte de ellos que no podía ignorar la verdad detrás de todo.

—Creo que necesitamos hablar de esto —dijo T/N, sus ojos buscando los de Rei con una intensidad que hizo que su corazón se acelerara.

Rei asintió lentamente, sus pensamientos corriendo a mil por hora. Había tantas cosas que quería decir, tantas emociones que necesitaba entender, pero en ese momento, lo único que importaba era que estaban juntos en esto.

—Sí, lo creo también. —respondió ella, su voz firme pero llena de una vulnerabilidad que solo T/N podía ver.

Mientras la clase continuaba, los murmullos y las miradas curiosas seguían a T/N y Rei. Pero para ellos, el mundo exterior había desaparecido. Solo existían ellos dos y la promesa de una conversación que podría cambiar todo.

Más tarde, después de clases, T/N y Rei se encontraron nuevamente en la azotea, su lugar de refugio. El sol de la tarde se inclinaba bajo en el cielo, pintando el horizonte con colores cálidos y dorados. Se sentaron en silencio por un momento, cada uno sumido en sus propios pensamientos.

—No puedo creer que todo esto haya pasado —dijo T/N finalmente, rompiendo el silencio—. No recuerdo nada de anoche después de beber.

Rei asintió, su mirada fija en el horizonte.

—Yo tampoco. —admitió ella—. Pero... tal vez no necesitemos recordar cada detalle para entender lo que significa.

T/N la miró, su corazón latiendo con fuerza.

—Rei, lo que dijo Kaworu... sobre que había algo más en ese beso... ¿crees que es verdad?

Rei se volvió hacia él, sus ojos azules llenos de una sinceridad que lo desarmó.

—Sí, creo que sí. —dijo ella suavemente—. Siempre he sentido algo por ti, T/N. Algo que va más allá de la amistad.

Las palabras de Rei resonaron en el aire, llenándolo de una emoción que no podía negar. Había algo en su confesión, en la pureza y la valentía de sus palabras, que hacía que todo lo demás pareciera insignificante.

—Yo también, Rei. —respondió T/N, su voz llena de una honestidad cruda—. Siempre has sido alguien especial para mí. Y tal vez... tal vez era el momento de enfrentarlo.

Rei asintió, su corazón llenándose de una mezcla de esperanza y alivio.

—Entonces, ¿qué hacemos ahora? —preguntó ella, su voz temblando ligeramente.

T/N sonrió, tomando su mano en la suya.

—Creo que podemos empezar por aceptar lo que sentimos. —dijo suavemente—. Y ver a dónde nos lleva.

Rei asintió, su mirada llena de determinación.

—Sí, me gustaría eso. —respondió, su voz firme y llena de una nueva convicción.

Y así, en la quietud de la tarde, T/N y Rei se encontraron, no solo como amigos, sino como dos personas que finalmente habían aceptado sus verdaderos sentimientos. Aunque el camino por delante era incierto, sabían que mientras estuvieran juntos, podrían enfrentar cualquier cosa.

Porque en ese momento, bajo el cielo dorado de la azotea, habían encontrado algo que muchos pasan toda su vida buscando: una conexión profunda y verdadera, un amor que los guiaría a través de cualquier desafío que el futuro les pudiera deparar.

Eres un ángel?...[T/N x Rei Ayanami]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora