Capítulo 19: El Límite de la Intimidad

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El sol comenzaba a ponerse sobre el horizonte, tiñendo el cielo de tonos anaranjados y rosados que se filtraban a través de las ventanas de la habitación de Rei. La casa Ikari estaba inusualmente silenciosa, una calma que ambos jóvenes decidieron aprovechar. Con los padres de Rei fuera por la noche y Shinji en una pijamada con sus amigos, T/N y Rei se encontraban solos, disfrutando de una rara ocasión de tener la casa para ellos.

Estaban en la cama de Rei, tumbados uno al lado del otro. La habitación era un reflejo de la propia Rei: ordenada, con tonos suaves y decoraciones minimalistas que exudaban una calma serena. Los libros de texto estaban apilados en el escritorio, junto a algunas figuras de ángeles que Rei coleccionaba desde niña. Una suave luz de lámpara iluminaba el cuarto, creando un ambiente íntimo y acogedor.

T/N miraba a Rei con una mezcla de adoración y deseo. La había conocido durante años, y aunque siempre había sentido una conexión especial con ella, los últimos días habían intensificado esos sentimientos de formas que apenas podía comprender. Rei, por su parte, se sentía igualmente atraída hacia T/N. Sus momentos juntos, aunque a menudo tímidos y reservados, estaban cargados de una electricidad palpable.

Rei se acercó a T/N, sus ojos entrecerrados con una intensidad que él raramente había visto. Sin palabras, sus labios se encontraron en un beso profundo y apasionado. Los besos de Rei siempre habían sido suaves, casi etéreos, pero esta vez había un fuego en ellos que encendió algo dentro de T/N.

—Rei... —murmuró T/N entre besos, su voz apenas audible.

—Shh... —lo silenciaba Rei, apretando su cuerpo más cerca del suyo—. No hables. Solo... siente.

Y eso hicieron. Durante unos momentos, nada más importaba. El mundo exterior, con todas sus preocupaciones y expectativas, se desvaneció, dejando solo la sensación de sus labios encontrándose, de sus corazones latiendo al unísono.

Sus manos comenzaron a explorar, tímidamente al principio, pero cada vez con más confianza. T/N deslizó sus dedos a lo largo de la espalda de Rei, sintiendo cada curva y contorno, mientras ella respondía con suaves suspiros de placer. Los besos se volvieron más urgentes, sus cuerpos pidiendo más contacto, más cercanía.

Rei se movió encima de T/N, su peso ligero presionando contra él de una manera que lo hizo sentir una oleada de deseo. Sus labios se separaron brevemente, y sus ojos se encontraron, llenos de una mezcla de amor y necesidad.

—Te amo, T/N. —susurró Rei, su voz apenas un murmullo.

T/N sintió su corazón latir con fuerza. Sabía que también la amaba, más de lo que jamás podría expresar con palabras.

—Yo también te amo, Rei. —respondió, su voz quebrándose ligeramente.

La atmósfera se volvía más cargada con cada segundo que pasaba. Rei comenzó a besar el cuello de T/N, dejando un rastro de calor dondequiera que sus labios tocaran. T/N cerró los ojos, dejándose llevar por la sensación. Las manos de Rei comenzaron a explorar más abajo, acariciando su pecho y luego más allá, haciendo que su respiración se volviera más pesada.

T/N respondió de la misma manera, sus manos recorriendo el cuerpo de Rei, disfrutando de cada suspiro que sus caricias provocaban. Sabía que no querían cruzar ciertas líneas tan pronto, pero eso no disminuía la intensidad de sus deseos.

Rei, sintiendo la misma urgencia, se inclinó y susurró al oído de T/N.

—No quiero ir demasiado lejos... pero quiero sentirte. Quiero que me sientas. —sus palabras eran una mezcla de inseguridad y deseo.

T/N la miró, sus ojos reflejando la misma lucha interna. No quería presionar a Rei, pero tampoco podía ignorar la necesidad que sentía por ella. Finalmente, tomó una decisión.

—Está bien, Rei. —dijo suavemente—. Solo hagamos lo que nos haga sentir cómodos.

Rei asintió, agradecida por su comprensión. Se movió ligeramente, y T/N deslizó una mano bajo su ropa, sus dedos encontrando su camino con cuidado y ternura. Rei dejó escapar un suspiro tembloroso cuando sus dedos comenzaron a explorar, tocando lugares que nunca antes había tocado.

T/N se concentró en las reacciones de Rei, observando cada pequeño cambio en su respiración y expresión. Sus dedos se movían con lentitud y suavidad, queriendo darle todo el placer posible sin cruzar los límites que ambos habían establecido. Rei comenzó a moverse contra su mano, sus suspiros convirtiéndose en pequeños gemidos.

El deseo crecía entre ellos, cada momento más intenso que el anterior. Rei cerró los ojos, dejándose llevar por las sensaciones que T/N le estaba dando. La pasión y la ternura se mezclaban en cada toque, creando una experiencia que ambos sabían que nunca olvidarían.

T/N sintió cómo el cuerpo de Rei respondía a sus caricias, tensándose ligeramente antes de relajarse en una oleada de placer. Era un momento íntimo, casi sagrado, y T/N se sintió profundamente honrado de poder compartirlo con ella.

Rei alcanzó su clímax en silencio, su cuerpo temblando levemente contra el de T/N. Después de unos momentos, abrió los ojos y lo miró, sus labios formando una sonrisa suave pero llena de emoción.

—Gracias. —murmuró, su voz apenas audible.

T/N la besó en la frente, su corazón lleno de amor y ternura.

—Siempre, Rei. —respondió—. Siempre estaré aquí para ti.

Se quedaron así, en silencio, disfrutando de la paz y la cercanía del momento. No necesitaban palabras para expresar lo que sentían; sus corazones hablaban por ellos.

Finalmente, se acomodaron en la cama, con Rei acurrucada contra el pecho de T/N. La noche avanzaba, pero para ellos, el tiempo parecía haberse detenido. Estaban en su propio pequeño mundo, un lugar donde el amor y la intimidad eran todo lo que importaba.

Mientras los latidos de sus corazones se calmaban y el mundo exterior se desvanecía, supieron que, sin importar lo que el futuro les deparara, siempre tendrían estos momentos juntos. Y en ese momento, eso era todo lo que necesitaban.

Eres un ángel?...[T/N x Rei Ayanami]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora