XIV. 𝐂𝐨𝐧𝐟𝐮𝐬𝐢𝐨𝐧

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—¡MAMI! —exclamó la pequeña, corriendo hacia los brazos de la mujer rubia con una gran sonrisa.

—Hola cariño. —la tomó entre sus pálidos brazos y besó su cabeza, la cual traía el cabello recogido en dos coletas. —¿La pasaste bien?

La niña asintió de inmediato.

—Recogimos muchas fresas, ¿verdad papi? —volteó a ver al hombre, quien cargaba con una mano la cesta llena de aquellos frutos rojos que tanto amaban.

Él sonrió y dejó la canasta sobre el mantel de cuadros rojos y blancos, en la encimera.

—De acuerdo, tenemos para hacer mucha mermelada. —expresó con entusiasmo y dejó a la pequeña con cuidado en el piso. Luego, colocó una buena cantidad en un tazón para poder lavarlas.

El aroma dulce inundaba la cocina, haciendo aún más agradable el ambiente familiar.

—¡Sí! —celebró la menor alzando los brazos. Cruzó el umbral y corrió por toda la sala con los brazos abiertos.

Sus padres la observaron enternecidos y se miraron el uno al otro para después unirse a ella y, acto seguido, acabar los tres abrazados en el piso, riendo muy alegres.

[...]

||Capítulo Catorce — Confusión||
“omniscient”

—¿ME DAS OTRA? —pidió ella estirando la mano hacia el cuenco lleno de frutos rojos que sostenía Newt

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—¿ME DAS OTRA? —pidió ella estirando la mano hacia el cuenco lleno de frutos rojos que sostenía Newt.

Él negó y apartó el tazón, haciendo que ella lo mire suplicante.

—Sólo una más.

Iba a decirle que no. Que ya había comido suficientes y que éstas eran suyas. Pero, ¿cómo podría decirle que no?


El sol, especialmente deslumbrante hoy, resaltaba sus bellos ojos marrones.

Suspiró rendido y le tendió el cuenco. La castaña sonrió de inmediato y tomó una gran fresa. De un color rojo intenso que la hacía ver muy apetitosa y jugosa.

—Gracias. —sonrió, para luego besar su mejilla inconscientemente y comerse la frutilla de un bocado, saboreándola con mucho gusto. —Iré a ver a Chuck.

Se levantó y caminó rumbo al pequeño que se encontraba a varios metros de ellos, concentrado en dibujar algo en la tierra.

Pero Newt no respondió. Era la primera vez que Dakota hacia algo cómo eso.

Se llevó una mano a la mejilla y la sintió caliente...Igual que la otra, aunque esa no haya sido besada.

Estaba casi seguro que ahora mismo sus mejillas estaban del color de las fresas.

𝐀𝐋𝐋 𝐅𝐎𝐑 𝐘𝐎𝐔 ━━ NewtDonde viven las historias. Descúbrelo ahora