Destiny despierta a eso del mediodía. Mira a todo lados y solo ve la nota al lado de su almohada. La toma entre sus manos para leerla.
«"Ciao principessa, no quise irme sin decirte que esperaré con ansias el día de tu llegada a Italia. Hasta ese día sueña conmigo como yo lo haré contigo"» Tuyo Marco.
Se levantó de la cama buscando la ropa que había traído y subió hasta su habitación. Debía arreglar todo para viajar a Francia. Su vuelo saldría en la noche.
Empacó todo y se dispuso a descansar hasta la hora de partir. Habló con Vanessa un buen rato contándole todo lo que había pasado en Zaragoza. Lo mucho que disfrutó de la compañía de Marco.
Llegó la hora de partir. Tomó un taxi que la llevó al aeropuerto, ya en el avión durmió la hora y media que tomaba el vuelo. Buscó sus maletas y tomó un taxi para llegar a su hotel en París, Francia.
Eran las nueve de la noche. Se registra, está vez usa su nombre de soltera. Solicitó que cambiarán su habitación por una sencilla en fin ya no la usaría. Sin Marco allí no valía la pena tener una habitación tan amplia. La recepcionista le dió un folleto de actividades del hotel esa semana. Además las que habrán en los lugares más concurridos de París. Subió al elevador hasta el piso de su habitación, cuando entró ya sus maletas estaban allí. Da la propina al maletero y este sale para dejarla en su privacidad.
Ya sola en la habitación se acostó en la cama abrió la laptop para hablar con Vanesa pocos minutos. Se despidieron con la promesa de verse en unos días. Vane viajaría para compartir con ella. Ya había conseguido el trabajo y ganaba muy bien para darse algunos lujos.
Destiny cierra los ojos y piensa en Marco, en sus caricias, su toque.
Cierra sus ojos y siente a Marco hundiendo su lengua en ella. Haciéndola llegar a lugares inimaginados. Se acostó a dormir, se sentía cansada. En cuanto puso la cabeza en la almohada cayó rendida en los brazos de Morfeo.
Para Marco el día había sido una completa agonía. Todo le recordaba a ella. Cerraba sus ojos y la veía con su hermosa sonrisa. Estaba muriendo por tenerla entre sus brazos. Estuvo distraído todo el día. Carlo su mejor amigo le hacía todo tipo de bromas por su forma de actuar.
Deseaba arreglar el problema en el museo de Florencia para poder ir a Francia. No iba a aguantar estar una semana sin ella. Miraba su móvil varias veces para ver si ella enviaba algún mensaje pero nada.
Un sentimiento de amargura se estacionó en su corazón. Sus miedos e inseguridades comenzaron a hacer estragos en su mente. «“Seguro está acostándose con otro en Francia”» dice provocando desconfianza su vocecita malvada.
Marco no quiso hacer caso a su voz aunque muy en el fondo sus miedos estaban causando estragos. Eso solo le demostraría que no debería confiar en ninguna mujer y que todas son como su madre. Sale de la reunión en la que estaba y va con Carlo a beber algunos vasos de whisky.
Ya un poco anestesiado llega a su casa para acostarse a dormir. Al cerrar sus ojos y solo veía su sonrisa cálida. La luz de sus ojos y todo lo que le gustaba de ella. Se quedó dormido para soñar con la mujer que le robaba el sueño.
Al día siguiente Destiny se levantó temprano para ir al centro comercial más cercano, necesitaba comprar un nuevo móvil para poder comunicarse con Marco. Lo extrañaba como nunca había extrañado a nadie, lo necesitaba, necesitaba escuchar su voz. Esa que le eriza la piel cuando la escucha.
Llegó a la tiendas de compañías internacionales de comunicación y compró un móvil desbloqueado para poder cambiar de compañía cuando estuviera en los Estados Unidos. Se entretiene viendo los artefactos electrónicos en lo que le activan la unidad con un número nuevo y choca con un cuerpo.
— ¡Ay perdón! — dice Destiny, el hombre la mira y da una hermosa sonrisa. Era de más o menos su estatura, delgado sus ojos verdes y su cabello castaño tirando a rojo
— Salut. — Destiny comenzó a reír, no entendió nada de lo que el hombre dijo.
— No hablo francés.— dice al hombre que la había engañado con su aspecto de macho, varón, masculino.
— ¿Que niña, no te enseñaron a no reírte de los demás en su cara? — dice perfecto español en un tono jocoso.
— Hola, soy Destiny O'Reilly— le extiende la mano.
— Hola Destiny, soy Jean Paul Beuchane pero puedes decirme Jean.— este se avienta a darle dos besos en su mejillas. Destiny se queda en su sitió, no esperaba tanta efusividad.
— ¿De turista?— Destiny afirma.
— Si estoy esperando que activen una línea para ir a recorrer las calles de Francia.
— Pues no se diga más Destiny O'Reilly, te enseñe todo de Francia. Seré tu guía turístico o turística o como se diga, dice ofreciendo el brazo para que Destiny camine junto a él.
— Espera mi móvil — dice muerta de la risa, el hombre es todo un personaje.
— Ahh si que distraída soy. Bueno te espero en las fuentes. — Destiny asiente y lo ve salir. Era raro, pero se veía una excelente persona.
Le entregan el móvil y de camino a la fuente le envía un mensaje por WhatsApp a Marco.Para Marco
¡Hola! Soy Destiny, este es mi nuevo número. Que tengas un hermoso día. Besos.Vió que se marcaron las flechitas de visto y se quedó esperando la respuesta. Marco está escribiendo dice su pantalla del móvil y su corazón quería salir de lugar.
Para Destiny
Ciao, ya lo tengo. Hermoso día principessa. Besos. Te llamo en la noche.Destiny se emociona poniendo su móvil en su pecho. Al fin podría escuchar la voz del hombre que anhela. Llega a la fuente donde está un inquieto Jean Paul mirando a un chico guapísimo.
Destiny se acerca sin hacer ruido y lo toma por la espalda arrancándole el corazón del susto, Jean Paul que al principio la miró con los ojos como plato pero cuándo la vió río como una loca con Destiny.
— Niñaaa, eres una caja de pandora, me sorprendistes infraganti — dice cuando su risa fue calmandose. —mira ese bombón que está allá. Que brazos, que fuerza. Qué daría yo por encontrarmelo en un callejón sin salida, de seguro lo violo. — La risa de Destiny no se hizo esperar.
— No lo dudo. — dice como puede.
— Bueno, vamos a ver si nos calmamos. Que tenemos mucho que conocer. Ya quiero llevarte a conocer todo de París. En una de esas hasta te quedas por acá.— dice muy enérgico.
— Sí, vamos ya quiero conocer la ciudad. — Destiny no se podía sentir más contenta.
— Primero vamos al museo del Louvre. ¿Te gustan las artes?— Destiny asiente — pues vas a quedar prendada de ese lugar.
Jean Paul la toma de la mano con su efusividad, para halar de ella, salen del centro comercial y él llama al taxi para enseguida montar. Ella solo reía de su forma de actuar. Se movía como pez en el agua. Su gran personalidad le gustaba. Era un chico especial. Al menos compartían los mismos gustos. Sería su nueva amiga en Francia. Le gustaba su vitalidad, le inyectaba energía.
Bajaron frente a una estructura igual a un Palacio. Sus alrededores eran hermosos. Ella quedó deslumbrada con la belleza del exterior del lugar. Entraron y entonces su corazón saltó de emoción. Obras de artes tales como pinturas, bustos, entre otros decoraban el lugar.
— ¿Y qué te parece? — le pregunta Jean Paul al ver sus ojos brillar sabía que le había gustado.
— Est... estoy fascinada — ella no sabía para qué lado mirar todo era hermoso.
— Es el Museo del Louvre — ella le presta atención.— es el museo nacional de Francia consagrado al arte anterior al impresionismo, tanto bellas artes como arqueología y artes decorativas. Es uno de los más importantes del mundo.
Era evidente las obras eran las originales. Comenzó a ver todo con detenimiento mientras el hombre que la acompañaba contaba con lujo de detalle cada obra que vieron. Por su mente paso Marco, le hubiera gustado estar haciendo el recorrido con él. No es que Jean Paul no fuera entretenido, él contaba la historia un poco a su forma y eso la mantenía alerta. Pero Marco era especial, seguro la hubiera tomado de la mano o caminaran abrazados. Recordó cuando pidieron por ellos en la Basílica. Sus charlas entretenidas. El era todo lo que ella deseaba en ese momento. Una voz la saca de sus pensamientos.
— Destiny, — ella lo mira — niña llevo quince minutos perdiendo saliva por tu culpa. Cuenta, cuenta qué es eso que te tiene tan distraída — Destiny se pone roja — jum, creo que no es un qué, sino un quién. Bueno tendremos tiempo para que nos pongamos al día. — dice tomándola del brazo para mostrarle otra pintura.
Luego de cuatro horas hablando de historia y cultura, salieron del museo camino al Arco del Triunfo.
— Dest— dice Jean Paul y ella lo mira extrañada, son muy pocas las personas que la llaman así— ¿no te molesta que te llame así, verdad?
— No, claro que no.
— Bueno como te iba diciendo ahora que lleguemos al Arco del triunfo verás su estilo Neoclásico que le da ese toque a la ciudad. —Destiny asiente—. Es uno de los monumentos más famosos de la capital francesa y probablemente se trate del Arco del Triunfo más célebre del mundo. Construido entre 1806 y 1836 por orden de Napoleón Bonaparte para conmemorar la victoria en la batalla de Austerlitz.¿Conoces la historia de la batalla De Austerlitz?— Destiny niega, como mucho sabía que Colón había descubierto a América y eso estaba en duda. Ya había sido descubierta por los indígenas, entre otros.
Jean Paul le cuenta toda la historia a Destiny, caminaron, se tomaron fotos y disfrutaron de la tarde. Ella se despide del hombre que le hizo prometerle que saldrían a disfrutar la noche. Ella aceptó encantada, había pasado un excelente día con él. Quedan en encontrarse a las nueve de la noche frente a su hotel.
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Viajera
RomanceUna decepción lleva a Destiny por rumbos alejado de todos las personas que conoce. Se aventura a llegar a Europa, emprender un viaje para sanar las heridas del pasado. En el camino encuentra nuevas y mejores amistades, conocer nuevos lugares y encue...