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En aquella radiante tarde Nishimura planeaba salir de casa junto a aquel rubio que ya creía suyo, pero su felicidad se vio interrumpida al ver qué Keigo parecía estar listo para salir y no precisamente con él, aquello se causó un gran desagrado, se limitó a hacerse al otro con intensiones de indagar más en aquello que le causaba tanta duda.

— Te has puesto muy lindo — Nishimura le sonrió al rubio— ¿Puedo saber a dónde vas?

— ¿Recuerdas la llamada de anoche?, Bueno pensé bien las cosas y Touya tiene cierto derecho sobre el bebé así que simplemente le iré a dejar algunos resultados de los exámenes médicos que me he hecho para que esté al tanto — Takami arreglaba algunos papeles — Además de que quiere acompañarme personalmente a ver cómo está el bebé, parece más interesado.

— Mhmm… ¿Estás seguro de ir solo? — la voz del alfa sonaba sería, parecía molesto de las palabras de Takami — No me gustaría que se hiciera daño o algo así.

— Por eso mismo es que nos quedamos de ver en un lugar público, además que también es el padre del bebé y aunque él y yo estemos en una situación crítica también tiene el derecho de saber de nuestro hijo, se que no es un buen hombre pero soy consciente de que es un buen padre.

Aquellas palabras lastimaron a Nishimura, tenía la idea de que ese niño lo uniría más a Keigo si le daba su apellido, tenía miedo de perder al rubio, no quería verlo en los brazos de Touya nuevamente.

— Tienes razón — respondió Yoshiro intentando ocultar su verdadero sentir — Pero por lo menos déjame llevarte, así estaré más tranquilo.

— No quisiera molestarte, se que te preocupas por mi así que te avisaré por mensaje cuando llegue y cuando venga de regreso — el rubio se acercó al alfa y beso su mejilla—  Nos vemos más tarde.

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Cuando Keigo se acercó al pelinegro se sintió ligeramente intimidado por el semblante serio de este, parecía ser un hombre completamente diferente al que había conocido, se limitó a mirarlo esperando a que el otro hablara primero.

— ¿Te has quedado mudo? Dime algo Takami, mínimo un saludo. — reclamo el pelinegro — ¿Acaso Nishimura te ha prohibido hablarme?

— No se a que se deban tus palabras, no te debo ningún respeto y mucho menos te debo algún tipo de bienvenida, digamos que te sobrellevo por el tema del bebé, tengo que pedirte que cuides tus palabras cuando te dirijas a mi, Todoroki.

Al escuchar que Keigo lo llamaba por su apellido Touya sintió cierto sentimiento confuso, estaba molesto por aquella falta de respeto pero también sentía cierta tristeza al ver cierto rechazo por parte del rubio, estaba tan acostumbrado a sus dulces palabras que anhelaba escucharlas nuevamente.

— ¿Es así como tratas al padre de tu hijo?, que mi seriedad no te confunda, te tengo un merecido respeto por el lugar que alguna vez ocupaste en mi vida, te debo confesar que me siento ofendido por las decisiones que tomaste, pero esos son temas que se tratan en privado — Touya no hacía más que mirar aquellos ojos — Tengo pensado llevarte al médico y si me lo permites después podemos hablar sobre nuestro hijo, debemos hablar sobre quién de los dos tendra la custodia.

— Estoy de acuerdo, tengo varias cosas que debo decirte — respondió el rubio, desvió la mirada para evitar mirar a los ojos al otro — No demoremos más tiempo…

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Al finalizar aquel examen médico el cual Keigo considero completamente innecesario pues le habían revisado cuidadosamente a pesar de que él ya había dicho que se encontraba en perfectas condiciones, Touya se ofreció a llevarlo a casa, el recorrido en auto era incómodo por aquel silencio que Touya decidió romper.

— ¿Por qué vives con él? — pregunto el pelinegro — Debo decir que me ha dolido bastante, mi mejor amigo y tú… me han dicho que se han tomado mucha confianza.

— ¿A qué tipo de confianza te refieres?, Yoshiro y yo siempre nos llevamos bien, incluso desde antes de que tú y yo nos conociéramos, no te voy a mentir  él es un hombre encantador y me ha acompañado en mis peores momentos, además no podrías quejarte, tu y tu ex-esposo me veían la cara en mi propia casa.

— Me enferma pensar en que ese hombre pueda hacerte algo indebido, por eso mismo quiero decirte que estoy dispuesto a darte un lugar donde vivir, ¿Qué prefieres? ¿Una casa o un departamento?.

— Prefiero la distancia entre los dos, tu obligación es solamente con nuestro hijo, yo soy un tema muy aparte…

— Deja de ser tan necio, tu mismo escuchaste que tus hormonas se verán alteradas por el embarazo y yo me niego rotundamente a qué ese hombre te brinde ese tipo de ‘ayuda’, aparte de que sería asqueroso el solo pensar que Nishimura se aproveche de ti, lo mejor para el bebé sería estar cerca de su verdadero padre.

— ¿Que insinuas, Todoroki?...

— Que si alguna vez necesitas saciar algún tipo de deseo carnal que se te presente por el embarazo no busques ayuda en los brazos de ese hombre, quién debe complacer tus deseos soy yo — la voz autoritaria de Touya no logro intimidar a Keigo.

— Créeme que lo que menos deseo es pasar un momento íntimo contigo, yo no soy Shigaraki para meterme con mi ex-esposo, ya estamos divorciados como para hacer algo de ese tipo, te repito que lo único que nos une es nuestro hijo.

— Me dices eso porque ya te has metido con Nishimura… ¿Cierto?.

— No tengo por qué darte explicaciones…

Baby - DabiHawksDonde viven las historias. Descúbrelo ahora