Miraculous Ladybug x Lectora Akumatizada

Consumida

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Soltaste un leve gemido al despertar. Ah, estabas cansada... Te frotaste los ojos mientras balanceabas las piernas fuera de la cama, llevándote las sábanas contigo. Te desenredaste, girando para liberar las piernas, y terminaste frente al espejo. En cuanto te viste, tus ojos se abrieron considerablemente. Bueno, lo harían, si es que tuvieras ojos...

Tu cuerpo se había transformado en un contenedor de niebla oscura y negra. La niebla irradiaba lentamente de tu cuerpo, danzando como llamas y evaporándose en el aire. No tenías rasgos, aparte de tus dientes y tus iris blancos que ni siquiera tenían párpados adecuados para rodearlos; solo un contorno negro. El resto de ti era una silueta.

Te giraste para estudiar tu nueva forma. Seguiste mirando en estado de shock. Todo tu cuerpo estaba cubierto de niebla... Tocaste el espejo para ver que aún podías hacer contacto físico con las cosas. Dejaste escapar un suspiro de alivio. Aún podías tocar las cosas. Seguiste mirando, antes de dejar escapar un suspiro.

—... ¿Sabes qué? Estoy demasiado cansada para esto—. Te quejaste, girando sobre tus talones y caminando hacia el baño para prepararte para tu día. Mientras caminabas, intentaste desactivar tu forma de niebla, lo que sorprendentemente funcionó. Te preparaste bastante rápido.

*-*-*

Soltaste un suspiro y te miraste al espejo una vez más, activando tu forma de niebla. Notaste que tu ropa no era parte de tu contorno... ¿Eso significaba que no tenías ropa puesta? Tu ojo tembló ante el pensamiento. No, probablemente estabas bien... Se sentía como si estuvieras usando ropa, así que todo estaba bien. Desactivaste tu forma de niebla una vez más.

—Oye, Hawky. ¿Estás ahí? —preguntaste. No apareció ningún contorno en tus ojos. Sí; probablemente no podría escucharte sin el filtro de mariposa... Bueno, decidiste ir a buscar algo de comer. Nadie vivía contigo, así que tendrías que conseguir tu propia comida, y hoy no tenías ganas de cocinar. Decidiste visitar la panadería de Marinette, ya que necesitabas pan y tenías ganas de comer algo dulce. Te miraste en el espejo unas cuantas veces más, con cuidado de no dejar que tus ojos o colmillos se resbalaran. Esperabas que obtener esta nueva forma de niebla no afectara en nada el control de tu apariencia.

Caminaste hacia la panadería, usando de vez en cuando la cámara de tu teléfono como espejo para ver si tus dientes y ojos estaban bien. No querías cambiarte en medio de la calle. Por suerte, parecías tener el mismo control de tus rasgos. Con tu confianza conservada, entraste a la panadería, sonó el timbre. Marinette estaba trabajando en la caja registradora, sus padres en la parte de atrás, corriendo de un lado a otro y preparando algo frenéticamente. Probablemente tenían un pedido o algo así... Te acercaste a Marinette.

—¡Ah, hola, T/N! —La chica sonrió. Tú le devolviste el gesto.

—¡¿Es el pedido?! —gritó la mamá de Marinette desde lejos. Miraste por encima del mostrador y los viste correr frenéticamente.

—¡No, es sólo T/N! —respondió Marinette.

—¡¿Quién?! —gritó su madre una vez más. Ah, Marinette no habló de ti. Pero eso era de esperarse. Nunca hiciste nada interesante.

—¡Una chica de mi clase! —gritó Marinette. Te miró de reojo. La mirabas con aburrimiento, esperando a que terminara su conversación. Solo querías comida... Ella soltó una risa nerviosa.

—L-lo siento por eso...

—Está bien —respondiste. Echaste un vistazo a los alimentos que había en exposición en la tienda—. Hm... Una hogaza de pan y [comida], por favor.