Sombra Escarlata

Intercambios y Exploraciones

Luego de obtener un nuevo poder, Ghost decidió seguir explorando, Encontró varios tesoros y reliquias que podrían ser útiles en su viaje; cuando quería buscar una salida para volver a la superficie se encontró con Lemm, un personaje peculiar que se encontraba en su tienda repleta de extrañas y antiguas reliquias. Lemm levantó la vista al ver a Ghost entrar.

"¡Oh! Un viajero, y parece que has encontrado algunas reliquias interesantes," dijo Lemm, observando con interés los objetos que Ghost había recolectado. "Soy Lemm, un buscador de reliquias. Mi vida está dedicada a coleccionar y estudiar estos artefactos antiguos. Si tienes algunas reliquias que no necesites, estaré encantado de comprártelas."

Ghost, sin decir palabra, mostró las reliquias que había encontrado. Lemm las examinó con cuidado, su expresión cambiando a una mezcla de admiración y avaricia.

"¡Maravilloso! Estas son piezas excepcionales," exclamó Lemm. "Te pagaré un buen precio por ellas. No sólo estarás ganando unos cuantos geo, sino que también estarás contribuyendo al conocimiento histórico de Hallownest."

Lemm y Ghost intercambiaron las reliquias por geo. Ghost observó cómo Lemm manejaba cada pieza con cuidado, colocándolas en su colección con reverencia.

Después de aquella transacción, Ghost, necsitaba saber el cómo salir de la ciudad, intentó explicar con gestos y mimica su necesidad a Lemm. Al principio, Lemm no entendió y observó con curiosidad. Ghost entonces saco su pluma señalando arriba, a pesar de tenerla, no sabia escribir más que su nombre, no le serviría de nada intentarlo.

Lemm frunció el ceño, todavía confundido, pero luego pareció captar la idea. "Espera un momento" dijo Lemm, "¿Podrias prestarme tu pluma, viajero?" Ghost se la entrego para que posteriormente agarrara un pedazo de papel y dibujara algo en el. Dibujó el símbolo del Ciervocamino, un emblema que Ghost había visto antes pero al que no le había prestado atención.

"Este es el símbolo de la estación del Ciervocamino," explicó Lemm. "Si buscas una manera de salir de aquí, hay una estación unos pisos más arriba. Sigue el camino hacia el norte y luego toma la escalera grande. No es difícil de encontrar. Cuando lo hagas, tendrás que pagar una cuota de geo" Dijo Lemm devolviendo la pluma a Ghost.

Ghost asintió en agradecimiento y se dirigió hacia la dirección indicada por Lemm.

Al encontrar la estación, Ghost inserto los geo, como le había mencionado Lemm, salió una campana de ella y el Caballerito con curiosidad la tocó.

En ese momento, llegó el Ciervocamino, una criatura noble y antigua. "Saludos, pequeño viajero," dijo el Ciervocamino con una voz grave y cansada. "Yo soy uno de los últimos de mi especie. En tiempos de gloria del reino, fui el transporte que conectaba todas las estaciones de Hallownest. Lamentablemente, no quedan muchos de los nuestros."

Ghost lo miró en silencio, atento a sus palabras.

"Aunque estoy viejo y mis patas ya no son tan fuertes como antes, deseo seguir siendo útil," continuó el Ciervocamino. "Apenas hay viajeros en estos tiempos oscuros, y no quiero morir sin hacer nada. Ayudarte me daría un propósito, una razón para seguir adelante."

El Ciervocamino miró a Ghost y añadió, "De momento, sólo puedo llevarte a Bocasucia, pues es la única estación abierta. Pero a medida que desbloquees más estaciones, podrás viajar más lejos y más rápido. ¿Deseas ir a Bocasucia?" Preguntó aquel Ciervocamino, Ghost solo pudo asentir a su pregunta, a lo cual respondió "Entonces súbete a mi espalda y partamos de inmediato".

Ghost subió a la espalda del Ciervocamino, quien lo llevó rápidamente a su destino, Bocasucia. Al llegar, el Ciervocamino se detuvo y Ghost bajó con agilidad.