Capítulo 33: Extrañándola (Parte 1)

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POV Charles

Tres días sin Lucía eran una eternidad. Apenas y habíamos culminado las clasificaciones y fui a ver si mi novia me había enviado algún mensaje, aunque siendo honesto me había escrito deseándome suerte hacía tan solo una hora atrás. Revisé mi celular y tal como lo esperaba, no había notificaciones nuevas.

Sabía que Lucía debía estar muy ocupada y se veía muy feliz en sus estados. Estaba haciendo lo que más amaba. No había visto esa sonrisa totalmente sincera desde antes de su accidente. Antes que yo la apagaré. Sentí remordimiento al saber que había sido yo el causante de ello.

Estaba revisando su última publicación cuando me arrebataron en teléfono de la nada. Iba a maldecir a quien fuera, y al alzar mi vista noté que era Lando. Alcancé a darle un golpe en la cabeza antes de arrebatarle mi móvil nuevamente de sus manos. No estaba de buen humor para bromas.

—Auch— dijo sobándose la cabeza—, qué agresividad. ¿Tú también estás de mal humor?

Solo lo miré mal sin entender a qué se refería.

— Lucía lleva tres días fuera y tú y Max andan de un humor. Vengo huyendo de él. Y eso que ambos quedaron bien en la clasificación.

Que mencionara su nombre me incómodo. Ultimamente Max no era de mis personas favoritas. Su repentina cercanía a mí, Lucía, no me gustaba. Peor aún ahora que no estaba con Kelly y lo de la modelo se desmintió. Algo en mi interior me alertaba sobre él, sobre todo después de lo que acababa de descubrir. Aunque me negara a creerlo, solo había una razón válida para ello y no me gustaba.

— Quizás si tuvieras novia lo entenderías—dije serio, pero reí al ver la mueca de asco que puso.

— Yo no tengo novia, tengo novias —dijo riendo—. Es más fácil y así no sufres.

— Es que nunca te has enamorado realmente- dije bebiendo agua—. Además, mi novia es la más linda de todas.

— El más enamorado— fingió arcadas—. ¿Qué tal si para que se distraigan tú y el chico Red Bull vamos por una partida de pádel mañana después de la carrera? Puedo llevar a... Olvídalo, invitaré a Óscar— dijo, cambiando el tono de su voz por uno melancólico.

Sabía que Lando hubiese querido invitar a Carlos, pero algo me decía que Max ya le habría contado sobre lo sucedido con Lucía, ya que, había notado que no se le había acercado como comúnmente lo hacía. El español había aparecido con severos moretones en el paddock, los cuales justificó como un intento de robo. A todos le pareció irreal su explicación, pero nadie dijo nada. Recordarlo me hacía hervir la sangre y, más, al ver que Lucía tenía razón, Max por poco lo habría matado y debía ser yo quien hiciera eso. De todas maneras, me encargué de darle un claro recordatorio de que, si volvía a tocar o siquiera mirar a mi novia, era hombre muerto.

Dejé mis pensamientos de lado y pensé en la propuesta del inglés. La verdad, no tenía ganas de hacer nada si no tenía a Lucía cerca. Pero esto podía facilitarme las cosas para reunirme con Max. Aunque no quisiera, tenía que conversar con él lo antes posible sobre aquello y era mejor si Lu no estaba presente.

— Está bien. Mañana por la noche, después de que te gane será —dije riendo al ver su expresión.

—Sueña, Leclerc— dijo alejándose hacia su garaje.



POV Lucía

Jamás me había sentido tan parte de un lugar. Amaba el tenis y estar en uno de los torneos más importantes lo hacía especial. Todo a mi alrededor era lujoso y lleno de glamour propio de uno de los más prestigiosos, Grand Slam. Los miembros de la ATP se habían asegurado de hacerme sentir cómoda durante toda mi estadía. Cosa que realmente agradecí. Los días anteriores había estado fotografiando e ilustrando escenas de los octavos de final y cuartos y ahora, ya en semifinales, tenía que retratar a aquellos tenistas que habían alcanzado esa hazaña. Entre ellos estaba mi fiel amigo Luca, a quien le había ido de estupendo, y uno de mis nuevos tenistas favoritos: Lorenzo Musseti. Quedé maravillada al verlo jugar.

Rewrite Our Story (CHARLES LECLERC /MAX VERSTAPPEN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora