Epilogo

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MAYA ALLEN DAVISON.

SEPTIEMBRE 2025

Acomodo la última imagen sobre la mesa de centro y sonrió al ver que queda a la perfección junto a las flores que hay a su lado.

—¿Has pensado en ser diseñadora? —menciona con diversión y yo suelto una pequeña carcajada.

—Creo que seré arquitecta, me ira mejor que a ti—bromeo.

—Tu dedícate a los embarazos y yo sigo con la arquitectura—Drew deja un pequeño beso en mis labios y sonríe—. Mi madre nos matara, ya estamos tarde.

—Eso no fue mi culpa—rio—. Alguien necesitaba usar una falda rosa y no le gustaba ninguna de las que yo encontraba.

—¡Niños! ¡vámonos!

Escuchamos pequeños pasos acompañado de risas que nos enamoran y ambos nos volteamos hacia la puerta del jardín en donde vemos a nuestros dos pequeños caminar hacia nosotros, Owen corre con rapidez hacia mi y lo cargo, mientras que Lexie camina a paso tranquilo hacia su padre y le toma su mano, yo voy por mi bolsa y la mochila en la que llevaba las cosas de nuestros hijos, salimos de casa y es Drew quien se encarga de ponerlos en sus sillas correspondientes. Una vez estamos todos listos Drew comienza a manejar y yo pongo alguna canción de películas animadas que mis hijos adoraban.

Lexie era la copia exacta de su padre en cuanto a su personalidad, si algo no le gustaba ella te lo haría saber y para sus cuatro años adoraba darle ordenes a las personas, incluso en como debían cortar su fruta, en cambio Owen era mas como yo, divertido y alocado, tenia ocurrencias todo el tiempo y siempre estaba haciendo payasadas que nos hacían reír, pero, ambos eran dos preciosos de ojos celestes idénticos a los de su padre con el cabello castaño igual que yo.

En definitiva, Drew y yo hicimos un buen trabajado creándolos.

Cuando llegamos a la casa de mi suegra escuchamos voces de niños y rápidamente mis hijos quieren bajar del coche asi que Drew se apresura en bajarlos del coche y dejar que vayan a jugar con Adeline, Jareth y Jade, siempre que nos reuníamos ellos eran los primeros en reunirse.

—¡Hasta que llegan! —Karina se acerca a nosotros y nos observa—. Son los últimos en llegar.

—Somo personas ocupadas—bromea Drew—. Vamos, tienes una familia grande, nuestra ausencia no se sentía realmente.

Entre risas vamos hacia el jardín trasero en donde Richard y Christian están cocinando, toda la Familia de Drew esta reunida como cada ultimo domingo del mes, era una tradición nueva que habia iniciado Karina y la verdad era preciosa.

Aun no se lo decíamos, pero pronto tendría un nuevo nieto que jugaría por su jardín y la llamaría abuela, Drew quería esperar para contárselo a la familia, según él, necesitaba disfrutar este embarazo. No es que no hubiera disfrutado el primero, pero este fue perfectamente planeado.

Y además nos iba a asesinar cuando se enterara que nuevamente retrasaríamos la boda.

Observo a mi alrededor con una sonrisa en el rostro, el amor en la familia de Drew era algo que siempre estaba presente y siempre se sentía, Annais junto a su novio aparecen y nos saludan, su novio es el nuevo integrante de la familia por ende es el blanco de todas las burlas que provienen principalmente de Christian y Henry. Alejandra y Ryan están sentados junto a la piscina charlando y luciendo perfectos como siempre, mientras que las hermanas de Drew están charlando entre ellas, Karol como siempre viéndose perfecta e imponente, creo que nunca perderé el temor a hablar con ella. Neal y Sara observan a sus hijos con amor en los ojos mientras se abrazan.

Todo estaba perfecto, solo necesitábamos que llegara Rosalie para contarnos sus grandes noticias, pero del resto todo estaba bien, todos estábamos felices y esto iba a ser para siempre, éramos una gran familia todos juntos.

Pero, aunque no fuera una competencia, Mi familia con Drew era la más perfecta de todas.

—¿Ya aprendiste a usar la maquina de café? —bromeo observando los ojos celestes del amor de mi vida.

—Domine la maquina de café—responde divertido antes de besarme con mucho amor.

Adicto a MayaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora