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Luego del cumpleaños ninguno podía negar el hecho de que algo estaba cambiando entre los dos, No habían vuelto a compartir otro beso pero los sentimientos de ambos estaban a flor de piel. Manuel parecía más dispuesto que nunca a remediar el pasado oscuro de ambos aunque la chica constantemente le negara cualquier posibilidad de volver a estar juntos. Emma no podía evitar seguir con muchos pensamientos sobre él, aunque muchos pensaran que ya debería "dejarlo ir" pero el vacío que sentía ella no se podía llenar con ninguna acción.
Tal vez que hablaran sin discutir podría solucionar muchas inquietudes que tenía pero simplemente no se sentía preparada para digerir lo que pudiera decirle él, imaginaba escenarios en los cuales Manuel le confesaba que en cierto punto si sintió algo por Becky. Emma pensaba que ellos habían estado muchos meses "junto" y le parecía casi imposible creer que en ningún momento sintieron algo. Emma quería creer que ella era la única en su corazón. Él todavía seguía instalado en el cuarto de invitados ya que la chica todavía no estaba dispuesta a dar otro paso entre los dos porque las chances de no volver a perdonarlo eran muy altas, la confianza que había perdido en él era muy difícil de volverla a encontrar.
Muchas personas no iban a ser capaces de entender lo que pasaba por su mente ni mucho menos su corazón.. la mayoría estaría juzgándola diciéndole que podía estar asegurándose su vida para siempre con casas caras y ropa de marca, que todo el mundo comete errores y perdonarlo no era el fin del mundo, muchas "botineras" eran cornudas conscientes y no hacían tanto drama. Emma desearía pensar como ellos y superar la etapa oscura en la que se encontraba pero aunque muchos no le creyeran, ella lo amaba de verdad. Nunca se había fijado en tener lujos o cualquier cosa materialista, lo quería a él. La idea de "compartir" el amor que le tenía la volvía loca, para ella era monogamia o bala. Tan solo pensar en ser una cornuda consciente le daban ganas de tirarle algo por la cabeza a Manuel, para Emma en una relación era todo o nada.
Lo más frustrante era que ambos se extrañaban y no podían negarlo.
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La chica se encontraba limándose las uñas en el living mientras veía sex and the city. Aunque estuviera sola no paraba de discutir consigo misma gracias a que carrie había vuelto con Mr.Big, soltaba insultos hacia la rizada como si esta fuera capaz de escucharla, Ni el sonido de la puerta principal abriéndose pudo distraerla de sus puteadas hacia aquel personaje.
Un Manuel todo sudado entraba con su bolso del gimnasio, su cara era pura confusión ya que se podía escuchar a Emma desde afuera puteando. Rezaba que esos insultos no fueran para él, últimamente estaban "bien". Con un poco de miedo entró con pasos lentos donde pudo ver a la chica viendo el televisor fijamente con sus cejas fruncidas.
