Alicia renacida en el mundo de las bestias

Capítulo 52: Tribu de las sirenas

La tribu de las sirenas estaba en crisis. Habían pasado 17 años desde la desaparición de Qin, su única hembra, y la tribu se encontraba al borde de la extinción. Durante 12 años, el rey mantuvo en secreto la desaparición de la reina. Cuando Bluepool, un orco de cabello azulado y ojos azules, se enteró de la situación, quiso ir a buscarla, pero el rey se lo prohibió. Bluepool intentó entonces proponer la unión interracial, dado que las sirenas eran conocidas por ser la única tribu que no se mezclaba con otras razas, pero esta propuesta también fue rechazada por el rey.

Bluepool se sentía impotente y frustrado al ver a su tribu encaminándose hacia la decadencia con cada día que pasaba. Se dio cuenta de que la tribu necesitaba un nuevo líder, ya que el actual los llevaría a desaparecer del mundo bestia.

En los años siguientes, Bluepool se enfocó en volverse más fuerte para poder desafiar al rey. Después de cinco años de arduo entrenamiento, alcanzó la fuerza suficiente para retar al rey en un duelo. Finalmente, salió victorioso, y ese fue el último día de vida del antiguo rey.

Una vez en el poder, Bluepool decretó una nueva ley que permitía el matrimonio interracial hasta que alguna de las uniones produjera una hembra. Algunos miembros de la tribu viajaron a distintas tribus en busca de una pareja, mientras que otros consideraron la idea una blasfemia y decidieron quedarse en el mar, defendiendo su territorio y negándose a mezclarse con hembras terrestres, que según ellos, nunca tendrían la belleza característica de su especie.

El nuevo rey, Bluepool, también deseaba encontrar una hembra. Así que partió hacia la ciudad bestia acompañado de otros dos orcos, con la esperanza de encontrar alguna hembra atractiva y de buen carácter para unirse.

Al llegar a la ciudad, los nuevos machos causaron sensación entre las hembras, ya que las sirenas eran conocidas por ser las más bellas entre todas las especies. Varias hembras intentaron cortejarlos, pero ninguna les pareció atractiva o interesante.

Después de unos días, los tres tritones, desesperados por sumergirse en agua, preguntaron por la ubicación de un río o lago donde pudieran nadar. Un orco les dio indicaciones para llegar a un lago cercano.

Cuando llegaron al lugar indicado, encontraron un lago impresionante, rodeado de una densa vegetación de altos árboles y plantas exuberantes. El agua del lago era cristalina, reflejando el cielo azul y las hojas verdes que la circundaban. La superficie del agua brillaba con destellos plateados bajo la luz del sol, creando un espectáculo hipnótico de luz y sombra.

Corrieron hacia el lago y se zambulleron, sintiendo de inmediato la frescura envolvente que tanto habían extrañado. Bajo el agua, el mundo se volvía sereno; las suaves corrientes acariciaban sus cuerpos y los peces nadaban a su alrededor, indiferentes a su presencia. Extasiados, nadaron y se sumergieron durante casi una hora, explorando cada rincón del lago y disfrutando de la libertad que el agua les ofrecía.

De repente, escucharon las agradables risas de unas hembras. Los tres asomaron sus cabezas con cuidado para no alertarlas. A unos metros, vieron a tres hembras muy atractivas sentadas a la orilla del lago, conversando y riéndose de lo que una de ellas, con pelo azulado, estaba contando. La luz del sol iluminaba sus rostros y sus risas resonaban dulcemente en el aire.

En ese momento, los tres tritones quedaron petrificados; esa hembra cumplía con todas las características de su reina perdida. Decidieron acercarse a ellas para confirmar su suposición.

En cuanto hicieron notar su presencia, varios machos se interpusieron, infiriendo que eran las parejas de las hembras. Bluepool decidió presentarse: "No somos un peligro, solo queremos confirmar una información con la hembra de pelo azulado. Soy Bluepool, el rey de la tribu de las sirenas, y ellos son mis hermanos".

Ante esta revelación, Qin se puso extremadamente nerviosa al darse cuenta de que había sido encontrada, pero al mismo tiempo estaba extrañada de que su antigua pareja no estuviera con ellos ni fuera el rey. "Tranquilícense chicos, yo les responderé", dijo Qin para calmar a sus compañeros y a los de sus amigas. "Soy Qin, pero deben saber que no tengo interés en volver".

Los sirenos quedaron impactados al confirmar la identidad de su antigua matriarca. El tritón de cabello rosa y ojos azules habló: "Hola, Qin, soy Noah, pero todavía no entiendo por qué nos abandonaste y nos dejaste al borde de la extinción".

Esto provocó que la culpa que Qin había arrastrado por años aumentara, sin embargo, se mostró imperturbable y respondió con calma: "Porque deseaba libertad. Por más que pedía salir de la cueva marina, nunca me escuchaban, sentía que estaba en una prisión. Esa es mi respuesta. Quizás no te parezca suficiente, pero para mí sí lo fue. Lo lamento por ustedes, pero no me arrepiento".

Noah no se esperaba esta respuesta y decidió permanecer en silencio. Por otro lado, el otro tritón de pelo color celeste pastel y ojos morados se presentó como Liam. Después de las presentaciones, Bluepool les explicó la situación actual de su tribu, desde la muerte del antiguo rey hasta la implementación de la unión interracial hasta que alguna de las parejas diera a luz a una hembra.

"¿Piensan quitarle la hija a su madre una vez que dé a luz y llevarla a su tribu?", preguntó Bai, horrorizada después de escuchar Bluepool.

"No, no funciona así. Las hembras de nuestra tribu, durante los primeros años, necesitan cuidados especiales a diferencia de otras especies. Entre otras cosas, necesitan estar en constante contacto con el mar; de lo contrario, enferman. De alguna forma, el mar les entrega energía y vitalidad antes de alcanzar la mayoría de edad. Además, la alimentación marina es sumamente importante para su salud", explicó Bluepool.

"¿Y ha habido alguna hembra que les llame la atención para cortejar?", preguntó Qin, curiosa.

Noah se puso nervioso ante la pregunta, pero decidió ser valiente y declarar sus sentimientos por Qin: "Yo, Qin, ¿me permitirías cortejarte?".

Qin no se esperaba esta pregunta, menos de él que la confrontó por abandonarlos, aun así decidió darle una oportunidad. Sentía que era lo mínimo que podía hacer para compensar lo que le había hecho pasar a la tribu. "Está bien, pero eso no significa que volveré con la tribu", aclaró Qin.

"Lo sé, no te preocupes, no insistiré con eso. Muchas gracias, Qin", respondió Noah. Los compañeros de Qin no estaban muy contentos, pero aceptaron su decisión.

Por otro lado, Liam se interesó por la tímida hembra que no había pronunciado una sola palabra. Tenía el pelo largo y ondulado, de color fuego vivo, y una mirada curiosa pero cautelosa. Al parecer, analizaba todo antes de decir algo con extraños, pues cuando no habían dado a conocer su presencia, ella reía sin timidez alguna con sus amigas. Debido a la naturaleza reservada de la hembra, decidió no transmitir todavía su interés en ella. Intuyó que tendría que ser más sutil en su cortejo.

Por otra parte, Bluepool no pudo evitar sentirse atraído por una hembra de cabello castaño y piel blanca sin imperfecciones. Había algo en la viveza de su mirada que lo cautivó. Sin embargo, sintió que no había dejado la mejor impresión con ella al principio. Decidió que primero intentaría conocerla mejor y ganarse su confianza antes de intentar conquistarla.

Hola mis bellas lectoras!

Tengo que aclarar que Bai no va a desaparecer y volver a su mundo como en la novela original, nunca me gustó esta parte de la historia, siento que fue muy injusto para los compañeros de Bai que no podían demostrar su cariño con libertad en el mundo humano, y Winston sufrió tanto al no poder seguirla de inmediato.

Además, creo que es importante que sepan que estamos a 4 capítulos de terminar esta novela!

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