Black Love

Capitulo 28

⚠️ALERTA SPOILER⚠️

Este capitulo puede contener spoilers del manga, asi que si no te quieres llevar una sorpresa, te aconsejo no leerlo.

Estas advertido😊. Ponganle pausa a la música que yo les avisaré cuando comenzar a escucharla.

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Sebastian: ¿Hola? -Respondió al teléfono, pero su expresión se transformó en horror a medida que escuchaba la voz del otro lado- Sí, soy yo. ¿Quién habla? ¡¿Qué, Alois!? ¿En qué hospital?

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Capitulo 28: Hecho cenizas.

Tras recibir aquella llamada alarmante, Sebastian se apresuró a dirigirse hacia el hospital indicado sin importarle el peligro en el camino. Con la urgencia de llegar lo antes posible, aceleró cada vez que pudo.

Después de 15 minutos, finalmente llegó al hospital. Se encontró con un gran edificio con una cruz roja y la palabra "HOSPITAL" destacando en la fachada. Sin dudarlo, Sebastian entró y se acercó rápidamente a una enfermera en el mostrador.

Sebastian: Disculpe, señorita, ¿dónde está la habitación 203? -Preguntó con sumo apuro.

- Debe tomar el ascensor hasta el segundo piso y girar a la derecha.

Y con esa pequeña indicación, Sebastian se sintió capaz de llegar a la habitación. Se dirigió hacia el ascensor y presionó los botones con impaciencia, pero al abrirse las puertas, se encontró con alguien inesperado y poco amigable.

Sebastian: Claude...

En ese momento, quien estaba en el ascensor era su amigo y colega de trabajo, quien parecía sumido en sus propios pensamientos hasta que escuchó su nombre y levantó la mirada para encontrarse con Sebastian, quien parecía sorprendido de verlo allí.

Claude: Entra. -Dijo con frialdad, su rostro mostraba seriedad y determinación.

Sebastian: Claude, por favor, ahora no, necesito...

Claude: No voy a repetirlo, Sebastian. -Lo interrumpió, acentuando el tono autoritario en su voz, al mismo tiempo que dejaba entrever el arma de fuego en su cintura- Entra.

Sebastian no tuvo más remedio que obedecer. Conocía a Claude lo suficiente como para saber que no se detendría ante una amenaza, y si decía que iba a hacer algo, lo cumpliría sin remordimientos.

Una vez dentro del ascensor, Claude presionó el botón que conducía a la terraza del gran edificio. El ascensor comenzó a subir lentamente los 30 pisos hasta llegar a su destino, mientras ambos hombres se observaban en silencio, sin intercambiar palabras. La expresión seria de Claude preocupaba a Sebastian, quien sabía que su amigo solo se quedaba en silencio cuando estaba a punto de hablar de algo muy serio y grave.

Finalmente, el ascensor se detuvo y las puertas se abrieron en lo alto del edificio. El viento soplaba fuerte y cálido, pero no podían detenerse a disfrutar del paisaje. Era hora de hablar.

Sebastian dio unos pasos hacia adelante, dejando a Claude atrás, y luego se giró para observarlo desde la distancia. En ese momento, se dio cuenta de que Claude lo apuntaba con el arma. Sebastian estaba seguro de que su amigo sabía toda la verdad. No se sorprendió por su reacción.

Claude: ¿Cómo llegaste hasta aquí? -Preguntó con intriga en su voz.

Sebastian: Alois me contactó. Me contó lo que estaba pasando. Algo que tú no te atreviste a hacer. -Respondió sin reproche, manteniendo la calma.