Black Love

Capitulo 15

Capitulo 15: El cómplice de ojos ámbar.

El joven no tuvo más opción que reaccionar de la siguiente manera:

Ciel: ¡¿EH!?

Sebastian: No entiendo por qué te sorprende tanto. Pensé que habíamos dejado claro esto.

Ciel: E-es decir, claro que sí, ¡pero no creo que deberíamos hacerlo! ¡Esas son cosas de enamorados!

Sebastian: ¿?

Ciel: ¿Usted realmente no lo entiende?

Sebastian: Sí lo entiendo. -Respondió- Entiendo todo perfectamente, pero como te dije antes, me gustaría descubrir el verdadero significado de este sentimiento, y después ponerle fin. O al menos, hacer algo al respecto.

El chico de ojos azules parecía no muy convencido por lo que escuchaba, pero debía admitir que aquel hombre tenía razón en algo: quizás lo mejor para ambos sería descubrir lo que realmente sucedía en su interior, ya que Sebastian no era el único que sentía algo crecer dentro de él.

Armándose de valor, Ciel tomó aire y lo soltó, para luego, con tranquilidad, acercarse y acomodarse junto a aquel hombre. Aunque tenso, trató de acercarse lo más prudentemente posible, pero no fue suficiente.

Sebastian: Oye, no pienso devorarte, así que no tengas miedo. -Dijo, acercando confiadamente su cuerpo al del joven, quien se puso completamente rojo de la vergüenza- Así está mejor.

Finalmente, se dedicaron a ver la película que tanto habían acordado ver: "Amor a media noche". ❤🕛

(Buena película. La recomiendo👌)

La película, aunque un tanto incómoda al principio, al final los hizo experimentar emociones diversas y fuertes.

Ciel: *Sniff... sniff...

Sebastian: ¿Estás bien?

Ciel: Sí, es solo que... *Sniff...

Sebastian: Toma. -Le ofreció un pañuelo que siempre llevaba en su bolsillo, incluso cuando no estaba usando traje.

Ciel: Gracias. -Resopló, intentando calmarse- Lo siento, normalmente no soy tan sentimental.

Sebastian: No te preocupes, está bien. -Dijo, girando su rostro y dejando escapar disimuladamente una lágrima.

Una vez que el joven se recuperó por completo, intentó mantener una pequeña conversación con el mayor, ya que levantarse y marcharse después de eso sería un poco grosero.

Ciel: Fue una buena película, ¿cómo la encontró?

Sebastian: Fue una recomendación de Netflix. Solo una coincidencia.

Ciel: Entiendo.

El silencio volvió. Realmente no tenían mucho de qué hablar, ya que eran solo unos extraños que se habían conocido de la manera más extraña posible, incluso terrorífica. Todo parecía ser obra del cruel destino.

Sebastian: Por cierto...

Ciel: Yo...

Ambos se callaron incómodamente al interrumpirse mutuamente.

Ciel: Por favor, continúa...

Sebastian: No, está bien. Puedes hablar tú.

Ante todo esto, Ciel suspiró levemente antes de hablar.