Capíтυlo 27. 00: <Hablando con papá JoonKi>.

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Cιnco мeѕeѕ de eмвarazo

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Cιnco мeѕeѕ de eмвarazo.

—Sé lo que se siente separarse del Alfa que amas porque él no da la talla como Alfa.

—¿Alguna vez tomaste distancia con papá MinSun?

—Cuando YoonGi tenía un año. La separación duró dos años.

—¿Y cómo lograste conllevar la separación? Porque yo no sé cómo haré.

—Yo me enfoqué en cuidar de mi cría. Chiquitín, cuando te conviertes en padre, ser Omega pasa a segundo plano.

—Lo sé.

—No puedes sólo cargar con las fallas de tu Alfa cuando tu cría te necesita las veinticuatro horas.

—Lo sé...

JiMin le sonríe tímidamente a papá JoonKi en forma de agradecimiento, pues éste ha dejado frente a él una deliciosa sopa de pollo con verduras. Huele y se ve tan exquisito que su cachorrita se remueve inquieta dentro su casita.

Papá JoonKi toma asiento frente a él con una taza de té entre las manos. Mandarina, la gata naranja y rechoncha que originalmente es de YoonGi, está acostada en la silla al lado de JiMin. Él la acaricia de vez en cuando para que esté tranquila ante la ausencia de su papá humano.

—Me sorprende que YoonGi la haya dejado —comenta JoonKi mientras acaricia las orejas de la gata naranja—. No le gusta separarse de ella.

—Él... dijo que me la dejaría para que me dé apoyo moral y me cuide mientras él no esté—dice JiMin sonriente, mirando con ternura a la adoración de su Alfa—. Me dijo que es una forma de tener algo de él hasta que tenga todo de él.

—¿Tú estás seguro de que puedes con esto solo? —quiere saber JoonKi, expresando preocupación por el bienestar de su yerno panzón.

—No... Necesito a mi Alfa aquí y ahora. Él siempre ha sabido cómo minimizar las cosas con apapachos —se confiesa con tanta sinceridad que no logra evitar derramar unas cuantas lágrimas—. Pero necesito más enfocarme en llevar mi embarazo sin problemas.

—A veces maldigo que YoonGi sea tan parecido a MinSun. Los dos son un par de idiotas —chista JoonKi, insultando a ese par para sus adentros—. Las cosas serían diferentes si YoonGi hubiera heredado mi actitud.

—Tantos traumas que nos habríamos ahorrado —ríe gracias a papá JoonKi.

—Pero dicen que árbol torcido jamás se endereza. YoonGi ya no tiene remedio —JoonKi niega, suspirando estresado—. Ahora MinSun lo está ayudando a instalarse en un departamento.

—¿Crees que él estará bien sin supervisión? —necesita saber para tranquilizar a su inestable corazón, que late por y para su Alfita de lijeros traumas—. El universo siempre está conspirando contra él.

—No te preocupes tanto por ese pendejete, que lo jodan.

—Pero es que es mi Alfita.

—Tu Alfita merece ser castigado por el universo, para que aprenda a ser un Alfa maduro y responsable.

—Pero todo siempre termina en traumas para él.

—No es nada que un par de meses en un psiquiátrico no arregle.

JiMin abulta los labios. No consigue ocultar la inmensa angustia que se presenta en su interior, por el miedo constante de que su Alfita no logre sobrevivir un día entero en el exterior. Ahora él no estará ahí para cuidarlo y reprenderlo.

En palabras más resumidas; el animal anda sin correa y sin supervisión. ¡Caramba! Que se prepare Seúl, porque el tornado todo terreno anda desatado, listo para destruir todo a su paso.

JiMin suspira achicopalado. Es que su Alfita es sólo un Alfita incomprendido bañado en un cerro de sal. JiMin teme que a su Alfita le suceda algo malo y que él no esté ahí para cuidarlo.

—¿Y si vuelve a pisar la cárcel?

—MinSun está estudiando leyes en línea. Estaría encantado de que echaran preso a su cría para ver si lo puede sacar.

—¿Y si su jefe intenta despedirlo otra vez?

—El jefe es mi hermano menor. Un zape en la cabeza y YoonGi será recontratado.

—¿Y si...?

—Chiquitín, toma tu sopa y sácate a YoonGi de la boca. Le debe estar picando el oído.

JiMin suspira por segunda vez consecutiva. Acata el pedido de papá JoonKi y procede a tomarse la deliciosa sopa de pollo con verduras que papá JoonKi hizo especialmente para él y su bebé.

JoonKi lo observa comer por un tiempo, aunque lo cierto es que simplemente está tratando de reunir las palabras correctas para decirle lo que piensa acerca de la situación actual con su hijo mayor.

¿Cómo decirle a su adorable yerno que YoonGi es un imbécil sin que se ponga a llorar? JoonKi supone que debe decírselo con mucho tacto y discreción, de manera en que JiMin lo acepte tranquilamente. Sí.

—YoonGi es un imbécil.

—Lo sé.

Pero el tacto no es un don que JoonKi posee. Sin embargo, la honestidad desnuda, sí. Por ende, JiMin suelta la cuchara para cubrirse el rostro con las manos y romper a llorar sin consuelo alguno, pues su Omega interno le hace creer que ha sido abandonado por su Alfa.

Por consecuente, JoonKi forma una línea recta con los labios mientras tamborea los dedos contra la mesa. ¿Sí fue muy directo? Entonces, al final, YoonGi sí heredó algo suyo. ¡Ups!

—Quiero decir, tal vez esto es lo que YoonGi necesitaba para que abra los ojos y empiece a darse cuenta de que debe mejorar o va a perderte a ti y a su hija —remienda su error diciendo—. Nunca tengo fe en él, pero sé que te ama y que por ti es capaz de hacer muchas cosas. Supongo que hay que darle un tiempito.

—¿Y cuánto tiempo llevará ese tiempito? —JiMin anhela saber, después de mostrar la cara empapada en agua salada y sollozar en el proceso.

—Oh, tú déjamelo a mí —sonríe muy maquiavélicamente—. Voy a tratar con él muy sutilmente.
























Un Alғa lιgeraмenтe тraυмado. ♡&lt;&lt;𝒀𝒐𝒐𝒏𝑴𝒊𝒏&gt;&gt;♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora