seis: gris, como el día que todo empezó

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"Nunca te darás cuenta de cuán fuerte eres, hasta que ser fuerte sea la única opción que tengas" (Anónimo)

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—Por favor toma notas por mí. Juro que te pagaré por ello con comida—me rogó Wonnie. Me reí, caminando a paso rápido por el pasillo de la universidad.

—Está bien, está bien. Tomaré nota para ti, pero ya sabes que estas vacaciones de verano tendrás que hacerme café en las mañanas por cinco días.

—Serán siete—me prometió, besando mi sien y riendo en voz baja para irse a su cita con su novio—. Te quiero, Vivi. ¡Gracias por ayudarme con los comentarios extra del profesor para las tareas de las vacaciones!

Se fue por el pasillo corriendo, ansioso por encontrarse con Anton en el estacionamiento. Suspiré, reajustando mi mochila para apresurarme a la oficina del profesor de Conversación Intermedia IV. Pero sentí a alguien chocar conmigo, lanzándome casi contra la pared contigua justo cuando iba a entrar por la puerta abierta de la oficina del profesor.

Levanté la mirada, los estudiantes amontonados dentro de la pequeña oficina y hablando al mismo tiempo recordándome que no tenía tiempo que perder. Pero el que chocó conmigo era Daeho, que compartía varias clases conmigo semanalmente. Me tomó de los hombros, riendo en voz baja.

—Oh, lo siento muchísimo, Vivienne. No te vi—apretó mis hombros en sus manos levemente, tragué saliva y sonreí nerviosa.

—Hola Daeho—su rostro se iluminó por un momento cuando dije su nombre, pero me solté de su agarre para seguir caminando—. No te preocupes, sólo venía a la oficina del profesor de Conversación para tomar mis notas pre-vacacionales.

Su rostro cayó cuando me escabullí, oscureciendose por un segundo, pero le restó importancia.

—Claro, no importa.

Fue todo lo que dijo, con voz tensa. Asentí con la cabeza, restándole importancia y entrando en la oficina. Habíamos al menos siete u ocho personas ahí dentro, y no había espacio para ambos, así que tuve que quedarme en la pared al lado de la puerta, entre la entrada y el estante de materiales de estudio y libros del profesor. Me agaché, abriendo mi mochila al quitármela del hombro para tomar mi lapicera y libreta, escuchando al profesor hablar.

—Tendrán que aplicar lo aprendido en el semestre para la tarea de vacaciones, quiero que entrevisten a tres personas que crean influyentes de alguna forma en la exposición de la cultura coreana, y que hagan uso de las herramientas conversacionales que enseñé...—con mi lapicera anoté todo rápidamente, escribiendo en coreano y no en francés para acortar las palabras más rápido. Me mordisqueé el labio, escuchando a todos hacer preguntas aquí y allá.

—Pero profesor Seo, ¿qué consideraría usted una persona influyente para la cultura coreana?—una estudiante americana preguntó, tracé una línea en mi libreta y anoté "qué persona influyente para la cultura?" junto a un círculo dibujado apuradamente. Miré al profesor Seo, esperando su respuesta.

—Alguien que haga aportes a la cultura sería un escritor, un escultor, un empresario que haga negocios extranjeros...

Se me prendió el bombillo. Levanté el brazo, pidiendo la palabra para que me viera desde su escritorio, yo tan atrás.

—Sí... Eh...—parecía que no podía verme con todos los estudiantes delante de mí.

—Kim Bibi—le dije.

—Oh, Bibi, hola. Dime, ¿tienes preguntas?

—Sí, necesito saber si un idol contaría cómo persona influyente para entrevistar.

미술 (art) - hwang hyunjin (stray kids) (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora