Capítulo 94

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Al igual que en una cámara lenta, los espectadores fueron testigos de como la lanza impactaba contra la frente de la estatua del Dios de los mil ojos y de los cien brazos causando un gran hoyo agrietado sobre ella

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Al igual que en una cámara lenta, los espectadores fueron testigos de como la lanza impactaba contra la frente de la estatua del Dios de los mil ojos y de los cien brazos causando un gran hoyo agrietado sobre ella. Las visiones escuchando el llamado de la Yaksha, levitaron hasta llegar a ella, cada una de ellas brillaban conforme el color de su elemento y se mantenían vivas como si la ambición de sus dueños aún vivieran en ellas.

Bonanus levanto su mirada para observar a la Shogun Raiden. La marioneta se había mantenido quieta desde el momento que la lanza impactó con la estatua, sin embargo, el silencio que se formó alrededor de ella se desvaneció con el sonido de los truenos. Las nubes de tormenta aparecieron sobre los cielos acompañadas de los rayos furiosos que escuchaban el llamado de su compañera, las gotas de lluvia cayeron sobre la ciudad provocando que todos los humanos corrieran a refugiarse en sus casas o en algún puesto cercano.

Ante la atenta mirada de los espectadores que observaban la escena, el cuerpo de Shogun Raiden se cubrió de rayos y una poderosa energía elemental. La gravedad bajo volviéndose pesada y fría, el enorme poder de la Todopoderosa Shogun Raiden fue presenciado en toda la ciudad. En estos momentos lo que más temían los humanos, era la ira de laArconte Electro.

Agatha no pudo evitar tragar saliva, su cuerpo sintió el cambio en la gravedad y la temperatura al estar frente a un ser tan poderoso, escuchaba la voz de la muerte llamándola. Su ceño se frunció, ella no podía dejarse llevar por el miedo y no era el momento de dudar, necesitaba hacer esto. La escena de juego original se repitió frente a sus ojos, Raiden Shogun invocó su katana desde el centro de sus pechos junto a la energía electro, en ese momento, las grietas en la estatua se hicieron más grandes y Agatha presenció como la estatua se hacía añicos detrás de la marioneta.

En un pestañeo, Bonanus encerró las visiones en un cubo de Hydro e invocó una espada para bloquear el ataque de la marioneta que vino tan pronto y la estatua se hizo añicos. Los cielos tronaron al presenciar el impacto de sus ataques, Raiden levito sobre los cielos y miró a la Yaksha desde arriba. Entonces, se lanzaron a ataque con un hermoso baile de choques espadas.

Lo único que podía verse sobre los cielos, eran los brillos elementales de las mujeres cuando chocaban al pelear e incluso el viento que dejaban con los impactos. Duraron peleando con espadas por unos minutos, hasta que ambas se separaron quedando Raiden sobre los cielos, la mirada penetrante de la Diosa cayó sobre la Yaksha.

Una sonrisa se dibujo en los labios de Bonanus. Raiden se mantuvo con una expresión inexpresiva en todo momento, ninguna de las dos hablaban pero era obvio que una de ellas no disfrutaba la pelea ya que su único propósito era eliminar a su enemigo.

Raiden la apunto con la punta de la katana y sobre ella apareció el enorme ojo del castigo atronador una de las habilidades con las que Agatha estaba familiarizada gracias a su experiencia en el juego original. Dejo salir un enorme suspiro dejando que toda la tensión se fuera de su cuerpo, tomo la máscara de dos rostros que colgaba de su cintura y la llevo a su rostro, la espada en su mano desapareció y en su lugar apareció su lanza.

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