Capítulo 29

210 30 13
                                    

Las tardes para Minatozaki Sana estaban volviendo a ser muy abrumadoras, tenía mucho trabajo por hacer en su empresa, reuniones, papeles por firmar, juntas importantes y mucho sobre lo que tenía que encargarse ella sola. Extrañaba a Jihyo, además de ser de gran ayuda en la empresa, su compañía tranquilizaba mucho a la nipona. Desde que ella no está, ha estado más estresada y ahogada en todo su trabajo, por culpa de eso, no había tenido tiempo de visitar a Jihyo, se sentía mal de no poder ir, pero tenía obligaciones y su deber era cumplir con ellas.

Por lo que le ha contado Mina y sus amigas, a Jihyo no le falta mucho tiempo para poder salir del hospital, esto tranquiliza a Sana, pero no del todo.

Minatozaki deja de lado todo el papeleo que hay en el escritorio frente a ella para posar sus manos en su cabeza, suspira agotada, sus pensamientos no la dejan en paz de nuevo. No puede concentrarse en su trabajo, está pensando en que hará con Miyeon. Se siente abrumada, pues está segura que Jihyo le gusta, tal vez hasta esté enamorada, no lo sabe con exactitud, pero ese no es el problema para ella, su gran problema es su todavía novia, Cho Miyeon.

La castaña sabe que ya no siente lo mismo por Miyeon, y eso está bien, pues solo recordar todo lo que la contraria le ha hecho la hace despreciarla aún más. En el fondo ella también se siente culpable, besó a Jihyo sin importarle si estaba siendo infiel o no, pero, aún teniendo esa sensación de culpabilidad por lo ocurrido, no se arrepentía de nada.

La simple idea de dejar a Miyeon e irse con Jihyo y formar una familia se estaba convirtiendo en su deseo favorito. Ella quería hacerlo.

Pero, ¿Cómo?

—Debo hacer algo pronto.—Se dijo Sana así misma mientras llevaba su cabello hacia atrás.

Por otro lado, Mina se encontraba en su apartamento preparando el desayuno para Chaeyoung, Tzuyu y ella.

La pelinegra tomó un tenedor del cajón y comenzó a revolver con este los huevos que juntó en un bowl. No había dejado de pensar en las palabras de Jihyo, ese día la mayor había hecho prometerle que no le diría nada a Sana, fue difícil que aceptara, no le gustaba ocultarle cosas así a Sana, ella sabía que su hermana entendería y apoyaría a Jihyo, aunque no entendió su deseo, aceptó, pues de todas maneras, era decisión de Jihyo si contarle o no.

Pero, por supuesto Mina no iba a dejar que todo se quedara así.

Cuando Park le contó sobre la situación con su esposo, ella recordó las palabras de su novia, se sentía tonta, pues cuando todas creían que Chaeyoung exageraba, ella siempre tuvo la razón. Ese día llegó a casa, pensó en si contarle o no lo dicho por la pelinegra, pero no tuvo el valor, se sentía avergonzada.

Luego de algunos días, decidió dejar de retrasar más las cosas y contarle a Chaeyoung lo sucedido, bueno también a Tzuyu, así fue como terminó preparando el desayuno para las tres.

No le desagradaba Tzuyu, de hecho, le caía bien, solo había tenido pequeños ataques de celos, pues Chaeyoung estaba pasando la mayoría del tiempo con la taiwanesa, todo esto bajó cuando por fin habló con su novia y ambas prometieron pasar tiempo juntas, luego de resolver el caso de su amiga, por supuesto.

Vió a Chaeyoung sentarse en la mesa del comedor junto a Tzuyu, comenzó a contarle todo lo que ella le había dicho anteriormente. Ahora con nueva información, las tres sabían que sería mucho más fácil encontrar a el abusador y meterlo en la carcel de una vez por todas, solo había un pequeño problemita.

Había que convencer a Jihyo de denunciarlo.

Se frustró en cuanto ese pensamiento golpeó su cabeza, Jihyo ya había mandado a cerrar el caso una vez, ¿Qué la hacía pensar que lo denunciaría? Ella ni siquiera quería contarle a Sana.

Se desanimó por completo.

—Minari.— llamó Tzuyu, haciéndola salir de sus asfixiantes pensamientos.

Fue a sentarse en la mesa junto a ellas a charlar sobre todo, unirían puntos importantes, y pensarían en cómo convencer a Jihyo de denunciar a Kang Daniel.

...

—Al fin terminé de firmar todo, estoy realmente cansada, mi muñeca duele.— dijo Sana adolorida mirando la montaña de papeles a su lado, ser dueña de tu propia empresa no es nada fácil.

Minatozaki se prometió así misma terminar todo su trabajo en el menor tiempo posible e ir con Jihyo, extrañaba su presencia, ahora más que nunca. Luego de ese beso se sentía especial, amada y suficiente, tal vez exageraba un poco pero se sentía realmente bien desde aquel día.

El trabajo fue duro para ella, no tanto pues estaba acostumbrada a tener que estar horas y horas sentada en su lugar de trabajo chequeando documentos y monitoreando que todo estuviera bien.

Tardó 4 días en terminar su abrumante trabajo, lo que había sido una eternidad para ella, no solo había estado firmando cosas, tenía juntas con empresarios importantes, también tenía pendiente ver las próximas dos sucursales de sus productos, monitorear que todo estuviera bien en la empresa, ver las entrevistas de trabajo entre otras cosas.

A simple vista pareciera que no tuviera personal para hacer ese tipo de cosas, pero si hay algo que a Sana le encantaba era supervisar ella misma que todo estuviera marchando como ella quería.

...

¿Cómo andan? Espero que muy bien, como les dije, ya casi estamos por acabar la serie, tengo una nueva en mente que seguro les gustará.

Cuando el capitulo llegue a 100 views o 25 votos les actualizo, gracias por el apoyo y también gracias a mis nuevos seguidores, los quiero muchoo.

"Sálvame" [Sahyo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora