Le Vengeur Du Ciel - B. B

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—¡Ayúdenme! Tenemos que meterla antes de que se despierte —habló Jasper.

Alissa entró a la cueva al último, se había quedado pensando.

—Jaha está usándolos para controlar a la gente. Te tragas el chip, olvidas quién eres y lo siguiente es comenzar a ver a Alie, que es una ilusión —explicó Jasper —la hizo cortarse las muñecas. Intentó sacarla de su cabeza pero no pudo.

—Bien, intentemos eso. ¿Te dijo como? —pregunta Sinclair.

—Intentó inventar algo, necesitaba uno de nuestros viejos brazaletes pero Jaha los destruyó —dijo Jasper.

—Espera un segundo —habló Clarke y sacó la llama —¿Se parece a esto?.

—¿Que mierda haces con eso? —habló Alissa acercándose peligrosamente a la rubia, fue detenida por Bellamy.

—No es el momento —susurró Bellamy en su oído.

—Nunca es el momento para ti —la chica se alejo de el.

Cuando Alissa estaba por salir de la cueva, Raven despertó.

Atacó a Jasper y golpeó a la castaña, salió corriendo e intentó buscar donde estaban ubicados pero Jasper le inyectó un tranquilizante.

—Se donde encontrar un brazalete —habló la rubia.

—Bien, es hora —Alissa empezó a caminar.

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—Skaikru no es bienvenido aquí, Skaiheda —habló Niylah.

—¿Que sucede? —preguntó Clarke.

Raven ya estaba despertando.

—Su padre fue uno de mis guerreros, los trescientos muertos, esos mismos que mande a protegerlos —Alissa se separó del abrazo que le dio a Niylah.

—No tenemos tiempo —Bellamy apuntó a la terrestre con su arma.

Alissa no tuvo tiempo de detener al moreno porque Raven ya había despertado y tenía que ir a ayudar a atar a la chica.

—Baja el arma —Alissa sacó su espada, no le haría daño al chico pero era para que siguiera su indicación, cosa que si hizo.

Después de un tiempo donde Alissa estaba al lado de Bellamy sin decir nada, la chica se hartó y habló.

—¿Estás bien? —pregunta la castaña.

—Lo estoy —no miró a Alissa.

—Bellamy, no tienes por qué mentirme. Lo sabes, ¿No?.

—Lo se —el chico seguía sin mirarla.

—Creo que entendí que lo hacías solo para sobrevivir —ahi fue cuando el moreno la vio —pero no entiendo, ¿Por qué no me mataste a mi? Soy una terrestre ahora, te podría atacar.

—¿No lo entiendes? No lo hice porque te amo, no podría matar al amor de mi vida —Bellamy cogió la cara de la chica.

—Pero si pudiste matar a la gente del amor de tu vida. Dejaste que Lincoln muriera, el es mi gente, los trescientos guerreros que mataste eran mi gente, Zoe también lo era —sabia que había tocado una fibra sensible en el chico.

—Gina era importante para mí y lo sabías.

—Vengué su muerte matando a la reina, le clavé una lanza a mitad de la batalla en el corazón —se apartó de Bellamy.