El sol está alto en el cielo cuando Yuki Blaze llega al campo de entrenamiento de Raimon. A pesar de haber pasado una noche estudiando, su mente está enfocada en el próximo desafío: un partido amistoso contra un equipo extranjero que ha llegado a Japón para medir sus fuerzas. Los jugadores ya están reunidos, realizando ejercicios de calentamiento bajo la supervisión de su entrenador.
Yuki se une al grupo, saludando brevemente a sus compañeros. Aunque su semblante sigue siendo frío y calmado, los demás pueden sentir la tensión en el aire. Todos saben que este partido es más que un simple amistoso; es una oportunidad para demostrar su crecimiento y fortalecer el equipo antes del torneo internacional.
Hilman: ¡Bien, equipo! Hoy nos enfrentaremos a los Silver Hawks, un equipo que destaca por su coordinación. Será un buen desafío para nosotros, así que quiero que den lo mejor.
Los jugadores asienten con determinación. Yuki, sin embargo, se mantiene en silencio, observando al equipo contrario mientras calientan en el lado opuesto del campo. Reconoce en ellos una técnica refinada y un enfoque serio. Esto solo aumenta su deseo de mejorar.
Mientras los jugadores terminan de calentar, Axel Blaze se acerca a Yuki. Aunque son primos, sus interacciones son cercanas y a la vez profesionales, respetando el espacio del otro.
Axel Blaze: - Yuki, ¿cómo te sientes para este partido? Los Silver Hawks no son un equipo fácil.
Yuki gira la cabeza para mirar a Axel. Su expresión es neutra, pero hay una chispa de desafío en sus ojos.
Yuki Blaze: - Estoy listo. Este partido es solo otro paso en nuestro camino. Sabes que no me gusta subestimar a mis oponentes, pero tampoco me intimidan.
Axel sonríe ligeramente, reconociendo el espíritu competitivo de su primo.
Axel Blaze: - Eso es lo que me gusta escuchar. Pero recuerda, no todo se trata de ganar. Este es un partido amistoso, así que también es una oportunidad para aprender. No te presiones demasiado.
Yuki asiente, aunque sabe que para él, cada partido es una oportunidad para demostrar su valía, no solo a los demás, sino también a sí mismo.
Yuki Blaze: - Lo sé. Pero aún así, no pienso darles ninguna ventaja.
El árbitro sopla el silbato, marcando el inicio del partido. Los Silver Hawks comienzan con el balón, mostrando una velocidad y coordinación impresionantes desde el principio. Sin embargo, Yuki y sus compañeros no se quedan atrás. Con una defensa sólida y un ataque bien organizado, Raimon logra mantener el control del juego.
Yuki, como medio centrocampista en el Raimon, está en su elemento. Con su técnica Paso de Hielo, se desliza por el campo con elegancia, superando a los defensores rivales con facilidad. Cada movimiento es calculado, preciso, como si estuviera bailando sobre el césped.
En un momento crítico, uno de los delanteros de los Silver Hawks logra acercarse peligrosamente a la portería de Raimon. Sin dudarlo, Yuki se posiciona y utiliza su técnica Muro de Nieve. Una barrera de energía fría se materializa, ralentizando el tiro del oponente lo suficiente como para que el portero de Raimon pueda detenerlo.
Comentarista: Yuki Blaze demuestra una vez más su habilidad para leer el juego y proteger a su equipo. Su frialdad bajo presión es lo que lo convierte en uno de los pilares de Raimon.
Pero Yuki no se detiene ahí. Cuando se presenta una oportunidad, avanza rápidamente con el balón, preparando su ataque más letal: la Tormenta de Copos. Concentrando su energía, lanza un tiro poderoso, el balón cubierto de cristales de hielo brilla bajo el sol, desorientando al portero de los Silver Hawks. El gol es inevitable.
Grito del Público: ¡GOL! ¡Yuki Blaze marca para Raimon!
FINAL DEL PARTIDO
El partido termina con un empate, pero ambos equipos se sienten satisfechos. Los Silver Hawks se acercan para felicitar a Raimon, reconociendo la habilidad y el espíritu de lucha del equipo japonés.
Mientras los demás jugadores se toman un momento para relajarse y celebrar el buen desempeño, Yuki se retira a un rincón del campo, tomando un poco de agua. Está satisfecho con su actuación, pero sabe que siempre hay espacio para mejorar.
Es entonces cuando nota a Camellia Travis observándolo desde la distancia. Ella duda un momento antes de acercarse, todavía mostrando su timidez habitual.
Camellia Travis: (Con una voz suave) - Yuki... jugaste muy bien hoy.
Yuki se gira hacia ella, dándole una pequeña sonrisa.
Yuki Blaze: - Gracias, Camellia. ¿Qué te pareció el partido?"
Camellia juega con un mechón de su pelo, claramente nerviosa pero queriendo ser sincera.
Camellia Travis: - Fue... impresionante. Tu técnica es increíble. Es como si estuvieras en un mundo aparte cuando juegas.
Yuki Blaze: - Para mí, el campo de fútbol es donde todo se aclara. Pero también es importante tener personas que te apoyen, dentro y fuera del campo. Tú eres una de esas personas para el equipo.
Camellia se ruboriza ante las palabras de Yuki, sintiéndose un poco más segura en su rol como gerente.
Camellia Travis: - Gracias, Yuki... eso significa mucho.
Antes de que la conversación pueda continuar, Axel Blaze se acerca, interrumpiendo el momento.
Axel Blaze: - Yuki, el entrenador quiere hablar contigo. Camellia, gracias por todo tu apoyo hoy.
Camellia asiente y se despide tímidamente antes de alejarse. Yuki, viendo su reacción, sonríe ligeramente antes de dirigirse al entrenador.
Entrenador Hillman: - Ya sé lo he dicho a tus compañeros, pero mañana vendrá el nuevo entrenador que me sustituirá en mis labores
Yuki Blaze: - ¿Tu no estarás más?
Entrenador Hillman: - Os veré jugar, pero yo no os puedo enseñar más, ya sabéis todo sobre mis lecciones, además ya estoy algo viejo y creo que uno nuevo no viene mal, yo echaré un cable en todo lo posible
Yuki Blaze: - Si es así, me parece bien
Entrenador Hillman: - Apa, buenas noches y descansa muchacho
Yuki Blaze: - Igualmente entrenador (lo dice con una sonrisa mientras se aleja, con la mano extendía despidiéndose)
![](https://img.wattpad.com/cover/375452932-288-k921397.jpg)
ESTÁS LEYENDO
La Tormenta de Inazuma eleven
ФанфикUna historia con un chico con un pasado misterioso y horrible que empieza a conocer el amor del futbol, todo empieza con un chaval llamado Yuki Blaze, primo cercano de Axel Blaze que por motivos de la vida tuvo que jugar con la Royal Academy