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Es el fantasma de un famoso jugador de fútbol de los años 30. Es muy agresivo y ríe malvadamente cuando captura a sus víctimas. Tiene piel gris, ojos rojos con pupilas blancas y rayas negras pintadas en la cara. Usa una camiseta blanca rota con el número 13, un casco de fútbol rojo y blanco, pantalones grises y zapatos negros.
Aparece en el episodio "Scooby Doo y el fantasma del estadio".
La pandilla asiste a un partido de fútbol de los Hawks contra los Sharks, animando a los Hawks. Pero, de repente, se producen fuegos artificiales y, en medio de todo el humo y la emoción, el jugador estrella del equipo, Flash Granger, desaparece y repentinamente aparece el fantasma de un jugador de fútbol muerto hace mucho tiempo en la parte superior del marcador. La pandilla se dirige a la casa del Sr. Prentice, el dueño del estadio, para hablar con él y resolver este lío. El Sr. Prentice explica que en los años 30, un jugador apodado el Fantasma Errante, fue abucheado y se fue del estadio, pronunció una maldición y nunca más se lo volvió a ver. Y esta noche, en el juego, regresó. La pandilla se pone a trabajar en el misterio.
Los chicos van a la sesión de práctica del equipo y otro jugador, Crunch Connors, les advierte que no se vayan. Luego buscan en el área donde Flash desapareció. Crunch Connors comienza a saltar sobre los neumáticos y luego desaparece también. De repente, el fantasma aparece y los persigue a todos. Scooby y Shaggy se alejan del fantasma errante y se encuentran con la pandilla. Se separan para buscar pistas. Scooby y Shaggy van al vestuario y encuentran un recorte de periódico, una pista valiosa. Pero el fantasma aparece y arrebata el periódico y persigue a Scooby y Shaggy hasta la sala de vapor y luego a las duchas. Finalmente escapan y se encuentran con Fred y las chicas. Velma, Daphne y Fred afirman que acaban de ver al fantasma entrar en el marcador, por lo que lo siguen. Dentro, encuentran la habitación destruida y al operador del marcador, el Sr. Ellsworth, quien dice que el fantasma futbolista lo atacó.
Un jugador llamado Bulldog aparece y le dice a la pandilla que también vio al fantasma entrar en el marcador. De vuelta en el campo, la pandilla encuentra una trampilla en el suelo que conduce al antiguo estadio; el nuevo estadio se construyó sobre el antiguo. Así es como desapareció Crunch Connors. Dentro del túnel, se separan y Velma, Scooby y Shaggy encuentran una antigua sala de trofeos del salón de la fama y al fantasma errante con el periódico. Se las arreglan para obtener el periódico y huir del fantasma, pero caen por una trampilla en una habitación, donde Flash Granger y Crunch Connors están retenidos como rehenes. Pero con la ayuda de Scooby escapan con Flash y Crunch.
Con una trampa muy inverosímil, consiguen atrapar al fantasma. Lo desenmascaran como el señor Ellsworth, el operador del marcador. Pero luego le quitan la cara y no es el señor Ellsworth. El Sr Prentice reconoce al culpable. Se trataba de Buck Bender, un antiguo entrenador que el Sr Prentice despidió hace años. Por lo visto Buck usó la leyenda del fantasma errante para vengarse por despedirle y quería el periódico para que nadie descubriera que dicho periódico tenía pruebas criminatorias contra él. Buck es detenido y el partido se reanuda.
La pandilla celebra cuando los Hawks se convierten en campeones al vencer a los Sharks y se ve a Scooby Doo parado encima de los dos jugadores de fútbol mientras anima.
