Atracción bajo reflectores

Clarificaciones y pasión

Karime, con una sonrisa traviesa todavía en el rostro, se despidió de los demás en la cocina y se dirigió a su cuarto. Necesitaba un momento de tranquilidad para dejar de reírse de la broma y relajar sus pensamientos. Sabía que la situación había puesto a Gala algo incómoda, pero no esperaba que su novia tomara la broma tan en serio.

Un rato después, Gala entró al cuarto. La puerta se cerró detrás de ella con un suave clic. Karime estaba sentada en la cama, mirando distraída hacia la ventana. Cuando escuchó el sonido de la puerta, se giró para ver a Gala.

—**¿Qué haces aquí?** —preguntó Karime con una sonrisa.

Gala se acercó con paso firme y un aire de determinación en su expresión. Sus ojos mostraban una mezcla de celos y preocupación, algo que Karime inmediatamente notó.

—**Solo venía a aclarar algo,** —dijo Gala, su voz algo tensa—. **Dices que te va mejor con Briggite, ¿no?**

Karime frunció el ceño, notando la seriedad en el tono de Gala. Se levantó y se acercó a ella, tratando de calmar la situación.

—**No, Gala, en serio. No me va mejor con Briggite,** —respondió Karime con sinceridad—. **Solo estaba bromeando, sabes que te amo solo a ti.**

Gala, sin decir más, tomó el rostro de Karime entre sus manos y la miró profundamente a los ojos. Con una intensidad que dejó a Karime sin aliento, Gala la besó apasionadamente. El beso era una mezcla de desesperación, amor y una necesidad de demostrar lo importante que era para ella.

Karime respondió con igual fervor, envolviendo sus brazos alrededor de Gala y atrayéndola más cerca. El beso se profundizó, convirtiéndose en una muestra tangible de todo el amor que sentían el uno por el otro. La tensión que había en la cocina se desvaneció, reemplazada por una conexión ardiente y sincera.

Finalmente, cuando se separaron, ambas estaban respirando con dificultad. Gala dejó escapar un suspiro y acarició el rostro de Karime, todavía cerca de ella.

—**No necesito que juegues con mis sentimientos, Karime,** —dijo Gala con una voz suave—. **Solo quiero que sepas cuánto significas para mí.**

Karime, con los ojos llenos de cariño, se inclinó hacia Gala y le dio un tierno beso en la frente.

—**Lo sé, mi amor. Y nunca jugaría con tus sentimientos. Tú eres todo para mí,** —dijo Karime con sinceridad.

Gala sonrió, sintiendo una ola de alivio. La intensidad del momento había demostrado que, a pesar de los juegos y las bromas, el amor entre ellas seguía siendo fuerte y verdadero. Se abrazaron, disfrutando del silencio y la calma que seguía a su apasionado beso.

Mientras se acurrucaban juntas, las preocupaciones del mundo exterior parecían desvanecerse, dejando solo el calor y la seguridad del amor que compartían.