12 años después, en la oficina de Hanni Pham Kim
- No, mamá... mamá... mamá... ¿Puedes dejar... madre... mamá... ¡MAGGIE! -a Hanni se le había terminado la paciencia. Llevaba casi media hora escuchando la aguda voz de su madre repasar cada una de las cosas que le molestaban a la mujer de su esposo, del padre de Hanni. La ahora rubia de nuevo, sabía que la relación de sus padres era perfecta y estaba llena de amor, pero muy de vez en cuando, también sabía que los dos mayores tenían etapas en las que le molestaba hasta la más pequeña y estúpida cosa de cada uno. Y eso era exactamente lo que Hanni llevaba escuchando por un buen rato y lo que a pocos días de su cumpleaños no iba a aguantar más.
- ¿Puedes dejarme hablar de una vez por todas? -esperó a que su madre rebuznara y que terminara con sus comentarios de "tienes el mismo carácter de tu padre"- Me da igual si te vienes antes o en un avión distinto que papá, mamá. De todas maneras no voy a poder ir a buscarte... ¡No me estoy poniendo del lado de nadie, mamá! Es solo que... -Hanni respiró hondo tratando de calmarse, había tenido unos días terribles y no quería que su madre pagara las consecuencias, ya demasiada culpa sentía por la pobre Olivia. La secretaria siempre era la primera en verla a la mañana y siempre era la primera que recibía sus desquites.
- Escucha, mamá -Hanni había logrado calmarse un poco- Ven cuando quieras, tú y papá pueden hacer lo que quieran, pero traten de llegar para el festejo ¿Sí? -Hanni pudo sentir a su madre respirar con una de las técnicas que el yoga le había enseñado para llamar a la paz- Las niñas extrañan a sus abuelos y yo a mis padres, no nos vemos desde las últimas vacaciones y presiento que este cumpleaños los voy a necesitar mucho más -para Hanni era una fecha especial.
- Sí, mamá, estoy bien, solo que... ¿Qué son esos gritos? -preguntó por las dudas, pero ya había reconocido la voz enojada de su padre a través del teléfono- ¿Por qué está gritan... -Hanni se tuvo que alejar el auricular de su oído para no ser taladrada por la no dulce melodía que formaban la voz gruesa de Daniel junto con la irritante voz de su madre- Dios mío -fue todo lo que dijo antes de colgar el teléfono. No pensaba quedarse a escuchar más.
- Ufff -Hanni se quitó los lentes y miró por un buen rato la pared pintada que tenía en frente. Todo una obra de arte que su mujer había hecho para ella- Mierda... -Hanni apartó su vista del dibujo y se agarró la cabeza con sus dos manos oscureciendo su visión. No podía soportar la idea de no tener a su esposa junto a ella.
- ¿PUEDES CREERLO? ¿PUEDES CREERLO? ¿PUEDES MALDITAMENTE CREERLO? -una vez sin educación alguna, Danielle estampaba la puerta de la oficina de Hanni para entrar quejándose como lo hacía usualmente.
Hanni descansó su espalda sobre su cómoda silla y miró a su amiga con poco interés, su cabeza estaba en otra parte sinceramente. Danielle paseaba delante de su escritorio echando humo como si fuera un antiguo tren de leña.
- ¿Acaso tengo cara de estúpida? ¿Acaso tengo cara de que todo me importa un carajo? ¿Acaso tengo cara de que me pueden pasar por arriba así nada más? ¡PUES NO! No la tengo -se contestó ella misma- Pero parece ser que la idiota de mi madre junto con la descarada de mi mujer piensa que sí, porque si no, NO ENCUENTRO OTRA MALDITA EXPLICACIÓN -llamen a los bomberos que Danielle iba a prender fuego a alguien en cualquier momento.
Hanni decidió hablar justo en ese momento- Extraño a Minji, Dani -parece que mucho del problema de su socia no había sido escuchado- no aguanto más -confesó- Y aún quedan muchos días, no sé qué voy a hacer -agregó preocupada.
- "Danielle... -era la misma Danielle que hablaba, nada más que tratando de imitar la voz de Haerin- Tu madre y yo hemos decidido que Xinyu se va a ir con ella y tu padre a recorrer Europa". ¿ACASO MI OPINIÓN NO IMPORTA, MALDITA SEA? -la mujer de piel pálida se tiró al sillón como si le hubieran dado un disparo en el pecho. Rápidamente usó su mano para cubrirse sus ojos.
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No soy para ti (Bbangzas)
Любовные романыHanni, una máster en negocios, está acostumbrada a tener todo y a todos bajo su control junto a su socia y mejor amiga: Danielle. Con un chasquido de dedos, Hanni consigue todo lo que quiere. Sin embargo, su vida comenzará a cambiar cuando tenga que...