No soy para ti (Bbangzas)

"¿El último regaño?"

En algún centro de estética de Los Ángeles

- ¿Pueden creerlo? ¿Pueden creerlo? —Hanni repetía la misma pregunta una y otra vez tratando de llamar la atención de alguna de las mujeres que estaban junto a ella— ¿Pueden creerlo? —repitió esta vez con un tono de burla. La empresaria tenía toda su cabeza empapelada en aluminio y la habían puesto bajo varios focos de color rojo que emitían calor. La novia de Minji tenía una revista en sus manos cuyas hojas estaban sufriendo la furia de una Pham porque Hanni las pasaba de un lado al otro sin importarle su contenido y mucho menos si su mano se quedaba con una página suelta. Maggie estaba a su lado con la revista 'People' en sus manos y tenía su cabeza en las mismas condiciones que su hija, la mujer parecía no prestarle atención a las quejas de Hanni y por el contrario se había quedado muy entusiasmada leyendo la noticia del nacimiento del hijo de Justin y Hailey. Del otro lado de Hanni estaba Danielle. La australiana era la otra mujer que la acompañaba en la misma fila de lámparas de calor, pero, al contrario de las mujeres Pham, Danielle solo tenía algunos mechones de pelo envueltos en aluminio y no estaba disfrutando de ningún chisme, sino que en una de sus manos tenía el contrato de compra y venta de la parte que pensaban adueñarse de 'Tiffany & Co' y en otra un resaltador amarillo con el que resaltaba las partes más interesantes de lo que leía. Al parecer la australiana estaba repasando punto por punto el escrito para que nada se les pasara por alto.

- ¡AAAAAAAAAHH! —Hanni ahogó un grito de furia en la revista que tenía en sus manos que para nada le movió un pelo a las dos personas que tenían a su lado, pero sí lo hizo con la morena bailarina que tenía enfrente y que se estaba dejando esculpir sus uñas por una jovencita que estaba concentrada tratando de dejar las uñas de Haerin a la última moda sin que su tarea se viera afectada por lo que hablaban el resto de las mujeres que estaban en el salón, lo que era prácticamente imposible.

- Han… —Haerin intentó pero Hanni la interrumpió sacando su cabeza de la revista.

- ¡Es que ni yo misma puedo creerlo! —afirmó— Mi novia, la mujer que amo, la mujer con la cual voy a tener un hijo…

- ¡Alabado sea el señor! —por un segundo, Maggie dejó de mirar la revista para hacer una plegaria hacía el cielo.

- La mujer que me hace el amor de una manera increíble… —siguió Hanni.

- ¡Alabado sea el rarón! —esta vez fue Danielle la que dejó el contrato para elevar una oración por el miembro de Minji.

- La mujer que me hace el ser más feliz de este planeta, logra que la deteste con tres estúpidas palabras… "es mi amiga"… "es mi amiga" —terminó haciéndole burla a la forma en que su novia se refería a Joy Tiffany.

- Hanni… —Haerin le reprochó— Tú no detestas a Minnie —le recordó como si Hanni no lo supiera.

- No, no la detesto —le dio la razón— la amo con todo lo que pensé que nunca podría llegar a amar a alguien —afirmó— Pero me desespera. Minji Kim me saca de quicio… ¡AAAAAAAAHH! —ahogó otro grito en la revista.

- No le hagas caso, Hae Hae —se metió Danielle— Hanni solo está celosa porque alguien quiere quitarle su rarón y llenarlo de diamantes —opinó— Cosa que yo no haría, a mí me gusta así en bruto, con todo su monstruoso tamaño resplandeciendo —agregó.

- Danielle… —Hanni había hecho un rollo con su revista— Primero que nada, no estoy celosa y segundo, a ti no tiene por qué gustarte algo que no has visto y que no te pertenece ¿De acuerdo? —su voz no temblaba.

Danielle soltó una carcajada seca y corta mientras pasaba la página del contrato— Por favor Han, no sigas mintiendo que por más que trates tu nariz no va a ser más grande que el pito de tu novia —la joven que le limaba las uñas a Haerin le pifió un poco a la forma circular que le estaba dando a la uña del dedo gordo del pie— No estás celosa, estás MUY celosa, y no lo he visto en vivo y en directo pero con lo que he visto que alcanza para imaginarlo y soñarlo todas las noches —dijo muy segura.