Hallownest; El Reino por Reconstruir (Libro 2)

Capítulo 32: City of Tears

   Este, es uno de los pocos lugares grandiosos de Hallownest, el cual, en sus mejores momentos, fue la ciudad principal y más moderna del reino, bendecida, con lluvias interminables, además de una mítica belleza, con alegres ciudadanos, y acomodados habitantes, quien iba a pensar, que en aquel pasado, se convertiría en la cuna de la histeria colectiva, haciendo que estos instruidos insectos, se comportaran más salvajes, que los mismos residentes de Royal Waterway’s, haciendo, que, este sitio, hiciera gala de su nombre.

● Así que, este es el monumento que mandó a construir el rey — menciona Seeker.
● Una estatua más acorde para este lugar, si me lo permiten decir — acota Ghost.
● Mi hermano, después de lo que ocurrió en Cristal Peak, decidió que el monumento, debía ser en honor a los insectos que murieron, antes y durante la infección — cuenta Hornet, suspira y prosigue — esto, es para no olvidar, el sufrimiento del pasado y rememorar a los que partieron.
● ¿No te molesta que haya quitado también a los soñadores? — pregunta Ghost, refiriéndose mas que nada a Herrah.
● Para nada — niega la reina interina y continúa — los soñadores, no fueron víctimas, porque cada uno recibió su pago en vida, además, si lo dices por mi madre, ella, está en la memoria de las arañas y weavers — responde Hornet, agregando de forma tajante — por lo demás, el monumento anterior, solo era para limpiar la consciencia de algunos.
● Estoy completamente de acuerdo con eso — habla la Dama Blanca, quien llega junto a Iselda y Dryya.
● ¿Qué la trae por aquí, raíz? — pregunta Ghost, sumamente informal.

Recibiendo un codazo de Seeker, quien lo mira con desaprobación.

● Disculpe la rudeza de mi señor y general, Dama Blanca — excusa Seeker.
● No te preocupes, querida, se muy bien que su general, es la encarnación del dios del vacío, así que, no hay diferencia jerárquica entre nosotros — responde la Dama en cuestión, quitando seriedad al asunto.
● Sí, Seeker, deja de ser tan formal, aquí solo hay conocidos — suelta el Ghost, relajadamente.

La embajadora, no muy convencida, se pone a mirar a todos alrededor, recibiendo sólo gestos de aprobación.

● Está bien, me relajare un poco, pero, solo un poco, recuerde a lo que hemos venido — menciona Seeker.
● ¿A qué han venido?, si, se puede saber — consulta la Dama Blanca.
● Vamos al ayuntamiento de la ciudad, Elder Miner, nos ha entregado un nuevo informe, sobre el laboratorio que pertenecía a Soul Master, un par de insectos fueron a investigar, pero, llevan dos jornadas sin noticias — explica Hornet.
● Quizás los experimentos de ese lunático, aún estén pululando el lugar — comenta la reina madre.
● Es lo más lógico — asiente Hornet.
● Y es por eso que hemos venido, conozco bien a esos experimentos y son bastante molestos — señala Ghost.
● Además, todo indica que tras esto, está la garra de Lier — agrega Seeker.
● Acaso, ¿no fue encerrada en el Abismo? — susurra Iselda, confusa.
● Lo fue, pero, con Lier, nada es cien por ciento seguro — señala la embajadora.
● Bueno, si, es así, no les quitamos más tiempo, tengan buena cacería — se despide la Dama Blanca y se va junto a su escolta, quienes se despiden, reverenciando.
● Nosotros, también debemos irnos — informa Hornet, a sus acompañantes.

Siendo de está manera, que ambos grupos dejan el lugar, sin percatarse, que al otro lado del monumento, se encuentra Light, sentada en el suelo, escondida, mientras presiona una pequeña caja en su garra, la cual, había adquirido, hace solo unos instantes atrás.

● ¡Bienvenidos! — una alegre, pero, anciana cochinilla, saluda a sus visitantes.
● Saludos Elder Miner — reverencia Hornet, posteriormente presentando — ellos son, el general Ghost y la embajadora Seeker.
● Un placer conocerlos, y agradezco que hayan sido voluntarios en esta búsqueda — sonríe el anciano, relatando — habíamos sellado el edificio, pero, unos antiguos científicos del lugar, quisieron ir a revisar, les autorice, pero, dos jornadas han pasado y los guardias en la puerta, no saben nada de ellos.
● Entonces, no perdamos tiempo, hay que ir de inmediato — interviene Ghost.