Hallownest; El Reino por Reconstruir (Libro 2)

Capítulo 6: Jornada de Información

   La jornada ha pasado muy rápido y muchos acontecimientos han ocurrido en ella, la anterior jornada, Gustavio junto a los suyos, fueron enviados a Dirtmouth, para entregar una misiva a la casa real de Hallownest y ahora, han ido a entregar regalos, muy temprano, casi al empezar dicha jornada, en tanto, Ghost y Light, fueron con Unn, mientras Seeker, se encarga de otras cosas, las cuales no, nos adelantemos en contar, ya que la jornada, aun no acaba.

● ¿No me digas qué el rey volvió a quedarse trabajando toda la penumbra? — consulta la raíz.
● Sí, alteza — asiente Sly.
● Es decir que esta jornada comeré sin él — entristecida, murmura la Dama Blanca.
● Jamás he faltado a una comida con usted, por mucho trabajo que tenga y esta jornada no será la excepción — asegura Hollow, entrando al salón, continuando — Sly, Iselda, coman con nosotros, por favor.
● Pero, majestad, mi deber es estar atenta a las necesidades de la reina madre — se excusa la hormiga, quien es, la guardia personal de la Dama Blanca.
● Iselda, esto no intervendrá con tu trabajo o el de Sly, pueden tomarlo como un pequeño agradecimiento por su arduo trabajo — solicita la reina madre amablemente.
● Pidiéndolo de esa forma, creo que Iselda y yo, aceptaremos la invitación, alteza — reverencia Sly.

Ambos insectos se sientan a la mesa, cerca de sus respectivos protegidos, quienes comienzan una nueva platica.

● Elderbug, me contó que unos extranjeros volvieron, después que se les autorizara una entrada diplomática — menciona, la Dama Blanca.
● Es cierto — Hollow asiente y detalla — ellos esperaban autorización para su embajadora y acompañantes, de hecho, les di una audiencia, dentro de dos jornadas, madre.
● Interesante y ¿de, dónde vienen nuestros visitantes? — consulta la raíz.
● La ciudad de la lluvia, en el territorio de la tierra de las tormentas — revela el rey y al ver a su madre, mas pálida de lo que es, continúa — tranquila, envié a Sly para averiguar, si sus intenciones son pacíficas, ¿no es así, Sly?
● Sin duda lo hizo, su alteza — asiente Sly.
● Y, ¿cuál fue el resultado? — consulta la Dama Blanca.
● Bueno, rey Hollow, antes me gustaría, hablar con usted en privado — menciona el primer caballero.
● ¿Qué te preocupa Sly?, aquí solo hay insectos de confianza — alienta Hollow.
● Gracias por eso, majestad — reverencia Iselda, quien había estado atenta a todo.
● ¿Algo de lo que averiguaste, debe preocuparnos Sly? — consulta la Dama Blanca, calmada.

Luego de un suspiro, el amante del geo habla.

● La primera vez que me hablé con los extranjeros, como el rey bien sabe, me contaron sobre su ciudad y economía, también, pude tener información sobre su templo, aunque ahí, no se adora a ningún dios — Sly, comienza el relato.
● Entonces, no se trata de los buscadores de dioses — suspira aliviada, la Dama Blanca.
● Bueno, esa fue la primera vez que los vi — aclara Sly y prosigue — en esta jornada muy temprano, volví a encontrarme con el señor Gustavio, el líder de los comerciantes de esas tierras y como, ya me ha tomado confianza, me contó un poco más.

Después de esas palabras, Sly se detiene y observa al rey, confirmando su decisión, de contar todo ante los presentes.

● Prosigue — recibe de parte del rey.
● El mercader,  por órdenes de su embajadora, trae regalos para la familia real, serán entregados durante la jornada — comenta el amante del geo.
● Interesante — dice la reina madre.
● Así es alteza, ya que traen productos nunca antes vistos en Hallownest, sedas finísimas de gusano, setas, hojas frescas, raíces dulces, entre otras cosas, también me contaron del templo de la lluvia, que gracias a ese lugar, pueden obtener sus recursos — el amante del geo, sigue su relato.
● ¿Cómo es eso? – consulta Iselda por el asombro.
● Me dijeron que si quería saber un poco más como funcionaba, fuera hablar con sus señores en las afueras, en el hotel de Howling Cliffs, que les dijera además que iba parte del señor Gustavio — suspira y continúa —… y así lo hice.